- Llama al máximo tribunal a atenerse al derecho de la mujer a decidir
- Sugiere Carrancá y Rivas a la Corte no complicarse con el tema del aborto
- Recuerda el jurista que la ALDF tiene plenas facultades para legislar en materia penal
El constitucionalista Raúl Carrancá y Rivas recomendó a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) “no meterse en camisa de 11 varas” con la resolución que tomarán sobre la despenalización del aborto en la ciudad de México. Durante una entrevista realizada en la sede del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal, el jurista consideró que el máximo tribunal del país deberá tomar en consideración dos aspectos respecto a ese tema, el primero, que la Asamblea Legislativa de esta ciudad (ALDF) tiene plenas facultades, como poder autónomo, para legislar en materia penal, y la otra, “que se atenga al derecho de la mujer en decidir en conciencia si quiere abortar”.
Un día antes, el presidente de la SCJN, Guillermo Ortiz Mayagoitia, ofreció una conferencia de prensa en la que calificó como “tema relevante” las reformas legales aprobadas el año pasado por los diputados locales mediante las cuales se despenaliza la práctica del aborto de la primera a la semana 12 de gestación, por lo cual en este año entrarán a fondo a su discusión para resolver este recurso interpuesto por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y la Procuraduría General de la República (PGR). Carrancá y Rivas consideró que la Corte debe ser cuidadosa al momento de tomar la decisión definitiva en torno a ese asunto, pues su imagen se vio seriamente afectada después de la resolución tomada en torno al caso de Lydia Cacho, en la que consideró que no hay elementos para proceder en contra del gobernador de Puebla, Mario Marín, por su presunta implicación en una confabulación en contra de la periodista, quien denunció hechos de pederastia del empresario Kamel Nacif.
“Otro yerro más, sería lamentable para la credibilidad de la Corte”, añadió.
–¿Qué camino tendría que seguir la discusión y definición de la acción de inconstitucionalidad sobre aborto?–, se le preguntó al constitucionalista.
–Yo pienso que, en primer lugar, deberá ser respetar la resolución de la Asamblea Legislativa, pues tiene plenas facultades para legislar en materia penal. Sé muy bien que la CNDH y la PGR interpusieron una acción de inconstitucionalidad, pero pienso que la Corte debería considerar –no lo hizo en el momento oportuno, pero nunca es tarde para recapacitar– que no es facultad de ella intervenir en las decisiones de un poder autónomo, como lo es la Asamblea Legislativa.
“Independientemente del estatus jurídico que tiene la ciudad de México –dijo–, me parece que la Asamblea es el Poder con capacidad para legislar en su especie; y en segundo lugar espero que la Corte, y en especial el ministro ponente, se hagan cargo de lo complejo de ese asunto, y no se metan en camisa de 11 varas dilucidando sobre el comienzo, el inicio de la vida, la metafísica, la religión, sino que se atengan al derecho de la mujer de decidir en conciencia si quiere abortar o no”.
Y concluyó: “mi opinión es que la mujer debe decidir sobre este asunto con entera y absoluta libertad”.
Un día antes, el presidente de la SCJN, Guillermo Ortiz Mayagoitia, ofreció una conferencia de prensa en la que calificó como “tema relevante” las reformas legales aprobadas el año pasado por los diputados locales mediante las cuales se despenaliza la práctica del aborto de la primera a la semana 12 de gestación, por lo cual en este año entrarán a fondo a su discusión para resolver este recurso interpuesto por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y la Procuraduría General de la República (PGR). Carrancá y Rivas consideró que la Corte debe ser cuidadosa al momento de tomar la decisión definitiva en torno a ese asunto, pues su imagen se vio seriamente afectada después de la resolución tomada en torno al caso de Lydia Cacho, en la que consideró que no hay elementos para proceder en contra del gobernador de Puebla, Mario Marín, por su presunta implicación en una confabulación en contra de la periodista, quien denunció hechos de pederastia del empresario Kamel Nacif.
“Otro yerro más, sería lamentable para la credibilidad de la Corte”, añadió.
–¿Qué camino tendría que seguir la discusión y definición de la acción de inconstitucionalidad sobre aborto?–, se le preguntó al constitucionalista.
–Yo pienso que, en primer lugar, deberá ser respetar la resolución de la Asamblea Legislativa, pues tiene plenas facultades para legislar en materia penal. Sé muy bien que la CNDH y la PGR interpusieron una acción de inconstitucionalidad, pero pienso que la Corte debería considerar –no lo hizo en el momento oportuno, pero nunca es tarde para recapacitar– que no es facultad de ella intervenir en las decisiones de un poder autónomo, como lo es la Asamblea Legislativa.
“Independientemente del estatus jurídico que tiene la ciudad de México –dijo–, me parece que la Asamblea es el Poder con capacidad para legislar en su especie; y en segundo lugar espero que la Corte, y en especial el ministro ponente, se hagan cargo de lo complejo de ese asunto, y no se metan en camisa de 11 varas dilucidando sobre el comienzo, el inicio de la vida, la metafísica, la religión, sino que se atengan al derecho de la mujer de decidir en conciencia si quiere abortar o no”.
Y concluyó: “mi opinión es que la mujer debe decidir sobre este asunto con entera y absoluta libertad”.
Kikka Roja
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