EU es el país más hostil para la vida intelectual: Paul Auster
“El desafío de Obama es evitar que el país se derrita como cubo de hielo y se vuelva tercermundista”
Cerrar Guantánamo y restablecer el habeas corpus, entre los daños de Bush para ser reparados
Ericka Montaño Garfias (Enviada)
Ampliar la imagen Paul Auster y su esposa, la escritora Siri Hustvedt, ayer, durante su disertación en el contexto de la Feria Internacional del Libro de Oaxaca Paul Auster y su esposa, la escritora Siri Hustvedt, ayer, durante su disertación en el contexto de la Feria Internacional del Libro de Oaxaca Foto: Ericka Montaño
Oaxaca, Oax., 7 de noviembre. Barack Obama fue electo en un momento en que Estados Unidos se deshace como un cubo de hielo por lo que su desafío, en los primeros cuatro años de su gobierno, será resarcir algo de los peores daños que George W. Bush causó, porque de lo contrario “Estados Unidos se convertirá en un país tercermundista”, advirtió el escritor estadunidense Paul Auster, quien estimó que pasará mucho tiempo parar superar los aspectos negativos del régimen de Bush.
“Esa es la tragedia que hereda Obama y debido a la crisis económica va a ser imposible lograr mucho en poco tiempo.” Entre los daños por reparar, listó, se encuentran cerrar Guantánamo de inmediato, reinstalar la figura del habeas corpus, cambiar las leyes sobre espionaje doméstico y rescribir todo esto de la guerra preventiva “que es una de las ideas más espantosas que ha propuesto jamás un gobierno de Estados Unidos”, país al que Auster calificó como “el más hostil para la vida intelectual”, en respuesta a una pregunta de La Jornada.
Al respecto, explicó: “Nadie nos pregunta acerca de las elecciones. En México les interesa qué tenemos que decir porque hay más respeto por los artistas, filósofos e intelectuales y eso ocurre casi en todas partes” y puso como ejemplo que grandes escritores, como Octavio Paz, se han desempeñado en otros países como diplomáticos, mientras que Washington envía al exterior a personas que muchas veces no hablan el idioma de su país de llegada ni entienden la cultura. “Los intelectuales tienen un lugar, pero no en Estados Unidos”, puntualizó el autor, quien ayer inauguró la versión 28 de la Feria Internacional del Libro de Oaxaca.
Al borde del hundimiento
Paul Auster recordó que durante casi dos años él y su esposa, la escritora Siri Hustvedt, vivieron obsesionados por la posibilidad de la elección del demócrata. “En mi opinión Bush no fue electo presidente en 2000 y durante sus primeros cuatro años sentí que viviendo en una impunidad, las elecciones de 2004 fueron ambiguas. Se hablaba mucho de que se había hecho trampa en Ohio y yo no quiero llegar a una conclusión aunque podría haber ocurrido. “Desde entonces vivíamos en un régimen criminal en todos los niveles: creando guerras innecesarias, respondiendo de manera estúpida a los ataques terroristas en 2001, la tortura de los prisioneros, la indiferencia hacia los estadunidenses; hablo de una lista que puede llenar un libro.
“La desesperación que sentíamos Siri y yo, y al decir Siri y yo hablo de millones de personas que se sentían inútiles y sin forma alguna de poder cambiar las cosas o hacer algo para detener el hundimiento de Estados Unidos, es como si se estuviera derritiendo un cubo de hielo, un país que nosotros amamos y que ya no reconocemos”. Pero desde el martes pasado Estados Unidos tiene a un hombre joven y extraordinario, y se vive uno de los momentos más sorprendentes de la historia del país en los pasados 200 años, añadió en conferencia de prensa. “Tenemos un hombre negro en un país que se deshizo de la esclavitud hace 150 años apenas. Ahora es un líder de gobierno, es enormemente capaz, inteligente, está calificado. Los problemas a los que se enfrenta son inmensos, pero no puedo pensar en nadie mejor para el país.”
Tanto Auster como Hustvedt señalaron que el triunfo de Obama fue resultado de algo más complejo que un “voto de castigo” para el Partido Republicano. “Es algo muy complejo”, dijo la novelista y poeta. “Tiene mucho que ver con el hecho de que la demografía ha cambiado en Estados Unidos de tal manera que la población inmigrante ha crecido, eso ha cambiado la composición del país. “La crisis económica le ayudó. Pero también fue resultado de algo más humano: Obama es una persona que la gente llegó a amar. Tuvo muchos seguidores por su idealismo, su forma de hablar en público, su inteligencia. Todo esto logró capturar a las personas y creo que fue una elección acerca de amor, que trató de amor, de cariño.”
Auster terció: “Nunca he visto a un político que sea más impresionante y con la capacidad de Obama; estoy suficientemente viejo para haber pasado por la elección de John F. Kennedy, en 1960, y ahora hablamos de alguien de ese nivel. Inclusive tendríamos que ir hasta Roosevelt y Lincoln para encontrar a alguien con esa magnitud. Será un gran presidente si le dan oportunidad, porque creo que McCain reveló ser impulsivo, impetuoso, con la cabeza caliente que actúa antes de pensar y Obama piensa antes de actuar. En estos tiempos de confusión, de caos y de problemas en el mundo necesitamos a una cabeza equilibrada”.
Vigor de la literatura de EU
De la posible vida pública para Bush una vez que concluya su mandato, ambos escritores coincidieron en señalar que no tendrá mucho de eso. “Bush se fue por la tubería y su figura política disminuyó cada año. Creo que la gente no quiere ni siquiera verle la cara”, dijo Hustvedt, quien acaba de publicar su novela Las cosas que amé. “Esperamos que Bush se vaya a su rancho en Texas a criar ganado y hacer ejercicio caminando con su perro; no creo que vaya a tener un papel en el país o en el mundo”, subrayó Auster, cinéfilo, quien alguna vez pensó seriamente en estudiar para director de cine, pero su timidez lo llevó a dedicarse a la literatura y ahora escribe su nueva novela, El invisible, que publicará en 2009. Otro tema fueron las polémicas declaraciones que hizo el secretario de la Academia Sueca sobre el Nobel, Horace Engdahl, quien calificó a la literatura estadunidense como “aislada”. Auster le dio la razón en cuanto a que “Estados Unidos ha cerrado sus fronteras a otras culturas, no traducimos mucha literatura; pero no creo que tenga razón en cuanto a los novelistas. Existen muchos escritores brillantes y estamos en un momento vigoroso en nuestra literatura, la cual va a sobrevivir, se sobrepondrá a cualquier cosa, continuará más allá de las películas, porque se hace con letras y palabras”.
Oaxaca, Oax., 7 de noviembre. Barack Obama fue electo en un momento en que Estados Unidos se deshace como un cubo de hielo por lo que su desafío, en los primeros cuatro años de su gobierno, será resarcir algo de los peores daños que George W. Bush causó, porque de lo contrario “Estados Unidos se convertirá en un país tercermundista”, advirtió el escritor estadunidense Paul Auster, quien estimó que pasará mucho tiempo parar superar los aspectos negativos del régimen de Bush.
“Esa es la tragedia que hereda Obama y debido a la crisis económica va a ser imposible lograr mucho en poco tiempo.” Entre los daños por reparar, listó, se encuentran cerrar Guantánamo de inmediato, reinstalar la figura del habeas corpus, cambiar las leyes sobre espionaje doméstico y rescribir todo esto de la guerra preventiva “que es una de las ideas más espantosas que ha propuesto jamás un gobierno de Estados Unidos”, país al que Auster calificó como “el más hostil para la vida intelectual”, en respuesta a una pregunta de La Jornada.
Al respecto, explicó: “Nadie nos pregunta acerca de las elecciones. En México les interesa qué tenemos que decir porque hay más respeto por los artistas, filósofos e intelectuales y eso ocurre casi en todas partes” y puso como ejemplo que grandes escritores, como Octavio Paz, se han desempeñado en otros países como diplomáticos, mientras que Washington envía al exterior a personas que muchas veces no hablan el idioma de su país de llegada ni entienden la cultura. “Los intelectuales tienen un lugar, pero no en Estados Unidos”, puntualizó el autor, quien ayer inauguró la versión 28 de la Feria Internacional del Libro de Oaxaca.
Al borde del hundimiento
Paul Auster recordó que durante casi dos años él y su esposa, la escritora Siri Hustvedt, vivieron obsesionados por la posibilidad de la elección del demócrata. “En mi opinión Bush no fue electo presidente en 2000 y durante sus primeros cuatro años sentí que viviendo en una impunidad, las elecciones de 2004 fueron ambiguas. Se hablaba mucho de que se había hecho trampa en Ohio y yo no quiero llegar a una conclusión aunque podría haber ocurrido. “Desde entonces vivíamos en un régimen criminal en todos los niveles: creando guerras innecesarias, respondiendo de manera estúpida a los ataques terroristas en 2001, la tortura de los prisioneros, la indiferencia hacia los estadunidenses; hablo de una lista que puede llenar un libro.
“La desesperación que sentíamos Siri y yo, y al decir Siri y yo hablo de millones de personas que se sentían inútiles y sin forma alguna de poder cambiar las cosas o hacer algo para detener el hundimiento de Estados Unidos, es como si se estuviera derritiendo un cubo de hielo, un país que nosotros amamos y que ya no reconocemos”. Pero desde el martes pasado Estados Unidos tiene a un hombre joven y extraordinario, y se vive uno de los momentos más sorprendentes de la historia del país en los pasados 200 años, añadió en conferencia de prensa. “Tenemos un hombre negro en un país que se deshizo de la esclavitud hace 150 años apenas. Ahora es un líder de gobierno, es enormemente capaz, inteligente, está calificado. Los problemas a los que se enfrenta son inmensos, pero no puedo pensar en nadie mejor para el país.”
Tanto Auster como Hustvedt señalaron que el triunfo de Obama fue resultado de algo más complejo que un “voto de castigo” para el Partido Republicano. “Es algo muy complejo”, dijo la novelista y poeta. “Tiene mucho que ver con el hecho de que la demografía ha cambiado en Estados Unidos de tal manera que la población inmigrante ha crecido, eso ha cambiado la composición del país. “La crisis económica le ayudó. Pero también fue resultado de algo más humano: Obama es una persona que la gente llegó a amar. Tuvo muchos seguidores por su idealismo, su forma de hablar en público, su inteligencia. Todo esto logró capturar a las personas y creo que fue una elección acerca de amor, que trató de amor, de cariño.”
Auster terció: “Nunca he visto a un político que sea más impresionante y con la capacidad de Obama; estoy suficientemente viejo para haber pasado por la elección de John F. Kennedy, en 1960, y ahora hablamos de alguien de ese nivel. Inclusive tendríamos que ir hasta Roosevelt y Lincoln para encontrar a alguien con esa magnitud. Será un gran presidente si le dan oportunidad, porque creo que McCain reveló ser impulsivo, impetuoso, con la cabeza caliente que actúa antes de pensar y Obama piensa antes de actuar. En estos tiempos de confusión, de caos y de problemas en el mundo necesitamos a una cabeza equilibrada”.
Vigor de la literatura de EU
De la posible vida pública para Bush una vez que concluya su mandato, ambos escritores coincidieron en señalar que no tendrá mucho de eso. “Bush se fue por la tubería y su figura política disminuyó cada año. Creo que la gente no quiere ni siquiera verle la cara”, dijo Hustvedt, quien acaba de publicar su novela Las cosas que amé. “Esperamos que Bush se vaya a su rancho en Texas a criar ganado y hacer ejercicio caminando con su perro; no creo que vaya a tener un papel en el país o en el mundo”, subrayó Auster, cinéfilo, quien alguna vez pensó seriamente en estudiar para director de cine, pero su timidez lo llevó a dedicarse a la literatura y ahora escribe su nueva novela, El invisible, que publicará en 2009. Otro tema fueron las polémicas declaraciones que hizo el secretario de la Academia Sueca sobre el Nobel, Horace Engdahl, quien calificó a la literatura estadunidense como “aislada”. Auster le dio la razón en cuanto a que “Estados Unidos ha cerrado sus fronteras a otras culturas, no traducimos mucha literatura; pero no creo que tenga razón en cuanto a los novelistas. Existen muchos escritores brillantes y estamos en un momento vigoroso en nuestra literatura, la cual va a sobrevivir, se sobrepondrá a cualquier cosa, continuará más allá de las películas, porque se hace con letras y palabras”.
Kikka Roja