de Jenaro Villamil
Foto/Fuente: Edgard Garrido/Reuters
A través de una frase colocada en su perfil de BlackBerry Messenger, Eduardo Morales Garduño, operador político del alcalde poblano Eduardo Rivera, vinculado claramente al Yunque, advirtió lo siguiente en la jornada interna del PAN:
“Entiéndalo…Puebla no es tu territorio”.
Por supuesto, su mensaje no se dirigía a Telcel. Más bien era un mensaje territorial hacia Rafael Moreno Valle, gobernador que operó a favor de Ernesto Cordero y es considerado una pieza central de Elba Esther Gordillo y su partido, el Panal. También este mensaje tenía otro destinatario: el propio Felipe Calderón. La victoria de Josefina Vázquez Mota también fue una forma de revancha del Yunque, organización secreta de la derecha católica, contra Calderón. Las diferencias entre ambos han sido insistentes a lo largo de este sexenio. En Puebla, Guanajuato y Jalisco, bastiones de El Yunque, esta organización demostró su fuerza al interior del PAN.
En Guanajuato ganó la contienda interna como aspirante a gobernador Miguel Márquez, el delfín del mandatario actual, Juan José Oliva, uno de los políticos más encumbrados del Yunque. También la alcaldía de León fue ganada por un yunquista, Miguel Angel Salim, según reportan los propios periodistas guanajuatenses. El Yunque dejó en el camino al ex secretario de Salud del gabinete calderonista, José Angel Córdova, quien creyó que podía arrebatarle a este grupo el control del panismo en esta entidad del Bajío. Córdova, el médico de la epidemia de influenza H1N1 sólo obtuvo 8 mil 125 votos frente a 14, 424 de Márquez. Paradójicamente, en Guanajuato el gobernador Juan Manuel Oliva apoyó a Ernesto Cordero, pero en la entidad arrasó Josefina Vázquez Mota. Quizá una demostración del doble juego o la doble apuesta yunquista.
En Jalisco también ganó Vázquez Mota y el Yunque las nominaciones a cargos de elección.
Fernando Guzmán, ex secretario de Gobierno de Emilio González Márquez, obtuvo el 38.9 por ciento de los votos, frente al 31.8 por ciento de Hernán Cortés, y 29.5 por ciento de Alfonso Petersen. Jalisco es uno de los bastiones que esta organización secreta –tantas veces negada por sus propios participantes- que se volcó a favor de Vázquez Mota. La alianza yunquista y Vázquez Mota se estrechará con el inicio de la campaña electoral. Dos temas definirán esta alianza: la reforma al artículo 24 constitucional, pendiente de dictaminarse en el Senado, y la penalización del aborto en aquellas entidades donde el largo brazo de la jerarquía católica impuso sus condiciones.
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Foto/Fuente: Edgard Garrido/Reuters
A través de una frase colocada en su perfil de BlackBerry Messenger, Eduardo Morales Garduño, operador político del alcalde poblano Eduardo Rivera, vinculado claramente al Yunque, advirtió lo siguiente en la jornada interna del PAN:
“Entiéndalo…Puebla no es tu territorio”.
Por supuesto, su mensaje no se dirigía a Telcel. Más bien era un mensaje territorial hacia Rafael Moreno Valle, gobernador que operó a favor de Ernesto Cordero y es considerado una pieza central de Elba Esther Gordillo y su partido, el Panal. También este mensaje tenía otro destinatario: el propio Felipe Calderón. La victoria de Josefina Vázquez Mota también fue una forma de revancha del Yunque, organización secreta de la derecha católica, contra Calderón. Las diferencias entre ambos han sido insistentes a lo largo de este sexenio. En Puebla, Guanajuato y Jalisco, bastiones de El Yunque, esta organización demostró su fuerza al interior del PAN.
En Guanajuato ganó la contienda interna como aspirante a gobernador Miguel Márquez, el delfín del mandatario actual, Juan José Oliva, uno de los políticos más encumbrados del Yunque. También la alcaldía de León fue ganada por un yunquista, Miguel Angel Salim, según reportan los propios periodistas guanajuatenses. El Yunque dejó en el camino al ex secretario de Salud del gabinete calderonista, José Angel Córdova, quien creyó que podía arrebatarle a este grupo el control del panismo en esta entidad del Bajío. Córdova, el médico de la epidemia de influenza H1N1 sólo obtuvo 8 mil 125 votos frente a 14, 424 de Márquez. Paradójicamente, en Guanajuato el gobernador Juan Manuel Oliva apoyó a Ernesto Cordero, pero en la entidad arrasó Josefina Vázquez Mota. Quizá una demostración del doble juego o la doble apuesta yunquista.
En Jalisco también ganó Vázquez Mota y el Yunque las nominaciones a cargos de elección.
Fernando Guzmán, ex secretario de Gobierno de Emilio González Márquez, obtuvo el 38.9 por ciento de los votos, frente al 31.8 por ciento de Hernán Cortés, y 29.5 por ciento de Alfonso Petersen. Jalisco es uno de los bastiones que esta organización secreta –tantas veces negada por sus propios participantes- que se volcó a favor de Vázquez Mota. La alianza yunquista y Vázquez Mota se estrechará con el inicio de la campaña electoral. Dos temas definirán esta alianza: la reforma al artículo 24 constitucional, pendiente de dictaminarse en el Senado, y la penalización del aborto en aquellas entidades donde el largo brazo de la jerarquía católica impuso sus condiciones.
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