Fotógrafo de EU pide asilo en Argentina
Buenos Aires, 6 de julio. El fotógrafo estadunidense Kurt Sonnenfeld, testigo del 11-S y perseguido político en su país, expuso este viernes su situación ante el Congreso de la nación, dentro de la presentación de solicitudes de refugiados que piden asilo político definitivo aquí.
Trabajaba en la Agencia Federal para Emergencias, encargada de actuar en desastres naturales, y fue enviado como documentalista oficial y camarógrafo para filmar el ground zero (nivel zero) de las Torres Gemelas.
He sido acusado falsamente, encarcelado dos veces en países diferentes, torturado y puesto en confinamiento solitario en Estados Unidos y perseguido por dos continentes. He sido calumniado y difamado implacablemente en una campaña por deshumanizarme y desacreditarme, para que cuando hable ya no sea escuchado. Hasta al día de hoy mi esposa, mis hijas mellizas y yo vivimos en un mundo rodeado de amenazas e incertidumbre, expresó en el Congreso.
Sonnenfeld afirmó: Estuve en el World Trade Center. Fui parte de la investigación oficial. Fui el documentalista del gobierno de Estados Unidos en situaciones críticas y de catástrofe. Realicé trabajos de carácter confidencial y secreto en diferentes instalaciones científicas y militares.
Los atentados
Sostuvo que durante los atentados del 11 de septiembre, el gobierno cerró toda el área del World Trade Center y todo el bajo Manhattan, prohibiendo el ingreso de todo tipo de cámaras. A mí se me concedió acceso total y absoluto. A diario debía documentar con mi cámara lo que se consideró una gigantesca escena del crimen. Luego, bajo estrictos parámetros, liberaba a las cadenas noticiosas mundiales quince o veinte minutos de imágenes sanitizadas (autorizadas y limpiadas). Finalmente debía entregar horas de filmación para las investigaciones que se supone se llevarían a cabo. Pero nunca entregué las cintas.
Señaló que el presidente Obama avaló la Ley de Autorización de la Defensa Nacional, con la cual las autoridades pueden detener en cárceles militares a cualquier ciudadano en cualquier parte del mundo, indefinidamente y sin acusación ni juicio previo, alegando la mera sospecha de terrorismo.
Recordó que el gobierno estadunidense conduce guerras secretas en al menos 120 países, violando las leyes internacionales.
Ello para demostrar la absoluta impunidad con que se puede actuar contra cualquier persona que denuncie por alguna razón a Estados Unidos.
.
Stella Calloni
Corresponsal
Periódico La Jornada
Sábado 7 de julio de 2012, p. 21
kikka-roja.blogspot.com
Buenos Aires, 6 de julio. El fotógrafo estadunidense Kurt Sonnenfeld, testigo del 11-S y perseguido político en su país, expuso este viernes su situación ante el Congreso de la nación, dentro de la presentación de solicitudes de refugiados que piden asilo político definitivo aquí.
Trabajaba en la Agencia Federal para Emergencias, encargada de actuar en desastres naturales, y fue enviado como documentalista oficial y camarógrafo para filmar el ground zero (nivel zero) de las Torres Gemelas.
He sido acusado falsamente, encarcelado dos veces en países diferentes, torturado y puesto en confinamiento solitario en Estados Unidos y perseguido por dos continentes. He sido calumniado y difamado implacablemente en una campaña por deshumanizarme y desacreditarme, para que cuando hable ya no sea escuchado. Hasta al día de hoy mi esposa, mis hijas mellizas y yo vivimos en un mundo rodeado de amenazas e incertidumbre, expresó en el Congreso.
Sonnenfeld afirmó: Estuve en el World Trade Center. Fui parte de la investigación oficial. Fui el documentalista del gobierno de Estados Unidos en situaciones críticas y de catástrofe. Realicé trabajos de carácter confidencial y secreto en diferentes instalaciones científicas y militares.
Los atentados
Sostuvo que durante los atentados del 11 de septiembre, el gobierno cerró toda el área del World Trade Center y todo el bajo Manhattan, prohibiendo el ingreso de todo tipo de cámaras. A mí se me concedió acceso total y absoluto. A diario debía documentar con mi cámara lo que se consideró una gigantesca escena del crimen. Luego, bajo estrictos parámetros, liberaba a las cadenas noticiosas mundiales quince o veinte minutos de imágenes sanitizadas (autorizadas y limpiadas). Finalmente debía entregar horas de filmación para las investigaciones que se supone se llevarían a cabo. Pero nunca entregué las cintas.
Señaló que el presidente Obama avaló la Ley de Autorización de la Defensa Nacional, con la cual las autoridades pueden detener en cárceles militares a cualquier ciudadano en cualquier parte del mundo, indefinidamente y sin acusación ni juicio previo, alegando la mera sospecha de terrorismo.
Recordó que el gobierno estadunidense conduce guerras secretas en al menos 120 países, violando las leyes internacionales.
Ello para demostrar la absoluta impunidad con que se puede actuar contra cualquier persona que denuncie por alguna razón a Estados Unidos.
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Stella Calloni
Corresponsal
Periódico La Jornada
Sábado 7 de julio de 2012, p. 21
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