“Vallan” escribe el Conafe en anuncio
QUE SE VAYAN TODOS PRIANISTAS A LA MIERDA.
QUE EL PUERCO PANISTA NI DESCANCE EN PAZ NI GRAN MEXICANO, ESO SI, FUE UN GRAN HIJO DE PUTA, LOS NIÑOS DE MÉXICO ATRASADOS POR CULPA DE ÉSTE PENDEJO.
Muere Alonso Lujambio
POLÍTICA, SENADO • 25 SEPTIEMBRE 2012 - 6:38AM — ISRAEL NAVARRO Y FERNANDO DAMIÁN
Acababa de cumplir 50 años el pasado 2 de septiembre. Sus restos serán velados en el Panteón Francés. Rindió protesta como senador.
En 2011, luego de declinar a la precandidatura presidencial del PAN, fue hospitalizado en el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, debido a una insuficiencia renal severa. Ahí se le detectó mieloma múltiple en fase inicial, y comenzó un tratamiento para su control. El 23 de noviembre, en las puertas de sus oficinas en la sede de la SEP en el Centro Histórico y de regreso a sus actividades, comentó que su salud sería monitoreada y cuidada por los médicos.
“Me tiene aquí absolutamente en disponibilidad de continuar con mis labores, pero bajo un cuidadoso tratamiento médico”, comentó.
Más tarde se trasladó a Estados Unidos para continuar con su tratamiento contra el cáncer, a causa de esto, el 16 de marzo de 2012, renunció al cargo de titular de la SEP, sucediéndolo en el cargo el ex secretario de Salud José Ángel Córdova.
Alonso Lujambio vivió durante 25 días uno de sus más grandes sueños: ser Legislador. Durante años dedicó su vida al estudio de la política, pero muy en particular al parlamentarismo nacional. Prueba de ello era la enorme biblioteca que ostentaba en su casa de Tennyson en Polanco, esos anaqueles simulaban una semblanza de su vida:
“Todos los libros están debidamente ordenados, aquí están los de la historia y estatutos del PAN, por acá los que tienen que ver con asuntos electorales, en esta parte los de transparencia y aquí los más especiales los de estudios Congresionales”.
En aquella entrevista del 24 de junio de 2011, apropósito de sus aspiraciones
Presidenciales, se le preguntó: ¿Y no preferiría ser mejor legislador que Presidente?
-Claro, sin duda. Sería un sueño. Pero primero seré Presidente y luego me entregaré a la labor del Congreso.
Pero la vida y el destino lo llevaron a ocupar un escaño en el Senado, desde donde se proponía darle “lustre a una institución tan importante para la democracia mexicana”.
Parecía que toda la vida se preparó para ello, quienes lo conocieron lo definen como un gran “debatiente”, presto al detalle y a los procesos más finos de la toma de decisiones, siempre daba su lugar a las opiniones contrarias. Recuerdan, como Ernesto Cordero que sus manos hablaban: “Alonso hablaba y enseñaba con la elocuencia de sus manos, parecía que esas enormes manos cincelaban y daban vida material a una idea abstracta”.
El coordinador del PAN en la Cámara de Diputados, Luis Alberto Villarreal, afirma que Lujambio a través de su vida académica descubrió y reivindicó el diálogo y la negociación de Christlieb Ibarrola, el debate parlamentario de Miguel Estrada, la preocupación social de Efraín González Morfín y las herramientas para la transición democrática de Carlos Castillo Peraza.
“Su legado está escrito con sus propias palabras y la mejor forma de conocerlo y recordarlo será a partir de su lectura”, asegura su correligionario.
Lujambio presumía con orgullo una de sus obras más significativas: Estudios Congresionales, libro en el que reunió 20 años de ensayos sobre el pasado y el futuro del Poder Legislativo en México.
“Esta obra es única, es la primera vez que un Poder de la Unión le edita un libro a un funcionario de otro Poder (El libro fue editado por el Senado)”, afirmaba con alegría mientras su mano izquierda firmaba un ejemplar.
En el libro dedicado a “sus maestros y alumnos” parece dejar una encomienda a la nueva Legislatura: “Mi generación tiene como tarea central hacer que nuestra democracia sea valorada porque es socialmente útil. Tenemos que impulsar la cultura del diálogo y la cultura de la transparencia (…) más claridad y menos espectáculo político; más argumentación y menos show”.
Alonso Lujambio era un estudioso. Los cargos que desempeñó los asumió con verdadera vocación. Lo mismo ocurrió con su enfermedad, la estudió, la analizó y aprendió de ella. En entrevista para MILENIO Fernando González, secretario de educación básica durante su gestión recordó “me dijo una vez que el tiempo y la vida había cobrado otra dimensión para él. Aprendió a vivir sin prisa a ser parsimonioso.
Ojalá y todos aprendamos de esa fortaleza con la que él enfrentó su problema y esa calma con la que espero el final, ese equilibrio que espero en los últimos días”.
Apropósito de su llegada “patriótica” al Senado, el ex dirigente nacional del PAN, Luis Felipe Bravo Mena y quien lo acompañó en la celebración de su cumpleaños número 50 en la Residencia Oficial de Los Pinos evocó hace unos días en una carta: “Con gran sentido del humor te autonombraste ´el pirata del Senado´, pero eres todo lo contrario, un caballero en el Senado, un señor que por su valentía y fidelidad a su vocación política habrá de inspirar la conducta de todos aquellos que con recta intención quieren ocuparse la cosa pública”.
Esa tarde del 29 de agosto, Alonso Lujambio no solo demostró tenacidad, ganas de vivir y servicio por el país, demostró que 25 días son suficientes para cumplir un sueño y los necesarios para trascender.
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http://www.milenio.com/cdb/doc/noticias2011/d32553dd5ddd76649df142d7823a5dd5
kikka-roja.blogspot.com
QUE SE VAYAN TODOS PRIANISTAS A LA MIERDA.
QUE EL PUERCO PANISTA NI DESCANCE EN PAZ NI GRAN MEXICANO, ESO SI, FUE UN GRAN HIJO DE PUTA, LOS NIÑOS DE MÉXICO ATRASADOS POR CULPA DE ÉSTE PENDEJO.
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Alonso Lujambio
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Un mensaje de Internet de la SEP, a través del Consejo Nacional de Fomento Educativo, invita a los niños a la escuela con dos errores ortográficos básicos: “Queremos educar con calidad. Que todos los niños vallan (sic) a la Escuela. Esa es nuestra misón (sic)”. El organismo ya investiga qué fue lo que sucedió. publimetro.com.mx
Muere Alonso Lujambio
POLÍTICA, SENADO • 25 SEPTIEMBRE 2012 - 6:38AM — ISRAEL NAVARRO Y FERNANDO DAMIÁN
Acababa de cumplir 50 años el pasado 2 de septiembre. Sus restos serán velados en el Panteón Francés. Rindió protesta como senador.
En 2011, luego de declinar a la precandidatura presidencial del PAN, fue hospitalizado en el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, debido a una insuficiencia renal severa. Ahí se le detectó mieloma múltiple en fase inicial, y comenzó un tratamiento para su control. El 23 de noviembre, en las puertas de sus oficinas en la sede de la SEP en el Centro Histórico y de regreso a sus actividades, comentó que su salud sería monitoreada y cuidada por los médicos.
“Me tiene aquí absolutamente en disponibilidad de continuar con mis labores, pero bajo un cuidadoso tratamiento médico”, comentó.
Más tarde se trasladó a Estados Unidos para continuar con su tratamiento contra el cáncer, a causa de esto, el 16 de marzo de 2012, renunció al cargo de titular de la SEP, sucediéndolo en el cargo el ex secretario de Salud José Ángel Córdova.
Alonso Lujambio vivió durante 25 días uno de sus más grandes sueños: ser Legislador. Durante años dedicó su vida al estudio de la política, pero muy en particular al parlamentarismo nacional. Prueba de ello era la enorme biblioteca que ostentaba en su casa de Tennyson en Polanco, esos anaqueles simulaban una semblanza de su vida:
“Todos los libros están debidamente ordenados, aquí están los de la historia y estatutos del PAN, por acá los que tienen que ver con asuntos electorales, en esta parte los de transparencia y aquí los más especiales los de estudios Congresionales”.
En aquella entrevista del 24 de junio de 2011, apropósito de sus aspiraciones
Presidenciales, se le preguntó: ¿Y no preferiría ser mejor legislador que Presidente?
-Claro, sin duda. Sería un sueño. Pero primero seré Presidente y luego me entregaré a la labor del Congreso.
Pero la vida y el destino lo llevaron a ocupar un escaño en el Senado, desde donde se proponía darle “lustre a una institución tan importante para la democracia mexicana”.
Parecía que toda la vida se preparó para ello, quienes lo conocieron lo definen como un gran “debatiente”, presto al detalle y a los procesos más finos de la toma de decisiones, siempre daba su lugar a las opiniones contrarias. Recuerdan, como Ernesto Cordero que sus manos hablaban: “Alonso hablaba y enseñaba con la elocuencia de sus manos, parecía que esas enormes manos cincelaban y daban vida material a una idea abstracta”.
El coordinador del PAN en la Cámara de Diputados, Luis Alberto Villarreal, afirma que Lujambio a través de su vida académica descubrió y reivindicó el diálogo y la negociación de Christlieb Ibarrola, el debate parlamentario de Miguel Estrada, la preocupación social de Efraín González Morfín y las herramientas para la transición democrática de Carlos Castillo Peraza.
“Su legado está escrito con sus propias palabras y la mejor forma de conocerlo y recordarlo será a partir de su lectura”, asegura su correligionario.
Lujambio presumía con orgullo una de sus obras más significativas: Estudios Congresionales, libro en el que reunió 20 años de ensayos sobre el pasado y el futuro del Poder Legislativo en México.
“Esta obra es única, es la primera vez que un Poder de la Unión le edita un libro a un funcionario de otro Poder (El libro fue editado por el Senado)”, afirmaba con alegría mientras su mano izquierda firmaba un ejemplar.
En el libro dedicado a “sus maestros y alumnos” parece dejar una encomienda a la nueva Legislatura: “Mi generación tiene como tarea central hacer que nuestra democracia sea valorada porque es socialmente útil. Tenemos que impulsar la cultura del diálogo y la cultura de la transparencia (…) más claridad y menos espectáculo político; más argumentación y menos show”.
Alonso Lujambio era un estudioso. Los cargos que desempeñó los asumió con verdadera vocación. Lo mismo ocurrió con su enfermedad, la estudió, la analizó y aprendió de ella. En entrevista para MILENIO Fernando González, secretario de educación básica durante su gestión recordó “me dijo una vez que el tiempo y la vida había cobrado otra dimensión para él. Aprendió a vivir sin prisa a ser parsimonioso.
Ojalá y todos aprendamos de esa fortaleza con la que él enfrentó su problema y esa calma con la que espero el final, ese equilibrio que espero en los últimos días”.
Apropósito de su llegada “patriótica” al Senado, el ex dirigente nacional del PAN, Luis Felipe Bravo Mena y quien lo acompañó en la celebración de su cumpleaños número 50 en la Residencia Oficial de Los Pinos evocó hace unos días en una carta: “Con gran sentido del humor te autonombraste ´el pirata del Senado´, pero eres todo lo contrario, un caballero en el Senado, un señor que por su valentía y fidelidad a su vocación política habrá de inspirar la conducta de todos aquellos que con recta intención quieren ocuparse la cosa pública”.
Esa tarde del 29 de agosto, Alonso Lujambio no solo demostró tenacidad, ganas de vivir y servicio por el país, demostró que 25 días son suficientes para cumplir un sueño y los necesarios para trascender.
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http://www.milenio.com/cdb/doc/noticias2011/d32553dd5ddd76649df142d7823a5dd5
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