REGINA MARTíNEZ
JALAPA, Ver., 27 de octubre (apro).- Ante la falta de oportunidades en México, más de un millón de veracruzanos radica en Estados Unidos, cifra que podría ser superior, pues anualmente cruzan la frontera unos 2 mil paisanos en busca de trabajo, señaló el investigador Carlos Garrido de la Calleja.
El académico del Instituto de Investigaciones Histórico Sociales de la Universidad Veracruzana (UV), explicó que ante la ausencia de un diagnóstico oficial sobre el fenómeno migratorio en la entidad, se estima que en los últimos años han emigrado más de un millón de veracruzanos a la Unión Americana.
Según el análisis llevado a cabo por el investigador, se demuestra que a pesar de la crisis económica que afecta a Estados Unidos, el número de migrantes no se ha reducido, sino que las cifras se han mantenido en el último año, explicó.
Dijo que a pesar de esta situación, en la zona fronteriza mexicana se encuentran unos 2 mil 500 veracruzanos esperando la oportunidad de cruzar hacia Estados Unidos.
Según datos del Centro de Estudios Fronterizos del Norte, apuntó, los veracruzanos que se han trasladado a la zona con la intención de cruzar hacia el país vecino se concentran principalmente en Ciudad Juárez, Chihuahua, careciendo de todo tipo de servicios sociales, médicos, educativos y laborales.
Como presidente de la Red Articuladora de Estudios Migratorios, explicó que han pugnado por que el Congreso local constituya una comisión permanente de asuntos migratorios, "con el propósito de diseñar políticas públicas para atender a esta población desde el estado de Veracruz".
A través de una comisión permanente de asuntos migratorios, consideró, el estado de Veracruz podría dar un paso hacia adelante en el sentido de diseñar una política que permita reunir esfuerzos bajo un interés común en beneficio de este sector de la población.
De hecho, refirió, al retornar al país y a la entidad, los migrantes han manifestado estar dispuestos a invertir sus remesas en proyectos productivos, siempre y cuando observen protección fiscal, jurídica y certidumbre productiva.
No obstante, cuestionó que tanto el gobierno federal como el estatal no están preparados para recibir a los migrantes, ya que cuando éstos retornar con la intención de invertir sus remesas, sólo se encuentran con problemas fiscales y falta de apoyo de parte de las autoridades.
Por otra parte, la también investigadora de la UV, Blanca Valdivia Salas, refirió que según un estudio realizado en la región de Río Blanco, en el centro de la entidad, se comprobó que las mujeres que son pareja de migrantes son más propensas a contraer enfermedades de transmisión sexual.
La profesora de la Facultad de Sociología de la UV en Orizaba, mencionó que en el diagnostico realizado, con la participación de 500 mujeres de esa región, se les ubica como susceptibles a enfermedades venéreas, aunque también registran situaciones de violencia y maltrato de parte de su pareja.
En el estudio, detalló, las quejas más recurrentes de las parejas de migrantes se refieren a padecimientos de enfermedades por transmisión sexual, "debido a que no pueden pedirle a sus maridos el uso de preservativo".
Por su lado, el investigador del Instituto de Psicología y Educación de la UV, Marco Salas, subrayó que las tendencias en los hijos de migrantes de comunidades rurales marginadas de la región de Jalapa son comportamiento rebelde, depresión, baja autoestima y fármaco-dependencia.
Dentro del foro organizado por la UV para analizar la problemática de la migración en la entidad, el investigador mencionó que en estudios realizados se han detectado tendencias suicidas y dependencia hacia las drogas de parte de los hijos de los migrantes.
kikka-roja.blogspot.com/
El académico del Instituto de Investigaciones Histórico Sociales de la Universidad Veracruzana (UV), explicó que ante la ausencia de un diagnóstico oficial sobre el fenómeno migratorio en la entidad, se estima que en los últimos años han emigrado más de un millón de veracruzanos a la Unión Americana.
Según el análisis llevado a cabo por el investigador, se demuestra que a pesar de la crisis económica que afecta a Estados Unidos, el número de migrantes no se ha reducido, sino que las cifras se han mantenido en el último año, explicó.
Dijo que a pesar de esta situación, en la zona fronteriza mexicana se encuentran unos 2 mil 500 veracruzanos esperando la oportunidad de cruzar hacia Estados Unidos.
Según datos del Centro de Estudios Fronterizos del Norte, apuntó, los veracruzanos que se han trasladado a la zona con la intención de cruzar hacia el país vecino se concentran principalmente en Ciudad Juárez, Chihuahua, careciendo de todo tipo de servicios sociales, médicos, educativos y laborales.
Como presidente de la Red Articuladora de Estudios Migratorios, explicó que han pugnado por que el Congreso local constituya una comisión permanente de asuntos migratorios, "con el propósito de diseñar políticas públicas para atender a esta población desde el estado de Veracruz".
A través de una comisión permanente de asuntos migratorios, consideró, el estado de Veracruz podría dar un paso hacia adelante en el sentido de diseñar una política que permita reunir esfuerzos bajo un interés común en beneficio de este sector de la población.
De hecho, refirió, al retornar al país y a la entidad, los migrantes han manifestado estar dispuestos a invertir sus remesas en proyectos productivos, siempre y cuando observen protección fiscal, jurídica y certidumbre productiva.
No obstante, cuestionó que tanto el gobierno federal como el estatal no están preparados para recibir a los migrantes, ya que cuando éstos retornar con la intención de invertir sus remesas, sólo se encuentran con problemas fiscales y falta de apoyo de parte de las autoridades.
Por otra parte, la también investigadora de la UV, Blanca Valdivia Salas, refirió que según un estudio realizado en la región de Río Blanco, en el centro de la entidad, se comprobó que las mujeres que son pareja de migrantes son más propensas a contraer enfermedades de transmisión sexual.
La profesora de la Facultad de Sociología de la UV en Orizaba, mencionó que en el diagnostico realizado, con la participación de 500 mujeres de esa región, se les ubica como susceptibles a enfermedades venéreas, aunque también registran situaciones de violencia y maltrato de parte de su pareja.
En el estudio, detalló, las quejas más recurrentes de las parejas de migrantes se refieren a padecimientos de enfermedades por transmisión sexual, "debido a que no pueden pedirle a sus maridos el uso de preservativo".
Por su lado, el investigador del Instituto de Psicología y Educación de la UV, Marco Salas, subrayó que las tendencias en los hijos de migrantes de comunidades rurales marginadas de la región de Jalapa son comportamiento rebelde, depresión, baja autoestima y fármaco-dependencia.
Dentro del foro organizado por la UV para analizar la problemática de la migración en la entidad, el investigador mencionó que en estudios realizados se han detectado tendencias suicidas y dependencia hacia las drogas de parte de los hijos de los migrantes.
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