- - . KIKKA: John Saxe-Fernandez
BUSCA, BUSCADOR

Buscar este blog

Mostrando las entradas con la etiqueta John Saxe-Fernandez. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta John Saxe-Fernandez. Mostrar todas las entradas

jueves, 26 de enero de 2012

John Saxe-Fernández : Davos: gobernanza del 1%

.
Davos: gobernanza del 1%
John Saxe-Fernández
Las decisiones de unos pocos nos han llevado a la crisis de los últimos años” y ahora (esas) mismas personas se presentarán aquí como la solución a esos problemas, advirtió David Roth, presidente del ala joven del Partido Socialista Suizo. Lo dijo bajo una manta que rezaba: No dejes que decidan por tí, en referencia a los poco más de 2 mil 600 participantes en el Foro Económico Mundial (FEM), que desde ayer, como lo han hecho por 42 años, se reúnen en Davos, Suiza.

Acuden a los Alpes suizos encubridores, encargados de despojos y estafas bancario/financieras y administradores del pillaje de naciones enteras. En ese lujoso centro invernal, alejado del mundanal ruido, se refuerza la seguridad: ante los desmanes y la guerra de clase desatada por el capital, ya les alcanzó la protesta de los Ocupa el FEM.

jueves, 21 de mayo de 2009

Desfases: John Saxe-Fernández

Desfases
John Saxe-Fernández
http://jsaxef.blogspot.com
En una época de crisis y transición hegemónica como la que vivimos, son frecuentes, riesgosos y patéticos los desfases y los cruces entre una realidad que cambia estructuralmente y la terquedad de inercias con su retórica, paradigmas e intereses que corresponden a situaciones históricas que se desvanecen o mutan con inusual ímpetu. Son desfases que exigen atención porque afectan áreas críticas y conexas: economía, política y seguridad.

Con un retroceso del PIB mexicano del 5 al 6 por ciento es de alta explosividad social la ausencia de políticas anticíclicas vigorosas y generalizadas que apoyen al aparato productivo, a su sector industrial, agropecuario, de servicios y responda a la baja demanda interna y externa asociada a la crisis económica y financiera mundial.

Es un desacierto agravado por el brote del H1N1 que, como apunta S&P, impacta al comercio minorista, turismo, financiamiento hipotecario, industria automotriz y de la construcción. Que la actual política fiscal y monetaria condena al país a una contracción mayor, lo saben voceros de Moody’s y Standard and Poor’s (S&P), conocidas firmas calificadoras. Alfredo Coutiño, de Moody’s notó que “el gobierno (de México) no generó la flexibilidad fiscal suficiente –gasto– para mitigar el impacto de un choque externo” y que el Banco de México no sincronizó su política monetaria al estímulo fiscal a tiempo, a pesar de la clara evidencia de recesión. (La Jornada, 15/5/09, p. 28). Pero nuestros hacendistas tan sujetos a la condicionalidad externa no lo ven así, como el borrachito aquel que, cuando el festín neoliberal acabó, la orquesta calló y es otro día, sigue brindando, lanzando cohetes y confeti.

Pero no es el espectáculo chusco ofrecido por los neoliberales, sino los ruinosos efectos humanos y ecológicos de su sometimiento a Estados Unidos, por el desempleo, pobreza, insalubridad, devastación ambiental, polarización, informalidad económica y criminalidad que acicatea su diseño procíclico de políticas fiscales, monetarias y reformas estructurales, que Estados Unidos y Europa recetan a otros pero consideran un suicidio para sus sociedades y economías. A Washington esos efectos sirven como excusa para imponer regímenes de excepción neo coloniales en México, Colombia y Centroamérica.

Agréguese a la caída económica el colapso de legitimidad del calderonismo y se tendrá un indicio del monumental error histórico y geoestratégico que, como documenta Alfredo Jalife, acarrea la conjunción de la reforma energética y la integración militar con Estados Unidos por medio del Comando Norte. Además, la militarización de la campaña contra el narco desgasta y polariza al Ejército y la función de Defensa nacional.

El ex senador Manuel Bartlett recién advirtió que esa reforma es una privatización de facto para pseudolegalizar el contratismo desatado en Pemex. Lo que ocurre en un contexto de integración militar bajo la Iniciativa Mérida (IM), dado el despliegue terrestre y marítimo de las operaciones de la paraestatal. Semejante al Plan Colombia, la IM nos abre a la intervención/ocupación extranjera abierta o disfrazada, con efectos de gran riesgo para los derechos humanos y la soberanía.

En ese contexto es preocupante lo que ocurre en Pemex: según la senadora Rosario Ibarra de Piedra, desde hace dos años en Nuevo León se registraron “38 desapariciones de personas pertenecientes o vinculadas al sindicato petrolero… las desapariciones de petroleros tienen que ver con policías y soldados, con órdenes de alto nivel”. (La Jornada 17/5/09, p.5). Es una criminalidad de Estado (interna y/o externa) para anular el rechazo a la entrega de la renta petrolera a firmas nacionales y extranjeras como Halliburton, cercana a R. Cheney.

Finalmente debe considerarse el acople y posterior desfase de procesos que afectan la ecuación cívico-militar. En Estados Unidos se cancela por inoperante, la noción de guerra contra el narco, mientras al sur sigue como pantalla del intervencionismo del Pentágono y del entreguismo de Calderón.

http://jsaxef.blogspot.com

kikka-roja.blogspot.com/

jueves, 26 de marzo de 2009

Caos e intervención: John Saxe-Fernández

Caos e intervención
John Saxe-Fernández
Cuatro son los pilares de los juegos geoestratégicos propiciados por el aparato de seguridad de Estados Unidos en México: armas, droga, negocio y caos. El término juegos es engañoso. No son travesuras espontáneas sino sangrientos esquemas encaminados a eliminar, del Bravo a la Patagonia, obstáculos jurisdiccionales al dominio hegemónico y empresarial de EU sobre naciones con recursos humanos y naturales estratégicos. México y Colombia son los campos de prueba para impulsar la doctrina de las fronteras flexibles, como ya lo experimentó Ecuador en Sucumbios el año pasado.

El manejo que hace el aparato de seguridad de EU de la dinámica entre armas, negocio y drogas es central en la promoción del caos y la inestabilidad en dichos países que es base y excusa para la intervención y ocupación militar. Son realmente espectaculares y muy preocupantes los datos ofrecidos por instancias oficiales del gobierno mexicano sobre la cauda inagotable de armamento de gran calibre, volumen y alta tecnología que, bajo las narices (si no es que con la venia) de las aduanas de EU, se envía a México: se han asegurado 29 mil armas de nueva tecnología de uso exclusivo militar como lanza granadas MGL calibre 37 y 40 milímetros; fusiles Barret 50; sub ametralladoras y pistolas belgas importadas por EU y enviadas de manera expedita a México; armamento diseñado para penetrar vehículos blindados, cohetes anti tanque M72 y At4; lanza-cohetes; granadas de fragmentación como las usadas contra la población en Morelia el 15 de septiembre de 2008 –un operativo utilizado para el lanzamiento de la Iniciativa Mérida.

Ese armamento, por su volumen, (imposible de escapar a la detección en aduanas), alto calibre junto con un probable despliegue de mercenarios y/o fuerzas especiales bajo cubierta, serían ingredientes centrales de los esquemas de ampliación militar del Departamento de Defensa (DdD) en curso en México, montados en el baño de sangre en que se transformó la militarización de la guerra contra el narco con que dio inicio un sexenio huérfano de legitimidad después de la cuestionada elección de 2006.

El escenario es deplorable: Mexicanos aniquilando mexicanos mientras EU, su aparato de seguridad y sistema bancario sacan jugo con la dinámica entre el tráfico y consumo sin control de drogas allá y la venta de armas aquí. Al norte, los dólares, al sur las balas y las pilas de cadáveres. Todo con graves riesgos para la soberanía e integridad territorial del país y sus vastos recursos naturales. Es una dinámica en la que los organismos de espionaje de EU y su DdD, ahora bajo Robert Gates, ex director de la CIA, juegan un papel primordial: la inter-relación con y protección de, los negocios mundiales del narco y el tráfico de armas, quedaron ilustrados en el escándalo Irán-contras, un operativo secreto de la CIA para financiar la guerra de Reagan contra la revolución sandinista usando dinero del tráfico ilegal de armas a Irán. Según Michel Chossudovsky, Gates está implicado en el Irán-contra y hoy las fuerzas de ocupación en Afganistán apoyan el narcotráfico que produce cerca de 200 mil millones de dólares en ingresos para el crimen organizado, las agencias de inteligencia e instituciones financieras occidentales. (Voces del Periodista, III-09). Además, se ha documentado que la CIA jugó un papel central en el desarrollo de los triángulos de la droga latinoamericanos y asiáticos. Estos fabulosos negocios y arreglos siguen bajo la protección de los servicios de inteligencia de EU indicando su vigencia bajo el nuevo gobierno demócrata, lo que además ofrece una base para la interpretación adecuada de un documento del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas cuyo eje es el caos en México, ante el cual EU estaría obligado a dar una respuesta dadas las consecuencias para su seguridad interna. Lo que no se menciona es el papel de EU en la génesis del caos inducido por medio del trinomio armas-negocio-drogas.

http://jsaxef.blogspot.com

kikka-roja.blogspot.com/

jueves, 12 de marzo de 2009

En bandeja de plata: John Saxe-Fernández

En bandeja de plata
John Saxe-Fernández

México vive momentos de alto riesgo. Cuando arrecian recesión, desempleo y flaquean los alfileres que sostienen la economía por la caída de petróleo, remesas, turismo y exportaciones, las imprudentes y desatinadas políticas económicas neoliberales y de seguridad del calderonismo nos colocan en serio predicamento. Se privatiza y extranjeriza la renta petrolera; se aplican medidas procíclicas; se arremete contra salario, agricultura, derechos laborales y el aparato productivo en un esquema que anualmente expulsa a 600 mil mexicanos de su espacio nacional. Con la válvula cerrándose por el colapso del empleo en Estados Unidos, a diario aumenta el riesgo de explosión social, en especial en la frontera norte. Mientras, la inconstitucional militarización de la campaña contra el narcotráfico y crimen organizado, tareas exclusivas de entes civiles, alentada por Estados Unidos y Los Pinos, se hunde en un baño de sangre, debilita la función de defensa nacional y gesta una debacle de derechos humanos.

En medio del torbellino, el almirante Michael Mullen, jefe del Estado Mayor Conjunto de Estados Unidos, apologista del Plan Colombia, de visita la semana pasada nos avisa que las fuerzas armadas a su cargo “están listas para ayudar a México en su guerra contra el narco con tácticas de contrainsurgencia como las empleadas contra los rebeldes de Irak y Afganistán”. La declaración es ominosa. Anuncia la ocupación militar con operaciones de inteligencia y patrullajes terrestres, aéreos y navales conjuntos. En Irak y Afganistán Estados Unidos no enfrenta a rebeldes sino a los pueblos organizados como resistencia armada ante una atroz petro-guerra y ocupación militar.

En México el plan de juego del Pentágono incluye, como en Colombia, la Iniciativa Mérida que no ataca las raíces ni los pilares de la criminalidad y el narcotráfico: o los deja intactos o los acicatea y utiliza como excusa para militarizar e intervenir junto al despliegue de bases, esquemas portuarios y empresariales de dominio económico/territorial sobre recursos humanos y naturales.

Ante los riesgos de usar al Ejército Mexicano como eje de la lucha contra el crimen organizado, terrorismo y narcotráfico, Dominique De Villepin, ex primer ministro de Francia, consideró necesario advertir a Los Pinos en 2008, en una conferencia magistral en la sede del PAN, que en esa campaña “la militarización no tiene que ser el elemento central… ya que tiene consecuencias”, e insistió en la importancia de poner adelante los elementos de inteligencia y financieros, económicos. Esto, según De Villepin se acompaña con la estrategia de seguridad y militar.

Para Edgardo Buscaglia del ITAM, asesor de la ONU en estos temas, la violencia desatada revela que la política de enfrentar la delincuencia organizada no es la correcta, ya que privilegia la militarización y no atiende las causas que originan el crimen y el narcotráfico. El resultado, dijo Buscaglia hace un año, está a la vista y puede recrudecerse si no se replantea el camino, si no se trata de desmantelar la red en que se sostienen los grupos criminales, en vez de militarizar, de atacarlos con efectivos y buscar su encarcelamiento como ocurrió en Colombia. Diego Valadés, de la UNAM, advierte de la inconstitucionalidad de esta militarización a lo que se agrega el peligro golpista por los desequilibrios cívico-militares inducidos en México cuyos efectos en Estados Unidos serían de largo alcance en lo social y político.

Advertencias todas de innegable urgencia, pero desoídas. Sin noción de razón de Estado y con levedad, Calderón abre de par en par las puertas a la injerencia del Pentágono. Además, de manera temeraria, en medio de una de las crisis económicas mundiales más severas de la era moderna, aplica políticas recesivas, antipopulares y entreguistas, no sólo en materia petrolera, alentando tensiones de clase y el caldo de cultivo de los males que dice combatir. Mientras México estalla, el panista lo sirve a Washington en bandeja de plata.



kikka-roja.blogspot.com/

jueves, 26 de febrero de 2009

De crisis, acoples y desacoples: John Saxe-Fernández

De crisis, acoples y desacoples
http://www.jsaxef.blogspot.com
John Saxe-Fernández
Existe suficiente evidencia para plantear, como hace Jorge Beinstein, de la Universidad de Buenos Aires, en un compacto y bien sustentado estudio (alainet.org/active/28980), que la radicalización de la recesión en centro y periferia capitalista vira, con intensidad que alarma, de un acople recesivo a un acople depresivo global, en el que Estados Unidos es también el motor de la crisis.

A un cabal listado de los renglones económicos y sociales clave que retratan la ruina calamitosa de la economía de Estados Unidos, que seguramente arrastrará el conjunto del sistema global, Beinstein agrega el desplome de 14 billones (trillions) de dólares de la riqueza neta (el valor de propiedades, acciones etc., menos deudas) en 2009 respecto al valor promedio de 2007, equivalente al producto nacional bruto (PNB) de Estados Unidos del año pasado. A esto adosa el abrupto ascenso de desempleados oficiales, crónicos y precarios, que en diciembre de 2008 llegó a casi 22 millones: un salto al vacío de más de 8 millones de personas en 19 meses. Si, como plantea el autor, la lluvia de billones de dólares, euros, etc. arrojados sobre sus mercados no consigue frenar la aceleración de la caída económica, entonces su aserto de que en 2009 se producirá la gran depresión, mucho más grande que la de los años 1930, pasa de catastrofista a un juicio realista. Los masivos rescates, subsidios y estímulos hasta ahora se ven trabados ante la deflación que se generaliza junto a la sobre-capacidad global en los polos asiáticos, europeos y emergentes. Por doquier estallan burbujas y se colapsan manufacturas: producción, precios y ganancias van al precipicio deflacionario.

En Estados Unidos se cerró casi el 50 por ciento de la industria del acero y a fines de 2008 ya la sobrecapacidad global afligía a sectores con gran impacto en los encadenamientos productivos y el empleo: en un mundo capaz de producir 90 millones de vehículos al año, se fabricaron 66 millones, con todos los inventarios abarrotados. En 2009 la tendencia se agrava e incluye los semiconductores, con una producción mensual de 9 mil 260 wafers frente a un potencial instalado de 14 mil 930 unidades, y mientras la capacidad de producción mundial de petróleo es de 89 millones de barriles diarios, el procesamiento de crudo este año no rebasará los 83.8 millones (Businessweek, 16-II-09).

La atención en Asia, reflejada en la gira de Clinton, es por el impacto y sinergia global del frenazo de esas economías. Esa región, que esperaba estar desacoplada del trauma económico de Occidente, dijo The Economist el 31 de enero, se encuentra tan golpeada como cualquier otra y en algunos casos más. El desplome de Estados Unidos, el consumidor/deudor de última instancia, y de la industria mundial debilita el cemento del acople. Asia se recuperó de otras recesiones con las exportaciones: una vía ahora cerrada por el derrumbe de Estados Unidos y Europa. Frente al desplome en Asia –y en el mundo–, la demanda doméstica y regional se presenta como salvavidas de urgencia mayor.

Al calor de la crisis muta la ecuación mundial de poder, con un deterioro hegemónico de Estados Unidos. Los nacionalismos económicos de vieja raigambre (tipo buy american) y el proteccionismo regional en curso, se acentúan en el corto y mediano plazos como respuestas al acople depresivo global. Se trata de desacoples comerciales, monetarios y de seguridad: aunque la proyección de fuerza militar estadunidense es colosal, se hunde en Irak/Afganistán; existe un empate estratégico/nuclear con Rusia y aumenta la capacidad balística-satelital y naval de Asia y Europa.

Del Bravo a la Patagonia la reactivación de la Cuarta Flota, los Comandos Norte y Sur, las bases militares y los diseños del Foreign Relations Council (TLCAN-Aspan/Plan Colombia-Mérida) indican que Estados Unidos va por una integración vertical del hemisferio, anulando nuestra unidad regional. La alternativa al diseño imperial (Unasur/ALBA/ Banco del Sur) es crucial para la vigencia histórica de América Latina en el emergente orden mundial.

kikka-roja.blogspot.com/

jueves, 12 de febrero de 2009

John Saxe-Fernández: Chávez, Obama y Calderón

John Saxe-Fernández
http://www.jsaxef.blogspot.com
Chávez, Obama y Calderón

No extraña que el embate contra Hugo Chávez desde Estados Unidos y los principales medios venezolanos se intensifique ante el referendo del 15 de febrero: la intención de lanzar al futuro una revolución bolivariana que recuperó la renta petrolera, mejoró la situación socioeconómica de la población y que en sus primeros 10 años articuló una política exterior y energética que cala hondo en América Latina y el mundo, evoca fuerte hostilidad en los círculos oligárquico-imperiales, en especial los del poder económico-petrolero.

Así se refleja en “Latin Opportunity”, un editorial publicado por el Washington Post (WP) el 18 de enero poco después de que Barack Obama compartiera “una sopa de tortilla” con Felipe Calderón. Se menciona que Calderón expresó al WP “preocupación” por “sentimientos antiestadunidenses” en América Latina y que “percibía algunas amenazas a los principios y valores que compartimos: democracia y derechos humanos, la economía de mercado, los derechos de propiedad y el estado de derecho”. Para cualquier observador medianamente enterado de la violencia oficial, la debacle económica y legal y la calamidad político-electoral que afligen al pueblo mexicano –todavía no cuadran las cifras con que se eligió a Calderón–, esa enunciación de “principios” evoca un dicho de Stevenson: “es algo demasiado doloroso para reír y soy demasiado viejo para llorar”.

El WP usó la doblez y la “denuncia” aduladora del panista para poner nombre y apellido a esos retos (“algunas de esas amenazas son conocidas por nosotros gracias a la grandilocuencia del venezolano Hugo Chávez”) y sugerirle a Obama que Calderón es guía y modelo para Latinoamérica. Un consejo oportuno sólo si, en el contexto de la actual debacle económica y del empleo, la intención del demócrata fuera desatar los precipitantes de “guerra interna” a lo largo y ancho del continente. Con sólo dar continuidad a la agenda en materia comercial/laboral, de energía y de seguridad e integración militar pactada por Bush con Fox y Calderón en la ASPAN y la Iniciativa Mérida se garantiza un deterioro de los fundamentos materiales, sociales, legales y políticos de la estabilidad y la paz social en México. Se trata de arreglos clasistas y leoninos entre empresarios, funcionarios civiles y militares pactados a espaldas del pueblo, los congresos y sindicatos de México, Estados Unidos y Canadá.

Para las fundaciones e institutos de la ultraderecha estadunidense, Calderón también es el héroe y Chávez el chico malo. Recomiendan a Obama, entre otras linduras, “no renegar de los acuerdos de libre comercio” (traducción: mantener la ofensiva contra sindicatos, salarios y aparato productivo no sólo al sur del Bravo); “mantenerse firme con México en la lucha antidrogas” (traducción: proseguir con el intervencionismo policial-militar y de espionaje); y “no tratar de apaciguar a Chávez”, sino “articular una estrategia dura” porque “debilita gravemente la cooperación hemisférica en áreas vitales para la seguridad nacional”. Traducción: mantener las intentonas golpistas, los operativos clandestinos y el castigo mediático por haber recuperado la renta petrolera y, peor aún, usarla en función del interés público venezolano, además de impulsar coaliciones latinoamericanas y euroasiáticas de corte energético, monetario y de seguridad. A partir del control nacional del petróleo en 2003, el PNB venezolano creció 13.5 por ciento anual, en su mayor parte en el sector privado no petrolero y la pobreza pasó de afectar a 54 por ciento de las familias en 2003 a 26 por ciento en 2008. (Más detalles en www.cepr.net.)

El pecado mayor del gobierno de Chávez fue haber fortalecido los fundamentos del Estado nacional venezolano y su jurisdicción sobre la mayor reserva petrolera del hemisferio. El gran logro de Calderón es una “reforma” energética que le permite ir a Davos a ofrecer a las grandes petroleras “bloques” del territorio y lo que queda de Pemex, mientras claudica con una desleal integración militar con Estados Unidos.

kikka-roja.blogspot.com/

jueves, 29 de enero de 2009

John Saxe-Fernández: El silencio del Pentágono

http://jsaxef.blogspot.com
El silencio del Pentágono

Desde hace años las concepciones del Departamento de Defensa (DoD, por sus siglas en inglés) de EU sobre los problemas primarios de “seguridad nacional” en México, el Caribe y América Latina se centran de manera exclusiva e interesada en los efectos y no en las causas de la “inestabilidad”. No es por miopía conceptual. Tampoco es asunto menor si se recuerda que cuando sus docentes del Colegio de Guerra han señalado que los programas de ajuste estructural del “consenso de Washington” (auspiciados por el Comander-in-Chief desde el Banco Mundial –BM–, el BID y el FMI) están en la raíz del problema de seguridad nacional en México, se les margina y hasta se les castiga con el cese fulminante de sus cargos.

Y es que su desacato no fue menor: desarticulan y desautorizan las premisas de las hipótesis y justificaciones para las operaciones clandestinas y/o de intervención y ocupación militar, como migración ilegal, narcotráfico y criminalidad. El asunto cobra trascendencia cuando nos enteramos, gracias a datos y análisis ofrecidos por Jorge Luis Sierra, que en las hipótesis de guerra del Pentágono en México se prevén acciones militares “ante la posibilidad de que en los próximos 25 años, el Estado mexicano ‘se derrumbe´, como resultado del embate prolongado y cada vez más intenso del narcotráfico” (El Universal, 24/1/09). Se indica que los escenarios del Comando de Fuerzas Conjuntas del DoD, ubican a México “en el contexto mundial de los estados débiles, cuyo fracaso puede presentar ‘desafíos muy serios’ a los planificadores estratégicos y operacionales de la fuerza militar de EU” (ibid).

Se presentan así amenazas graves a la jurisdicción e integridad territorial mexicana, ya que el DoD utiliza estos argumentos “para planificar el uso de su fuerza en las siguientes décadas, lo que haría evidente que la intervención militar debe estar considerada dentro de los escenarios posibles en la relación EU-México”. En todo esto lo que más llama la atención es el silencio del Pentágono sobre el papel tan activo de EU en el auspicio de las condiciones básicas de esos “juegos de guerra” en los últimos 26 años al impulsar desde el FMI-BM-BID el retiro del Estado mexicano de sectores estratégicos desregulando y desnacionalizando bancos, ferrocarriles, petróleo, electricidad, infraestructura, agricultura, agua, etcétera, y propiciando el desequilibrio sociopolítico por medio de la rigurosa aplicación (con el concurso de sus empleados en Los Pinos, Hacienda y Economía) de un guión basado en una drástica reducción del gasto público; la anulación de subsidios al campo, a los alimentos, al transporte para los sectores populares; la promoción de despidos masivos de burócratas, técnicos y trabajadores de las empresas privatizadas; la desregulación en beneficio de banqueros y comerciantes; la eliminación de límites a ganancias y al capital especulativo; la supresión del control de precios, devastando más el ingreso familiar con los topes salariales; la promoción de la apertura total e indiscriminada a la inversión extranjera y a las mercancías y capitales del exterior, socavando empleo y aparato productivo; el auspicio de los inversionistas foráneos como piedra angular del modelo, instaurando una política cambiaria muy flexible que permite la entrada y salida irrestricta de capitales nacionales y extranjeros, es decir, con “libertad para saquear a un país si en otro hay mayor seguridad o mayores tasas de ganancia” (Ver Arturo Ortiz W., Política económica de México, 1982-1995, Nuestro Tiempo,1994). Hasta hoy EU considera básica la libre oportunidad para especular en bolsas de valores y paraísos fiscales donde se bursatilizan y rematan nuestros activos estratégicos.

Tal es el recetario para la informalidad económica, la criminalidad y el narcotráfico. El Pentágono sabe que el estallido social está en curso y es de largo alcance: sin cambio de rumbo siguen balcanización e incautación del país.

kikka-roja.blogspot.com/

viernes, 16 de enero de 2009

El legado: John Saxe-Fernández

John Saxe-Fernández
http://jsaxef.blogspot.com
El legado

Ante el arribo de Barack Obama a la Casa Blanca, en medio de la más grave crisis humanitaria y económica desde la Gran Depresión, es hora de elaborar, de manera preliminar al menos, un inaplazable “corte de caja” ya que llega a su fin la primera década del siglo XXI con la pax americana en serio aprieto. La economía de Estados Unidos experimenta lo que sólo puede calificarse de “colapso integral” después de ocho años de aplicación de la más implacable guerra de clase a nivel doméstico e internacional, en la que se usaron como nunca antes instrumentos de Estado, civiles, militares y de seguridad, para favorecer intereses del capital monopólico/financiero bajo la sombrilla del free trade.

Linda J. Bilmes y Joseph E. Stiglitz (Harper’s, enero/2009) muestran que Bush/Cheney entregan al gobierno entrante una catástrofe económica estimada en 10 billones (trillions) de dólares, registrándose los mayores déficit fiscal, comercial y de deuda en la historia estadunidense e inusitados aumentos en desempleo e inflación, el desplome del ahorro y un debilitamiento de encadenamientos industriales de enorme magnitud, mientras el costo final de la genocida petroguerra y ocupación de Irak, según esos cálculos llega a los 3 billones: un descalabro económico con repercusiones históricas que acompaña la hecatombe humana, financiera y bancaria.

Vivimos un cambio de época que se acelera sin aparente límite de velocidad, y sin que la conciencia se percate de manera cabal del orden de magnitud de los vertiginosos procesos y acontecimientos y su vinculación con crímenes de lesa humanidad y eventos económicos y del entorno ecológico (calentamiento global) condición sine que non para el despliegue de los sucesos históricos sobre la corteza: el “momento monopolar” en la estructura de poder mundial gestado por el derrumbe de la URSS se desvaneció, aún antes de la catástrofe humana y militar desatada por la Casa Blanca de Bush/Cheney sobre la población iraquí y afgana.

El quebranto también es jurídico: ocurre en medio de un imperdonable cataclismo con más de un millón 200 mil bajas civiles en Irak. Ese ataque se hizo bajo las premisas de la “guerra de autodefensa anticipatoria”, anidada en la Doctrina Carter cuando éste proclamó en enero de 1980 ante el Congreso y el mundo que su país tenía “derecho” al uso de toda medida, incluso de la fuerza, para garantizar sus “intereses vitales”. Zbigniew Brzezinski, el asesor de seguridad de Carter, sabía que aquello era una réplica de la blitzkrieg nazi con los recursos naturales y humanos de Europa y Rusia en la mira.

La guerra contra Afganistán e Irak es, además, una debacle estratégico-militar y económica que, con la “guerra al terror” hizo añicos los anhelos de la Paz de Westfalia (1648) en el orden internacional y en especial de la normatividad gestada en torno al habeas corpus especificado en la Carta Magna inglesa hace 796 años, así como en los ordenamientos de los Juicios de Nuremberg y las convenciones de Ginebra. La ofensiva nazi-fascista persiste impune, en la tortura y en la implicación de Bush en la criminal agresión perpetrada por Israel contra el pueblo palestino: en ambos casos Obama debe deslindarse, empezando por girar una orden ejecutiva para cerrar Guantánamo. Fueron ocho años de ataque a la Constitución y el estado de derecho, en Estados Unidos y el orbe. Corresponde a la Corte Penal Internacional juzgar los crímenes de guerra de Bush/Cheney et al. En esto coinciden árabes y occidentales, con el endoso del público al gesto –zapatazo– del periodista Al-Zaidi para recordar a Bush los huérfanos y viudas de su carnicería en Irak.

Harold Pinter, en su conferencia magistral por el Nobel de 2005, con exactitud calificó ese genocidio como “un acto de bandolerismo, un acto de abierto terrorismo de Estado, que demuestra el desprecio absoluto por el concepto mismo del derecho internacional… un acto que intentó consolidar el control militar y económico de Estados Unidos sobre Oriente Medio”.

kikka-roja.blogspot.com/

jueves, 4 de diciembre de 2008

Dólar: colapso y alternativa: John Saxe-Fernández

John Saxe-Fernández
http://jsaxef.blogspot.com
Dólar: colapso y alternativa

Cuando se anunció que los países del Alba (Bolivia, Nicaragua, Dominica, Venezuela, Cuba, Honduras) y Ecuador habían acordado establecer equipos técnicos para crear una zona monetaria, empezando por implementar a la brevedad un “sistema de compensación y moneda contable”, la prensa internacional confirmó la preminencia y urgencia de esta propuesta “post Bretton Woods” al informar sobre la intensificación e inusitada ampliación de la crisis sistémica que abate a EU, agravada por la desregulación, especulación sin freno y opacidades del Tesoro, la Casa Blanca y la Reserva Federal en torno al rescate de Wall Street por más de 700 millardos de dólares.

Desde los casinos de la alta finanza se juega con EU y el mundo: ¿por qué rescatan a Bear Stearns y no a Lehman Brothers?, ¿acarrean beneficios colaterales (sobornos), las líneas de crédito ofrecidas por la Fed a México y Brasil por 30 millardos cada una, para socavar en la región alternativas al dólar y al FMI-BID-Banco Mundial? En medio del derrumbe del sistema dólar las maniobras entre amiguetes de centro y periferia procrean desastres mayores con alto impacto, como la caída de Citigroup (NYT, 22/11/08). Citigroup, con recursos estimados en 2 billones de dólares y correveidiles, tipo Robert Rubin en altos puestos avalando transas con Enron, Salinas, Zedillo y Goldman Sachs, es de ingrata memoria en México y ahora también en Wall Street.

Por su clasismo, el rescate o nacionalización de facto de Citigroup contrasta con las reticencias al subsidio de automotrices, General Motors (GM) en particular, por los millones de sindicalistas que se verían inmolados con su liquidación. William Engdahl de New World Order, autor de A Century of War (University of Michigan Press, 2004), dice que el destino de Citigroup está tan entrelazado con otras financieras de EU que las pérdidas en cadena, según el FMI, podrían llegar a 1.5 billones de dólares, mientras la crisis crediticia dificultaría el acceso a líneas de crédito-puente para GM con un impacto multiplicador devastador que lanzaría a la calle a más de 15 millones de trabajadores. A decir de Engdahl, esto significa que “… el rescate de Citigroup y la debacle de GM han confirmado la muerte del sistema dólar”, eje, con el Pentágono, de la Pax Americana por lo que no sorprende al autor que en la reciente cumbre entre la Unión Europea y los países asiáticos, voceros oficiales de China plantearan “desdolarizar” el comercio entre la UE y las naciones de Asia.

De aquí la relevancia del planteo del presidente ecuatoriano Rafael Correa en la cumbre del Alba al abogar por colocar la iniciativa del presidente Chávez de un Sistema Unificado de Compensación Regional (SUCRE), como parte de una arquitectura regional con tres pilares: un banco de desarrollo regional, un fondo de reservas internacionales común para la región “para contar con fondos que respalden en caso de crisis” y “una coordinación monetaria” incluyendo mecanismos de compensación recíproca “y una moneda contable como preámbulo de una moneda física”. Para mitigar impactos mayores urge empatar el Sucre de Alba con la desdolarización en curso en Mercosur y en el comercio entre Brasil y Argentina, y aplicar esa agenda activando “ahora” el Banco del Sur.

Aunados los efectos de largo plazo generados por corruptelas elitistas en Estados Unidos a la enormidad de su crisis hegemónica, en verdad hay riesgos de terremotos todavía mayores: con cálculos realizados por D. B. Papadimitriou y L. R. Wray del Instituto Levy en torno a la dimensión de los desfalcos bancarios acumulados en EU –unos 2 billones de dólares– y sobre la ineficacia de nuevas medidas adoptadas por el Tesoro y la Reserva Federal, Engdahl advierte que “2009 será un año de choques titánicos y de cambios en el orden global en una escala que quizá no se ha experimentado en los últimos cinco siglos. Es por ello que debemos hablar del fin del siglo americano y del sistema dólar”.

kikka-roja.blogspot.com/

jueves, 20 de noviembre de 2008

John Saxe-Fernández: El interregno

John Saxe-Fernández
http://jsaxef.blogspot.com
El interregno

Mientras el 4 de noviembre se realizaban los comicios en Estados Unidos, el New York Times advirtió al electorado sobre los graves riesgos que entrañan los 77 días que faltan para el comienzo del nuevo gobierno, en manos de Bush, Cheney y compañía. La admonición, vertida en un insólito editorial institucional –“Tan poco tiempo, tanto daño” (p. A/34)– denuncia medidas que, como “bola de demolición”, son lanzadas en lo que resta a ese lamentable régimen que padece el mundo, en particular las familias de más de 1.2 millones de muertos iraquíes, una ocupación y carnicería que Bush desea prolongar tres años más. La camarilla de los grandes monopolios en la Casa Blanca busca ropajes jurídico-temporales para tapar sus crímenes de guerra e intenta cerrar espacios y colocar candados.

La letanía de desgracias que Bush intenta legar a su sucesor mencionadas por el NYT, en modo alguno exhaustiva, incluye cambios en reglas y otras medidas que se agregan a un cúmulo de leyes, violaciones constitucionales y de derecho penal internacional como la Ley Patriota; la abrogación de la ley Posse Comitatus de 1878, que prohíbe al Ejecutivo el uso de las fuerzas armadas en territorio nacional; la nueva Ley Marcial, que otorga poderes al Ejecutivo, como el uso de la Guardia Nacional sin autorización de gobernadores y legislaturas estatales; la suspensión del habeas corpus, todo ello –y mucho más– gestado bajo el arrastre del 11/9, aprovechado, además, para justificar la agresión y ocupación petromilitar de Irak y Afganistán.

Como en la Alemania nazi, también en Estados Unidos el funcionamiento del orden jurídico, a nivel nacional e internacional, se sustenta en el estado de excepción, confundiendo la excepción con la regla: “todavía no conocemos todas las formas en que el gobierno ha violado los derechos ciudadanos con la excusa de luchar contra el terrorismo”, dice el NYT al revelar que el fiscal Michael Mukasey lanzó nuevas reglas para permitir que agentes de la FBI utilicen temerarias técnicas violatorias de la privacidad para obtener información, “aun si no hay evidencia de fechoría”. Se avala el uso de espías “para infiltrar a grupos legales, dedicarse a la vigilancia física prolongada y mentir acerca de su identidad al realizar interrogatorios a los vecinos, familiares o compañeros de trabajo” de algún inocente “sospechoso”, así como el uso de éstas y otras técnicas de vigilancia en grupos identificados por su raza, etnia o religión.

En giro reciente, Bush se retractó y decidió no cerrar Guantánamo y además insiste en arrebatarle a los venezolanos soberanía y petróleo mediante un golpe contra Chávez, luego de las elecciones regionales que se realizarán en Venezuela el 23 de noviembre. El periodista José Rangel informa de las actividades de oficiales de Estados Unidos para entrenar “a personas de la oposición en tácticas subversivas”. Los operativos en Guantánamo y Venezuela son expresión del tumulto de “desechos innobles” que deja Bush a Obama en las cloacas de la burocracia de seguridad. Otro objetivo suyo: debilitar normas para limpiar aire, agua y proteger especies en riesgo de extinción, todo a favor de monopolios petroleros, mineros, del carbón y químico-farmacéuticos.

En septiembre se tomaron “pasos perturbadores” para restaurar la condonación de impuestos a bancos que incurrieron en grandes pérdidas por otorgar préstamos chatarra. Dice el NYT que JP Morgan Chase y otras firmas “planean usar el rescate para realizar fusiones y compras, transacciones muy beneficiadas por el nuevo subsidio impositivo”. El alcahueteo de los talibanes de las finanzas fue llevado al G-20 bajo el principio bushiano de, como dice Elmar Altvater, “sacar buenos dineros de la mierda chorreante”, un sueño de alquimistas medievales que trataron de convertir “materiales innobles en reluciente oro”.

En el interregno Bush, Paulson y Bernanke se esfuerzan por convertir el colapso económico en un desastre peor que la Gran Depresión.

kikka-roja.blogspot.com/

jueves, 25 de septiembre de 2008

Morelia 15-S: las hipótesis: John Saxe-Fernández

John Saxe-Fernández
http://jsaxef.blogspot.com
Morelia 15-S: las hipótesis

El artero ataque contra la población indefensa de Morelia el 15 de septiembre, con lamentable saldo de muertos y heridos, concita un enérgico rechazo y exige analizar el contexto nacional e internacional en que ocurrió. Sebastián Liera (Rebelión, 2008) recuerda que antes del 15-S de Morelia hubo un 2-O en la Plaza de las Tres Culturas, un 28-J en Aguas Blancas, un 22-D en Acteal, un 14-E en Tlanepantla, un 4-M en Atenco y un 1-N en Oaxaca, en medio de una violencia desatada en la que casi 3 mil personas han muerto entre enero y agosto de este año, aterrorizando a la nación con decenas de degollados. En julio murieron 443 personas cifra mayor, según BBC, a las 360 bajas civiles en Irak ese mes y mucho más que las 540 muertes ocurridas en Afganistán en los primeros siete meses de 2008.

En asuntos complejos que vinculan la seguridad nacional e internacional, la política y la economía, no existen respuestas sencillas, centradas en un factor como narcoterrorismo. El S-15 es un escenario complejo, plagado de sorprendentes fallos periciales, estatales y federales. ¿Su mensaje?: “como en las Torres Gemelas y los ataque en Londres y Madrid, se inician en México agresiones indiscriminadas contra la población”. ¿Por qué ahora? ¿Quién o quiénes, de dentro o fuera del país, se benefician? En este espacio sólo es posible un esbozo preliminar de la matriz de hipótesis que se abren ante nosotros, en medio de un torrente de información periodística y documental, y cuando en el país arrancan tres etapas importantes de su vida económico-constitucional y político-electoral: a) la presentación de dictámenes –¿y votación?– legislativos en torno a la propuesta para la privatización de Pemex; b) los procesos electorales 2008-2009 de fuerte gravitación en la ecuación político-comicial de cara a las presidenciales de 2012; y c) el lanzamiento formal, por parte de Bush y Calderón, de la Iniciativa Mérida: junto al Plan Colombia, pieza clave en la guerra antiterrorista de EU, paralela a la apertura energética, para proyectar poder militar y empresarial estadunidense sobre gas, petróleo y otros recursos naturales estratégicos de México y América Latina.

La tendencia de la derecha al lucro político-electoral con estas atrocidades se advierte en la Casa Blanca de Bush, la Moncloa bajo Aznar, y Los Pinos de Calderón. La camarilla de Bush estuvo a la expectativa, en palabras del documento Rebuilding America´s Defenses, “a que ocurriera algún evento catastrófico y catalizador…que movilizara al público” y Condoleezza Rice, a raíz del 11-S, solicitó al Consejo de Seguridad “… pensar cómo sacar provecho de estas oportunidades para modificar de manera fundamental la doctrina de EU”. El 11-S fue usado a la usanza nazi, como “… una máquina para la manufactura del poder”.

El 15-S sirve de apoyo al excesivo presupuesto de seguridad del panista, quien además busca ventajas político-electorales del evento: “se puede opinar distinto en la libertad que nos han heredado nuestros próceres, en el marco de libertad que el propio Estado garantiza, pero no se puede atentar contra el Estado”. Si Aznar mintió y atribuyó el terrorismo de 2004 al nacionalismo vasco de ETA –y le fue como en feria–, Calderón, con igual descaro y riesgo, entretejió los atentados con “quienes quieren vernos divididos” vinculando la tragedia con las fisuras y polarizaciones del país, como si fueran la causa del ataque. Pero la agenda petrolera y de seguridad de EU en México es quizá la principal beneficiaria del S-15: inhibe acciones callejeras y “avala” la Iniciativa Mérida.

Coda: en 2002 se reveló un plan clasificado del Pentágono de 100 millones de dólares anuales (Memoria, julio de 2003) para usar Proactive, Preemptive Operations Group y ejecutar “misiones violentas y secretas, con la meta de estimular reacciones… que provoquen ataques contra gente inocente, y así crear otro pretexto… para cualquier acto de defensa de la seguridad nacional”.


Kikka Roja

jueves, 11 de septiembre de 2008

Infraestructura estratégica: John Saxe-Fernández: PARA QUE NO DIGAS QUE DEL PETROLEO NO RECIBES NADA MEXICANO ENGAÑADO Y AMAESTRADO POR TELEVISA

John Saxe-Fernández
http://jsaxef.blogspot.com
Infraestructura estratégica

Son ominosos los indicios de la decisión de las cúpulas del PAN y el PRI y algunos de la “oposición” para entregar el petróleo a los intereses de seguridad de Estados Unidos y a poderosos consorcios externos y sus voraces socios locales. Lo hacen en momentos de grave crisis económica mundial y nacional, y cuando la riqueza petrolera del país adquiere más peso geoestratégico por la creciente dificultad mundial en la localización de petróleo convencional. La inconstitucional reforma energética, que ahora Washington tramita por medio de Calderón, es un esquema de largo alcance que contempla el desmantelamiento de los fundamentos de la soberanía y de la integridad territorial mexicana.

Generada por la política económica adoptada por quienes se autocalifican de reformistas, la debacle nacional, en sus manifestaciones más lamentables, corrupción, delincuencia organizada, narcotráfico, etcétera, es usada como excusa para desmontar los cimientos del proyecto histórico de la nación. La política económica vigente por 26 años: un persistente despojo a la economía popular y de clase media y al patrimonio nacional es el problema central para la seguridad nacional mexicana, que se agrava por el uso policial-represivo de las fuerzas armadas, desgastándolas, minando sus bases logísticas y alejándolas de la función de defensa nacional.

Frente a esta situación, la iniciativa del PRI para adicionar el artículo 32 de la Ley Federal de Seguridad Privada, si bien pretende que “el resguardo de las instalaciones estratégicas sea una función cuyo ejercicio corra a cargo de las autoridades del país”, es indiferente a “que la protección de tales inmuebles sea realizada directamente por el Estado o concesionada a particulares” (La Jornada, 5/11/08, p. 13). El problema es que, si bien se indica que por “instalación estratégica” se incluye a Pemex y a la Comisión Federal de Electricidad, los caminos y carreteras, los puentes nacionales e internacionales, los puertos, recintos terminales e instalaciones portuarias, los aeropuertos, las instalaciones nucleares o con procesos radiactivos, las fronteras, estaciones migratorias, aduanas y obras de infraestructura hidráulica, y además se puntualiza en la referida ley que los prestadores de servicios deben abstenerse de proporcionarlos “en cualquier instalación considerada estratégica en los términos proyectados en la norma” (ibidem), dichas definiciones pueden cambiar.

El asunto es muy delicado, pues las fuerzas armadas, alejadas de su función de defensa nacional, están comprometidas en la guerra contra el narcotráfico y la delincuencia (tareas propias a cuerpos policiales y de inteligencia), además de que se trata de múltiples instalaciones: sólo en Pemex son varios miles distribuidas a lo largo y ancho del país que necesitan resguardo: como en Colombia, queda así la puerta abierta a firmas (nacionales y extranjeras) tipo Blackwater, SyColeman, DynCorp vinculadas al Pentágono y a la CIA.

El peligro a la integridad territorial del país por la acción de ejércitos mercenarios de Estados Unidos se acrecienta: la Iniciativa Mérida impulsa el contratismo en materia de seguridad mientras el proyecto de reformas y adiciones a la ley reglamentaria del artículo 27 constitucional en materia de petróleo de Calderón, como advierten Raúl Carrancá, Sergio Cárdenas y Virgilio Caballero, “… reduce y anula tramposamente el significado de área estratégica del Estado sobre el petróleo, hidrocarburos y petroquímica, al referir el significado de área estratégica a lo que disponga la propia ley y olvida que la Constitución obliga a la exclusividad del Estado sobre estos recursos”.

Si se concede a privados la extracción, almacenaje y distribución de hidrocarburos, entonces los nuevos propietarios de ductos y otra infraestructura contratan a sus propias “firmas de seguridad” (ejércitos mercenarios): es el resguardo de algo que por ley ya no es estratégico, sino suyo y que cubre el territorio nacional.


Kikka Roja

jueves, 14 de agosto de 2008

Petróleo: soberanía y territorio: John Saxe-Fernández

John Saxe-Fernández
http://jsaxef.blogspot.com
Petróleo: soberanía y territorio

Fue lamentable la ausencia de la geopolítica y de la seguridad nacional e internacional en la agenda del debate senatorial sobre la reforma energética. Ello por el papel crucial del Senado en política exterior; porque México y Pemex son “asuntos de seguridad nacional” para EU y además porque desde finales de 2007 supimos que se contemplaba usar empresas de seguridad (mercenarios) de esa nación para “proteger” la infraestructura de Pemex-CFE. Después, siguiendo el guión de Washington Calderón anunció el Plan México rebautizado Iniciativa Mérida (IM) en intento vano por desvincularlo del Plan Colombia (PC), plagado de masacres y despojos oligárquico-imperiales.

El PC y la IM fueron pactados en 2000 y 2008. Recuperar la experiencia colombiana es de gran valor: PC e IM fueron concebidos en función de intereses monopólicos y geoestratégicos de EU. Su objetivo es reorganizar la matriz territorial y explotar enormes riquezas naturales estratégicas. Son acciones privatizadoras y diplomilitares para conservar a Latinoamérica como reserva estratégica. Más ahora que escasean recursos vitales y EU importa 60 por ciento del crudo que consume. Como dice Ignacio Ramonet en el prólogo de El terrorismo de Estado en Colombia, Caracas 2007, de Hernando Calvo: el entramado oligárquico-imperial impulsa el desalojo de quienes viven “en territorios inmensamente ricos. Sus tierras pasan a manos de terratenientes, jefes paramilitares y poderosos intereses económicos”. Se trata de tierras, gas y petróleo; minería, forestas, biodiversidad y agua.

Según Carlos Lozano, de la Comisión de Notables para el Proceso de Paz, “el PC fue una decisión del gobierno de EU, elevada a política de Estado mediante la aprobación del Congreso. El texto original… fue en inglés… Para que los congresistas (conocieran) su contenido… tuvo que ser traducido”. En EU la aprobación legislativa la logró Clinton, movilizando a Madeleine Albright, secretaria de Estado, y al general Barry MacCaffrey, zar antidrogas y ex jefe del Comando Sur. Sorprendió la ausencia del gobierno colombiano entre quienes discutieron y defendieron el proyecto ante el subcomité de la Cámara baja del Congreso estadunidense. Con MacCafrey comparecieron: el jefe del Comando Sur, dos ex embajadores de EU en Colombia y Lawrence Mariage, vicepresidente de Occidental Petroleum.

El historial del PC muestra que el combate al narco, crimen o terrorismo sirve para encubrir y justificar la proyección y ocupación militar de EU en Colombia y que la IM hace lo propio acá y en Centroamérica. Su andamiaje, como ilustra Calvo ad nauseam, se concreta en “una guerra privatizada con mercenarios legalizados”. Mariage sintetizó la intención así: “El sector privado tiene enormes intereses estratégicos y vitales en juego en ese país y por eso el paquete de ayuda por mil 574 millones debe ser aprobado cuanto antes…” Solidarios con Mariage: British Petroleum, Caterpillar, Bechtel & Pfizer, US Columbia Business y nueve petroleras de EU, casi todas contratistas de Pemex.

El interés en el petróleo de Colombia, México y Venezuela se percibe claro: Bogotá es el séptimo exportador a EU y el tercero en América Latina después de Venezuela y México. Así lo explicó el almirante James Stavidris, jefe del Comando Sur: “La energía es otro factor involucrado en los vínculos hemisféricos. Tres de las cuatro principales fuentes de energía de EU están en el hemisferio: Canadá, México y Venezuela… y en las próximas dos décadas EU aumentará su consumo de petróleo y gas natural en 31 y 62 por ciento, respectivamente… Debemos asegurar estos recursos energéticos y la infraestructura de apoyo…”

Coda: senadores y diputados de los principales partidos han sido agasajados por la embajada de EU con giras al Comando Norte. Ahí platican sobre estos asuntos con Stavidris o Víctor Renuart Jr., jefe del Comando Norte. Ante esta artillería diplomilitar, ¿por qué no debatir aquí “petróleo, soberanía e integridad territorial”?


Kikka Roja

jueves, 17 de julio de 2008

¿Armagedón económico-militar?: John Saxe-Fernández

John Saxe-Fernández
http://jsaxef.blogspot.com
¿Armagedón económico-militar?

La crisis hipotecaria de Estados Unidos se profundiza, se generaliza y contagia la estructura bancaria mundial, descalabra los flujos financieros, acarrea estímulos y una mayor especulación junto a atisbos de pánico monetario para los grandes tenedores de dólares en Europa, Medio Oriente y Asia. Se desestabilizan las bolsas del mundo mientras la contaminación de la crisis bursátil se acelera por la respuesta de los inversionistas europeos y asiáticos ante el torpe rescate ideado por la Casa Blanca de Fannie Mae y Freddie Mac, los dos gigantes del mercado hipotecario estadunidense. Paul Robson, estratega monetario del Royal Bank of Scotland Group de Londres sintetizó la situación así: “La gente piensa que ésta es la próxima oleada –de quiebras–… Los inversionistas huyen de los problemas de los bancos regionales de Estados Unidos” (International Herald Tribune –IHT–, 15/7/08).

El IHT también informa que ayer la Televisión de California mostraba escenas que recuerdan las estampidas de 1929: largas filas de clientes del IndyMac Bancor, incautado por las autoridades el viernes pasado, mientras en Wall Street circulaban listas de otras empresas prestamistas “vulnerables”. Junto al pánico, la sacudida es de orden mayor por la reticencia de los inversionistas ante el rescate de 100 mil millones de dólares (mmdd) propuesto: la cantidad es más que “modesta” si se tiene presente que esos gigantes inmobiliarios poseen la mitad de las garantías hipotecarias estimadas en 5 billones de dólares. Según el Departamento del Tesoro, la deuda de esas entidades asciende a los 800 mmdd en el caso de Fannie y 740 mmdd para Freddie (La Jornada, 15/7/08), cifra que duplica el PNB de México. Agréguese a esto –en medio de un incalificable genocidio– la desestabilidad regional y los costos de la guerra en Irak, de acuerdo con Joseph Stiglitz entre los 3 y 5 billones de dólares.

Por lo que los impactos se sienten desde Tokio y Shangai hasta Londres y Sydney, involucrando a gigantes como Mitsubishi Financial Group, el UBS de Suiza, al Deutche Bank y a HSBC Holdings de Inglaterra. Además, los fundamentales de la economía de Estados Unidos se cimbran, Detroit y el empleo se desploman y en junio los precios de gasolina y alimentos elevaron el índice inflacionario general por encima del ritmo de los últimos 25 años, mientras la desaceleración coquetea con una recesión distinta a la de los años 70 del siglo pasado, por el peak-oil y el colapso ambiental en curso, que acentúa el riesgo de depresión con secuelas sociopolíticas y militares potencialmente devastadoras.

Lo que ilustra, otra vez, que estamos no sólo ante el poder del capital y sus coaliciones de clase –que Jeff Faux llama “el partido de Davos” en Guerra global de clases (México,UACM, 2008), sino también de sus crecientes contradicciones, que se expresan hoy de manera más universal y destructiva que ayer, en contextos de incertidumbre y riesgo balístico y termonuclear.

En medio del ímpetu de esta crisis general se hunde el globalismo pop y la ortodoxia neoliberal. Excepto entre acólitos y tecnócratas, aquello de que el Estado se desvanece y todo debe dejarse a la mano invisible del mercado aparece como otra estafa de Reagan y Thatcher. Algo similar se observó en el periodo librecambista, de la crisis de 1870 al terremoto militar iniciado en 1914. Desde entonces la relación entre mercados desregulados, crisis y guerra ha estado en el núcleo de la indagación de la ciencia social. El caos de 1929 mostró que los mercados, dejados a su dinámica invariablemente colapsan.

Existen fuertes fisuras y tensiones entre los polos de poder, anidadas en el desastre humano y estratégico de la guerra en Irak, los déficit gemelos de Estados Unidos y el desborde especulativo en curso gestado al calor desregulador de los años 80. Esta crisis conlleva peligros terminales y opciones de futuro. Para Latinoamérica la alternativa está en la construcción de una arquitectura político-monetaria, militar y financiera propia.


Kikka Roja

jueves, 3 de julio de 2008

John Saxe-Fernández: Calderón: ficha de EU: coaliciones de corte militar-empresarial, usando el CN y la ASPAN

http://jsaxef.blogspot.com
Calderón: ficha de EU

El endoso de Calderón a la integración militar bajo auspicio de EU por medio del Comando Norte (CN), la ASPAN, la Iniciativa Mérida y el Proyecto Mesoamérica, arriesga la integridad territorial mexicana y le adjudica a la oficina presidencial el patético papel de “ficha” (asset) de EU en el tablero estratégico de las Américas; una capitulación de soberanía y de liderazgo latinoamericano que comparte con Álvaro Uribe, su homólogo colombiano.

Cabe recordar que la Iniciativa Mérida, gemela del Plan Colombia, es un inductor presupuestal que integra a México al CN mediante negocios: asesorías, equipo, entrenamiento, intercambio de información y movilización conjunta de tropas bajo los bastidores de empresas contratistas tipo Blackwater y DynCorp, brazos clandestinos del Pentágono al mando de ex oficiales militares y de inteligencia estadunidenses, como ya se advirtió desde estas páginas.

La construcción imperial de coaliciones de corte militar-empresarial, usando el CN y la ASPAN, se encamina, por conducto de la Iniciativa Mérida, a desvanecer la función de “defensa nacional” en las fuerzas armadas mexicanas, para sustituirla por tareas de “seguridad interna” o de corte netamente policial.

Estas instancias castrenses también se coordinan con el Comando Sur que opera del Suchiate a la Patagonia y tienen entre sus objetivos: a) el posicionamiento territorial para el control de la población y los recursos naturales de América Latina con despliegues de bases, operativos navales, aéreos y terrestres; y b) la utilización de la Iniciativa Mérida y el Plan Colombia como arietes para una ofensiva oligárquico-imperial encaminada a generar sinergias entre ambos comandos que refuerzan su dominio de América Central y el Caribe desplegando operaciones abiertas y encubiertas para socavar, por la vía de la desestabilización socioeconómica y militar, el proceso de formación de coaliciones sudamericanas en curso.

La mencionada sinergia se explicitó en el comunicado del Proyecto Mesoamericano cuando los nueve mandatarios participantes “… reiteraron su disposición a estrechar la cooperación entre sus países y con EU en el marco de la Iniciativa Mérida” (BBC-Mundo, 29/6/08).

Esos operativos se intensificaron después que Brasilia informó a la secretaria Rice de su apoyo para la formación de una estructura sudamericana de defensa que excluye a la potencia norteña.

Al poco tiempo se registraron los violentos ataques contra territorio ecuatoriano desde Colombia, haciéndose visible la acción oculta de EU actuando a través de su “ficha” colombiana.

Así se puso en práctica la doctrina de la guerra preventiva, de las “fronteras flexibles” y de lo que el Pentágono concibe como el derecho de intervenir militarmente en “espacios de precaria gobernabilidad” –dotados sin excepción de abundantes y estratégicos recursos naturales–, todo en abierto desacato del derecho internacional y de acuerdos multilaterales suscritos por EU con América Latina.

El regreso de la “diplomacia de las cañoneras” con la puesta en operación el martes pasado de la cuarta Flota –establecida durante la Segunda Guerra Mundial contra ataques submarinos alemanes y desactivada desde 1950– lo anunció el Pentágono con una gira por la región del almirante Jim Savridis, a cargo del Comando Sur, exactamente una semana antes del cónclave fundacionaaal de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), realizado en Brasilia, el 23 de mayo pasado, cuyo fundamento es la defensa conjunta de la inviolabilidad territorial de los firmantes, en contraste con las doctrinas y programas castrenses hilvanados con diseños de desincorporación territorial del Banco Mundial-BID y ONG “ambientalistas”, para una refuncionalización estadunidense del espacio nacional, como ocurrió con los ferrocarriles de México y que la iniciativa energética de Calderón llevaría a los vastos complejos económico-territoriales, involucrados en la operación diaria de. Petróleos Mexicanos y la Comisión Federal de Electricidad.


Kikka Roja

jueves, 19 de junio de 2008

John Saxe-Fernández: Entrega: salto “cuántico”

John Saxe-Fernández
http://jsaxef.blogspot.com
Entrega: salto “cuántico”

Al tiempo que se preparaban los detalles de la “reforma estructural” para dar cobertura legal a la privatización, extranjerización y eventual desintegración de Pemex, en curso desde los años 90, EU también elaboró un programa que permite asegurar militarmente tan magno despojo a favor de sus empresas. Se trata de un despliegue militar hacia todo el territorio mexicano disfrazado con ejércitos mercenarios que operan como contratistas privados y que son brazos clandestinos del Pentágono y la CIA. Esas firmas, entre las que resaltan Blackwater y DynCorp, están bajo mando de ex oficiales militares y de inteligencia de EU. La primera perpetra frecuentes masacres y brutales violaciones a los derechos humanos de la población iraquí, y la segunda, desde Colombia, disemina plaguicidas que se extienden a varias provincias ecuatorianas afectando de manera grave la salud humana y el medio ambiente. Su inclusión en el paquete de seguridad que discutía el embajador Garza con Calderón desde mayo de 2007 se posicionó en el Congreso estadunidense como el aspecto más delicado de lo que entonces se denominó Plan México. Según John Ariscano (“Los siniestros contratistas…”, Clarinet, de Chile),

Blackwater cuenta con 100 mil hombres. Esas empresas, “además de inmunidad diplomática, tienen a disposición helicópteros, carros blindados y vehículos Hummer dotados de ametralladoras y han actuado –caso de DynCorp– al servicio de narcomafias y terroristas aliados a Washington”, por lo que cabe preguntar cómo incidirán ¿o inciden ya? en la ola de violencia que asuela a la nación. Es tema vedado al público. Existen antecedentes: ya se usaron mercenarios políticos de la derecha española y de Washington, tipo Dick Morris y Rob Allyn, en la creación y manejo electoral de las provocaciones de 2006, y después de Montebello Calderón planteó otorgar la protección de las instalaciones de Pemex-CFE a SyColeman.


A fines de 2007 se supo que se realizaban conversaciones sobre asuntos de seguridad entre Garza y Calderón. El embajador dijo que Calderón le ofrecía una “ventana de oportunidad” y que colaboraba en la materia “más que cualquier otro presidente”. Colocar en riesgo la soberanía y superar en entreguismo a Santa Anna, Salinas, Zedillo y Fox es una hazaña difícil de superar, pero así lo confirmó un alto funcionario del gobierno de Bush, que pidió el anonimato, al calificar el Plan México endosado por Los Pinos como “… un salto cuántico hacia delante (quantum leap forward), en parte porque México está dispuesto a arriesgarse en la construcción de una nueva relación” (citado por Alfredo Corchado “1.4 billion US Mexico Anti-drug program to entail use of private contractors”, Dallas Morning News, 19/10/07).

El “salto cuántico” se centra en el hecho de que, como expresó el general Roberto Badillo Martínez, “… ningún gobierno mexicano durante el siglo XX permitió la entrada de tropas (de EU) ni de mercenarios disfrazados, y mucho menos de asesores”. Por eso el hermetismo y manejo publicitario: al Plan México luego se le llamó Iniciativa Mérida para suavizar la asociación con el Plan Colombia, otro esquema de negocios bélico-industriales y de ocupación territorial también elaborado bajo el pretexto de la lucha contra el narcotráfico y en el que es central el papel de los contratistas privados en el teatro de operaciones y en la oferta de adiestramiento y equipo.

En las legislaturas se soslaya el uso de contratistas privados en la Iniciativa Mérida, quizá por el rechazo del público mexicano al menor asomo de ocupación militar del país. Corchado indica que Silvestre Reyes, presidente del comité de inteligencia de la Cámara de Diputados estadunidense, mostró preocupación por el posible uso de contratistas privados del país vecino en México: “es una de las áreas más sensibles en las negociaciones entre los dos gobiernos… los oficiales mexicanos están preocupados al respecto y nosotros también por el uso que se hace de los contratistas en Irak”.



Kikka Roja

viernes, 13 de junio de 2008

Petróleo: el debate incómodo : John Saxe-Fernández formula una severa crítica

Editorial

Petróleo: el debate incómodo

En una declaración que ha generado deslindes hasta en las filas de su propio partido, el titular del Ejecutivo federal, Felipe Calderón Hinojosa, dijo ayer en Madrid que carece de profundidad el foro organizado por el Senado de la República para analizar la iniciativa privatizadora de la industria petrolera, presentada hace poco más de dos meses por Los Pinos. Arropado por los intereses empresariales peninsulares, prestos a beneficiarse a su vez con las pretendidas reformas legales, Calderón afirmó, además, que no se han abordado en el debate los asuntos técnicos; se quejó de que “se han discutido cosas ideológicas, cosas históricas” en lugar de “cuestiones técnicas”, de que han quedado fuera del debate los “elementos centrales de mi propuesta” y de cómo ésta “sí aumenta la producción de petróleo, sí aumenta la producción de gas, de gasolina, las reservas y la rentabilidad de Pemex para los mexicanos”.

Este discurso descalifica a quienes han participado en el foro senatorial –incluidos los defensores de su proyecto de reformas legales–, a quienes lo organizaron y, lo más lamentable, al propio Senado de la República, la institución que convocó y que modula el debate en curso. Por añadidura, las palabras de Calderón ponen de manifiesto una percepción sesgada –y marcadamente ideológica, ésa sí– o bien desinformada, de lo que ha venido ocurriendo en la casona de Xicoténcatl en semanas recientes, porque en las sesiones del debate se ha realizado un análisis exhaustivo no sólo de la iniciativa presidencial que pretende transferir a particulares filones enteros de la industria petrolera mexicana, sino también una revisión política, histórica, económica, financiera, tecnológica y legal de los hidrocarburos nacionales y de las labores de prospección, extracción, comercialización y administración relacionadas. En suma, el debate en el Senado no sólo ha ido a fondo en el tema estricto de la propuesta calderonista, sino también ha abordado en profundidad la circunstancia actual de Pemex y sus perspectivas posibles, tanto por los partidarios de la privatización propuesta como por sus detractores. Varios exponentes cuestionaron las premisas mismas en que se basa, de manera explícita o por omisión, la iniciativa calderonista. En particular, se critica el pobrísimo y errado “diagnóstico” que sobre la paraestatal efectuó la actual administración, se ha señalado que la propuesta no plantea nada específico para corregir y erradicar fenómenos que empobrecen y asfixian a Pemex –el saqueo fiscal, la intolerable corrupción en la empresa y en el gobierno federal, así como el exasperante dispendio de recursos que caracteriza al estilo panista de administrar– y se ha dicho que el desafío del país, en la hora presente, no consiste en mantener o incrementar la producción de crudo, sino, por el contrario, en reducirla, a fin de preservar parte de ese recurso no renovable para usufructo de las generaciones futuras.

Al contrario de lo que sostiene Calderón Hinojosa, los debates en Xicoténcatl han alcanzado tal profundidad que han permitido a la opinión pública asomarse, desde el análisis del manejo oficial del petróleo, a las miserias e inconsecuencias de la política económica vigente, caracterizada por su extremado pragmatismo –extraer todo el crudo que sea posible y venderlo lo más rápido que se pueda–, por su irrefrenable tendencia privatizadora –de la refinación, de los oleoductos y de los trabajos de perforación y extracción–, por su vocación depredadora de los recursos naturales y por su tendencia a favorecer a los capitales foráneos en detrimento de los imperativos del desarrollo nacional.

Por lo que puede verse, Calderón desearía que su iniciativa dispusiera de un respaldo universal y unánime y que el debate alrededor de ella se limitara a precisar y afinar detalles de la transferencia de la industria petrolera del país a empresas privadas de México y, sobre todo, del extranjero. Sin embargo, en los foros convocados por el Senado de la República se ha manifestado lo contrario, es decir, la falta de consensos en torno a la política petrolera que debe adoptar el país y la gran división que este tema provoca en la sociedad mexicana. También se pone en evidencia que el rescate y la modernización de Pemex requieren –más que de capitales privados– de probidad, de austeridad y de transparencia en las oficinas públicas, de democracia sindical, de un mínimo sentido de justicia social para fijar las políticas fiscales, y de sentido nacional y de visión de futuro. No cabe extrañarse, en consecuencia, de que los ejercicios de reflexión que tienen lugar en Xicoténcatl resulten profundamente incómodos para el Ejecutivo federal.

En el debate no se han rebatido temas centrales de mi propuesta: Calderón
Claudia Herrera Beltrán y Armando G. Tejeda (Enviada y corresponsal)
Madrid, 12 de junio. Para el presidente Felipe Calderón, el debate que se realiza desde hace un mes en el Senado de la República sobre la reforma de Petróleos Mexicanos (Pemex), si bien ha sido “enormemente benéfico” para el país, también ha implicado discusiones ideológicas e históricas en las que ni siquiera se ha rebatido el aspecto central de su propuesta
La integración, fundamental para el desarrollo de la petroquímica: expertos
Enrique Méndez y Roberto Garduño
En el debate del décimo foro sobre la reforma energética, expertos y empresarios resaltaron que la cadena de la industria petroquímica no puede continuar rota, mientras, en una postura que mereció amplio aplauso y provocó sorpresa entre los panistas, el general en retiro y diputado por el PRI Roberto Badillo afirmó, en nombre de su bancada, que los responsables de la caída de Petróleos Mexicanos (Pemex) han sido los ex presidentes de la República, desde Miguel de la Madrid, sus secretarios de Hacienda y de Energía, así como los directores de la paraestatal y los encargados del...
El abandono oficial convirtió la petroquímica en chatarra
Roberto Garduño y Enrique Méndez
La industria petroquímica, uno de los pilares del desarrollo económico en países productores de petróleo, en México se abandonó deliberadamente hasta convertirla en chatarra, manifestó la mayoría de los especialistas que acudieron ayer a la Cámara de Senadores a exponer sus propuestas y críticas al sector.
  • En contraste, cita casos de Bolivia y Venezuela, que renacionalizaron el sector energético
  • Saxe-Fernández: sin precedente, el afán entreguista del patrimonio de la nación
  • El investigador universitario formula una severa crítica al proyecto privatizador de Calderón
Blanche Petrich

El investigador John Saxe-Fernández señaló a Bolivia y Venezuela como ejemplo de dos naciones “posmonroeístas” que, con sus respectivas estrategias de nacionalización de hidrocarburos, han puesto sus recursos naturales al servicio del interés nacional. En sentido contrario, señaló, marcha en México el proyecto energético calderonista, que pone al servicio del interés imperial no sólo el petróleo, sino a todo México.Fue durante su exposición en la Universidad Autónoma de la Ciudad de México, donde se realizó una conferencia sobre energéticos en el contexto del Festival hacia la Construcción de la Patria Grande, en el cual también participaron el embajador de Bolivia, Jorge Mansilla, y el agregado comercial de Venezuela, Juan Carlos Arocha.

El primero había trazado la dimensión histórica del caso boliviano y el saqueo histórico de riquezas naturales que sufrió su país, hoy el más pobre del continente, después de Haití: desde la montaña de plata del Potosí –vaciada por los colonizadores españoles–, el oro robado por los gambusinos brasileños, el cobre y el guano arrebatados por Chile junto con sus costas, y el estaño que Estados Unidos saqueó durante la primera mitad del siglo XX –metal indispensable para las municiones y los aviones que hicieron las dos grandes guerras de la centuria–, hasta el gas que la española Repsol explotaba dejando en el país solo un dólar por cada diez de ganancia durante el gobierno neoliberal de Gonzalo Sánchez de Lozada.De ahí el famoso aforismo de Coco Manto, como algunos llaman afectuosamente a Jorge Mansilla: “El gas es un compuesto de etano, metano y butano que nos quieren quitar zutano, mengano y perengano”. De ahí también que, con la victoria electoral del indio aymara Evo Morales, en 2005, esta historia de cinco siglos diera un vuelco. “Nos empezó a cambiar la suerte –dijo Mansilla– y ahora Brasil y Argentina dejan al año 2 mil 900 millones de dólares anuales en el país”.Pero Bolivia, añadió el embajador, es “mucho más que gas”. El país andino cuenta con uno de los yacimientos de hierro no explotados más grandes el continente, con grandes recursos acuíferos subterráneos y con una enorme veta virgen de urexita, material necesario para la computación y la telefonía celular.

“La pregunta es –concluyó el diplomático–: todos estas riquezas naturales, ¿para qué, para dónde, para quién?”En su turno, el encargado de negocios de Venezuela recordó que su país, junto con México y Colombia, son claves para la estrategia estadunidense que prevé, para satisfacer las necesidades de su reserva estratégica energética, importar dentro de 20 años dos de cada tres barriles de petróleo producidos en el mundo. Pero Venezuela hace ruido en este plan. “Antes de Hugo Chávez, Venezuela vivió su historia de espaldas al Caribe y al Amazonas, mirando sólo hacia el norte. El primer cambio bajo el chavismo fue conectar con la petroamérica y proponer políticas de integración con esas regiones introduciendo relaciones de intercambio distintas a las que dominan en el trato con las empresas trasancionales y con el Norte. Esta integración distinta propone el fortalecimiento regional para mejorar las condiciones de negociación frente a los países industrializados y las corporaciones, y pone énfasis en la lucha contra la exclusión y la pobreza, mientras el Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA), promovida por Washington, propicia el predominio del comercio como motor de todas las relaciones y abate fronteras para un sistema de supuesto libre comercio que en realidad conduce al monopolio”.

A estas dos visiones –la boliviana y la venezolana– Saxe-Fernández, doctor en estudios latinoamericanos de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México llamó “posmonroeísmo”, ya que en ambas naciones se han hecho a un lado las recetas del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional para revertir los efectos de las nacionalizaciones petroleras en los países productores.México, en cambio –afirmó–, sigue la hoja de ruta que se trazó en 1995, cuando el entonces presidente Ernesto Zedillo accedió, más como una rendición al término de una guerra que como un convenio entre dos naciones soberanas, a las condiciones que impuso Estados Unidos a cambio del rescate bancario que le concedió Bill Clinton para –gradualmente– desmantelar el control del Estado mexicano sobre Pemex.Saxe-Fernández, quien por décadas ha estudiado e investigado temas de seguridad energética, insistió –como lo ha hecho en otros foros– en subrayar la “gran dimensión histórica” que entraña la propuesta del gobierno de Felipe Calderón para el petróleo mexicano, “una entrega del patrimonio nacional sin precedente”.


Kikka Roja

jueves, 5 de junio de 2008

John Saxe-Fernández: Hoja de ruta: El factor geoenergético, fuera del debate

  • El factor geoenergético, fuera del debate: Saxe-Fernández

Mariana Norandi

En el debate sobre la reforma energética se ha excluido el elemento geoestratégico y de seguridad como parte fundamental de un contexto donde Estados Unidos, desde la década de los 70, ha agotado sus reservas de crudo convencional y no tiene la menor intención de controlar sus niveles de consumo y derroche energético, afirmó el investigador John Saxe-Fernández al inaugurar ayer, en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el coloquio México: situación y alternativas energéticas 2008-2050.

“El elemento geoestratégico está fuera del debate, como lo estuvo también en los esbozos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, porque el fondo motivacional de este acuerdo fue el petróleo”, puntualizó. El coloquio concluirá mañana en el Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades de la UNAM, y reúne a más de 20 expertos y técnicos en materia energética, que analizarán el panorama nacional del petróleo y posibles alternativas renovables. “La nitidez técnica con la que aquí se está manejando el asunto hace que cualquier interlocución serio sobre la iniciativa energética calderonista tenga presente las observaciones de estos expertos. Porque a nosotros la agenda no nos la impone Los Pinos, sino la situación del país, y ante la falta de planeamiento y percepción queremos ver el panorama energético de ahora hasta el 2050”, manifestó Saxe-Fernández.

El ingeniero Felipe Ocampo, del grupo Pemex Constitución 1917, afirmó que el debate sobre la reforma petrolera se ganó antes de que empezara, porque se cayeron los dos argumentos fuertes que tenía el gobierno: la carencia de recursos y la falta de tecnología. “El primer argumento es de risa, y el segundo, no hay ningún tipo de tecnología en ninguna refinería del mundo que tenga lo que no tenemos en México.” De acuerdo con el especialista, si queremos ser autosuficientes en petroquímicos necesitamos procesar en el país entre 800 mil y 900 mil millones de barriles más de petróleo, “en lugar de un millón 200 mil diarios, tendríamos que extraer 2 millones”. El especialista hizo un análisis de la situación del petróleo en México de 1982, cuando se instauró el neoliberalismo, hasta el actual periodo panista.

Abordó los elementos presentes en la iniciativa de reforma petrolera y señaló que el Banco Mundial, desde un principio, “ha sido actor trascendental en la idea de revertir los aspectos fundamentales de la nacionalización petrolera mexicana. Con el panismo este proceso rebasa todo límite imaginable, legal y constitucional”.

John Saxe-Fernández
http://jsaxef.blogspot.com
Hoja de ruta

La hoja de ruta de EU para Pemex fue adoptada como propia por Los Pinos desde 1982. Usar al Banco Mundial (BM) para revertir la nacionalización petrolera se acentuó con el rescate que pactó Zedillo con Clinton en 1995. Con Fox y Calderón, así lo muestra Israel Rodríguez (La Jornada, 1/6/08), el proceso sobrepasó todo límite imaginable. La desnacionalización del proceso de toma de decisiones requerida para desmantelar Pemex se funda en el manejo discrecional de las condiciones atadas a los préstamos para incidir en la dinámica interna, sea en ferrocarriles, bancos, comercio exterior, infraestructura, agricultura o energía. La codicia empresarial, doméstica y externa, así como la creciente dependencia de EU al crudo importado, impulsaron al BM a colocar la reserva petrolera y el portafolio de negocios de Pemex como objetivos prioritarios.

Para lograrlo sugiere: 1) permitir contratos de riesgos para exploración y desarrollo, 2) abrir a la inversión extranjera mayoritaria en petroquímica, 3) dividir Pemex en empresas separadas y en competencia, 4) permitir la competencia interna e internacional frente a Pemex, y 5) privatizar Pemex.

En sus Mexico Strategy Papers, de 1995, el BM dice que Pemex debe “… otorgar contratos competitivos para exploración y desarrollo de cada campo petrolero para que en los más grandes se puedan extraer mayores rentas, ya que en éstos la extracción es más barata”. Luego que Salinas, country manager del BM, quebró la integración vertical de Pemex en cuatro organismos descentralizados con un ente coordinador, el BM plantea la atomización: “… cada empresa subsidiaria en existencia sería dividida en, quizá, cuatro empresas independientes… cuatro de exploración-producción –cada una tan grande como una empresa privada– y cuatro empresas de refinación y mercadeo. El corporativo Pemex cesaría de existir”. Como en Brasil, el BM propone una institucionalidad similar a la de EU: México debe integrar una “Agencia Federal de Hidrocarburos separada de Pemex, encargada de las áreas de exploración y producción que negociaría y firmaría los contratos… Entes similares existen en EU, como la Texas Railroad Comission” (TRC). Sometida a intereses petroleros, la TRC se encarga no de trenes, sino de regular el mercado del crudo.

El vital elemento geoestratégico y de seguridad, excluido de la discusión pública del TLCAN y ausente en la agenda del debate sobre la reforma calderonista (por fortuna lo abordó Jorge Eduardo Navarrete la semana pasada), fue propuesto por Blyth Eastman & Dillon (BE&D) en 1979 como eje empresarial para la “integración energética de la América del Norte”, establecida, según esa firma asesora de Wall Street, bajo la premisa de borrar “las diferencias nacionales entre Canadá, EU y México” para satisfacer las “necesidades de energía de los tres países”. Se dejó de lado que EU agotó su reserva de crudo convencional a inicios de los 70 y era (y es) el principal consumidor y derrochador de petróleo del planeta, mientras sus dos “socios” son autosuficientes. BE&D propuso “una especie de mercado común que integre los vastos recursos energéticos de América del Norte”.

El petróleo es motivo de fondo del TLCAN que Bush saca a la luz en 2005 con la ASPAN y su Consejo para la Competitividad de la América del Norte, que incluye grandes empresas y cabildos, el Consejo Coordinador Empresarial entre ellos. Mientras un sigiloso Fox, iluminado por Enron y el BM, abría Pemex a decenas de zorros tipo Halliburton, EU agregó el paraguas militar (Comando Norte). Y Calderón, enlazado con la rapiña doméstica, busca constitucionalizar la red de negocios con la ayuda de gobernadores panistas y priístas que esbozan una feudalización de Pemex, al modo de la oligarquía boliviana en Santa Cruz, para lucrar con la balcanización de México.

Esta es la hoja de ruta de las reformas de Calderón. Por eso el BM y Tony Garza, embajador de EU y ex integrante de la TRC, apoyan, entusiastas, la reforma.

Kikka Roja

jueves, 22 de mayo de 2008

John Saxe-Fernández: Entreguismo y anticonstitucionalidad

http://jsaxef.blogspot.com
Entreguismo y anticonstitucionalidad

El diputado panista Jorge Nordhausen increpó a Claudia Sheinbaum en el segundo debate sobre la “reforma energética”, no por su defensa conceptual y técnica de la propuesta alternativa del “gobierno legítimo” encabezado por Andrés Manuel López Obrador, que fue impecable, sino por llamar a Calderón “presidente usurpador” en el Senado.

El término “espurio” atiende al fraude de 2006. Pero la percepción de ilegitimidad ante un tercio del electorado no es estática: crece ante la inseguridad ciudadana con todo y la militarización de la campaña contra el narcotráfico, que descompone el equilibrio cívico-militar, mientras poner en marcha simultáneamente una reforma petrolera y abrir el país al intervencionismo policial-militar de EU, por medio de la “Iniciativa Mérida”, es agredir a la nación y encender la mecha del “polvorín social” gestado por 26 años de acumulada agresión a la economía popular, al aparato productivo y al empleo.

Las encuestas muestran que de marzo a mayo de 2008, el capital político de Calderón se colapsó. Un deterioro alentado además por la sensación de que se mal usa la oficina presidencial al dar rienda suelta al entreguismo jurisdiccional y a codicias internas y externas por el petróleo y el gas natural y que, con la complicidad de la cúpula priísta, se vulneran las bases materiales de la soberanía a favor de grandes negocios con empresas como Repsol, Halliburton, Schlumberg, etcétera. Calderón colabora en los esfuerzos de EU por establecer una sombrilla policial-militar-penal sobre México, para otorgar “seguridad” a sus inversionistas, incluyendo la vía del sometimiento jurisdiccional y la utilización de instrumentos de claro corte agresivo y unilateral, agudizando la “descomposición” del sistema político. Así opera el Plan Colombia y también la Iniciativa Mérida. Calderón y Uribe son piezas centrales en la puesta en marcha de una plataforma para un mayor despliegue de programas de adiestramiento, transferencia de tecnología, bases y personal militar en América Latina. Esos son los ejes para apuntalar el dominio sobre los vastos recursos naturales –los combustibles fósiles en primer lugar, pero también los minerales, agua y biodiversidad– de lo que considera “su” hemisferio y “sus” negocios, incluyendo el narcotráfico.

Con la reforma energética se “legalizan” contratos que son una copia de los inconstitucionales Contratos de Servicios Múltiples utilizados en la Cuenca de Burgos, como lo señaló Jaime Cárdenas en el tercer debate y lo documentó Jorge García, exabogado de Pemex, ante la Secretaría de la Función Pública (SFP) y el Órgano Interno de Control, quien además recurrió a la Comisión Nacional de Derechos Humanos para salvaguardar su integridad. (“Contratos a Trasnacionales”, Contralínea, Mayo 2008). La “reforma” de Calderón intenta dar cobertura legal a esas “transas” (pp 22-39) y, más importante, a las que están por venir: los expedientes clasificados como confidenciales en Pemex y de la SFP dejan en claro que la “reforma” abre las compuertas a lo que sólo puede calificarse de una vasta maniobra de saqueo y latrocinio contra la nación. Por medio de cambios a la ley que regula el artículo 27 se procede contra el espíritu y letra de la Constitución para generalizar el tipo de “estratagemas” que, como apunta Ana Lilia Pérez, “…habrían realizado César Nava y José Néstor García Reza” –ahora abogado general de Pemex– “…para entregar la operación de la cuenca de Burgos –la región productora de gas no asociado más importante del país–, en beneficio de seis trasnacionales que desde 2004 controlan la exploración y explotación del energético en la zona” (p24). Esa transgresión se ampliaría al país y a toda la industria petrolera.

Los tratos de Santana con Polk –por medio de Alejandro Atocha– palidecen. Como dice Tony Garza, embajador de EU: “El presidente Calderón (es) el mandatario más dispuesto a colaborar con Washington, mucho más que todos los anteriores”.


Kikka Roja

jueves, 8 de mayo de 2008

John Saxe-Fernández: Reforma energética, Pentágono y BM

http://jsaxef.blogspot.com
Reforma energética, Pentágono y BM

El Pentágono y el Banco Mundial (BM) cierran filas con el gobierno de Calderón. Apoyan lo que en realidad es “su” recetario energético y de seguridad para México. Lo consideran un endoso necesario ante el fortalecimiento y ensanche de la resistencia pacífica y de una acción en defensa del petróleo, que desborda a la cúpula del Partido Revolucionario Institucional.

En lo que sólo puede calificarse como un auto elogio –dado el papel del Banco Mundial en el diseño de la “reforma estructural energética”– Pamela Cox, vicepresidenta del organismo para Latinoamérica, expresó que “la aprobación de la reforma energética dará más estabilidad a la economía mexicana, garantizará su crecimiento sostenido y fortalecerá las finanzas públicas…”. Agregó: hoy se construyen, “a través de las reformas estructurales, los aceleradores de la actividad productiva, con lo que… el país garantizará ingresos constantes y ahorros estables” (El Economista, 21-IV-08, p.1).

Estremece que Salinas y Zedillo usaran esos mismos términos sobre las reformas estructurales del BM que siguen arrasando a erario, agro y nación. El espaldarazo militar se dio con la visita del secretario de Defensa de Estados Unidos, por segunda vez en la historia, para “afinar detalles” de la Iniciativa Mérida, promotora, junto a esquemas militares y policiales en curso, de la “integración profunda” alentada por la ASPAN. Como la participación de las empresas, el BM y el aparato de seguridad estadunidense en el proceso que lleva a la “reforma” para abrir Petróleos Mexicanos a la inversión privada –nacional y extranjera– es intensa y de larga data, cabe una breve reflexión histórica.

Luego de la primera Guerra Mundial México fue, después de Estados Unidos, el segundo productor mundial de crudo. Desde entonces Washington rechazó con soberbia imperialista lo formulado en la nueva Constitución de 1917 sobre el derecho original de la nación sobre sus recursos naturales –incluido expresamente el petróleo–. Esa impugnación se hizo por medio de la noción de minimun duty (deber mínimo), “…que toda nación debe tener en relación con el trato a empresas extranjeras”, y que incluye “el derecho del gobierno extranjero de proteger” a sus nacionales de “actos como la confiscación de los derechos de propiedad”.

Al amparo de esta amenaza de intervención armada, junto con maniobras de la legislación protectora de los monopolios internacionales –bien reseñadas por Horacio Labastida (“Política petrolera”, RMCPS, año XXXVI, número 141, 1990)–, Standard Oil, Mexican Sinclair Petroleum y Royal Dutch Shell siguieron explotando “las vetas de mayor riqueza hasta 1938”, cuando Cárdenas aprovecha la cambiante correlación de fuerzas nacionales y mundiales y recupera el petróleo para la nación. En ese lapso esas firmas asolaron las áreas petroleras y se enriquecieron sin límite y sin beneficio alguno para el país: “se trata de una dilatada historia de amenazas, intervenciones diplomáticas y argucias de todas clases” (ídem, p. 136).

La presión de Estados Unidos siguió. Después de 1945 el Banco Mundial abogó a favor de permitir contratos de riesgo para la exploración y desarrollo petrolero. Miguel Alemán se doblegó. En los años 60, cuando desde el Wall Street Journal la cúpula petrolera advertía que los éxitos del programa de exploración y perforación de Pemex, dirigida entonces por Jesús Reyes Heroles –padre– eran un “gran peligro” por el ejemplo que sentaban ante el Tercer Mundo, el Banco Mundial y su asesor, Walter Levy, atacaban a Pemex con argumentos rebatidos por aquel director, pero que están en la base de los Country Strategy Papers del BM, usados en los años recientes para fomentar la privatización de facto de Pemex, y que son el fundamento conceptual y operativo de la reforma “calderonista”.

Por ello el despliegue diplo-militar del secretario de Defensa de Bush-Cheney & Company y las loas de Cox: “aplaudo la determinación que han tenido para reformar, porque han asumido la responsabilidad política para garantizar un sistema productivo moderno”. Son auto elogios espurios.


Kikka Roja

Buscar este blog

Gracias por tu Visita ¡

Nuevo

TAMALES UGALDEÑOS DEL TATA JORGE ARVIZU

Para los que pidieron el archivo del 2007, los tamales oaxaqueños ugaldeños grabado por Jorge Arvizu El Tata. Buen Provecho ARDAN PRIANISTAS...

Todos los Archivos

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...