- - . KIKKA: Vallenato para la memoria
BUSCA, BUSCADOR

Buscar este blog

lunes, 18 de mayo de 2009

Vallenato para la memoria

TOLVANERA
Vallenato para la memoria
Roberto Zamarripa
18 May. 09

Murió el jueves pasado Rafael Escalona, padre del vallenato colombiano. Figura señera de la cultura latina, Escalona hizo de los personajes anónimos hombres encumbrados y colocó las historias simples, animadas con el acordeón, la guacharaca y la caja colombiana, como himnos de la vida.

En La custodia de Badillo, uno de sus célebres vallenatos, que refiere al robo de ese objeto religioso, canta: "Se la llevaron, ya se perdió / Lo que pasa es que la tiene un ratero honrado / lo que ocurre es que un honrado se la robó... parece que el inspector / como que tuvo miedo / tuvo miedo en este caso / para proceder / porque todavía no han dicho quién es el ratero / aunque todo mundo sabe quiénes pueden ser".

¡Ay, hombre!, cantarían en México si el vallenato fuera sobre nuestro agobio del pasado, ahora que parece preferible mirar atrás para eludir el presente que angustia.

El pasado fue el desastre nunca arreglado. Como en La custodia de Badillo los rateros fueron honrados, los inspectores tuvieron miedo para proceder y todo mundo, en la extendida certeza de lo incierto, sabe quién o quiénes pueden ser.

Miguel de la Madrid (Colima, 1934) abrió la boca por última vez para firmar un epitafio: de los arrepentidos es el reino de los fraudes. La suya ha sido una aparición lamentable, triste, congruente con el legado gris de su gobierno, con la podredumbre de su política, del 6 de julio que no se olvida, los fraudes patrióticos en Chihuahua y Sonora, pasando por la muerte de Buendía hasta la sigilosa salvación de uno de sus hijos en el caso de narcolavado del Banco Anáhuac.

Qué bueno que se abra el debate y se enriquezcan las páginas de la historia. Pero habrá que verlas como líneas de continuidad antes que ciclos rotos. No son anécdotas sino orígenes, explicaciones impedidas, acusaciones que infestan.

De presidentes pasmados con las crisis (temblor del 85) a las criticadas sobreactuaciones en la pandemia, de las cíclicas desconfianzas en las elecciones a las recurrentes descalificaciones de los adversarios, del narco como actor permanente, más allá de la sombra, de la DIPD a la Judicial Federal o la AFI, tantas corporaciones policiacas que sucumben ante la depredación del narco, desde De la Madrid hasta Calderón.

La fascinación por el pasado que no se retira es directamente proporcional al pasmo y temor por el presente que angustia. Ya pasó lo peor, ahora nos asegura Carstens como si los pronósticos del clima fueran benignos.

No hay reflexión de futuro de cómo construir un modelo distinto de crecimiento que rompa con el molde heredado del pasado y ataje las fallas que nos empequeñecen ante el mundo. Un laboratorio de más, un dinero mejor puesto en la ciencia, una modernización de los sistemas de comunicación de las epidemias entre los estados (todavía se levantan los reportes a mano), hubiera marcado la diferencia del país que supuestamente éramos pero que nunca fuimos. Era mucho menor esa inversión que lo que ahora perdemos en turismo, en empleos, en deterioro de imagen y diplomacia hecha trizas.

Por eso el pasado crece como vigor del presente y ninguno de los actores políticos pone alternativas de futuro sobre la mesa. Modelos de crecimiento con democracia, libre pensamiento -no censurar ni a YouTube-, competencia real en medios electrónicos, sin chapucerías; un modelo orientado a la innovación, al desarrollo educativo, a la libertad de los maestros y la creatividad de los alumnos, con pesos para la ciencia y la educación, y contrapesos a la corrupción y al corporativismo.

Del pasado y del presente son la alianza presidencial con Elba en detrimento de la educación y la libertad sindical, los rescates de sociedades financieras (antes bancos ahora sofoles y sofomes) sin apoyo a deudores, la censura y el castigo, el duopolio de medios electrónicos, el narcopoder, la corrupción y la impunidad.

Abrir el pasado no para resignarse ante el tullido presente sino para construir un futuro diferente. Así sí. O seguiremos cantando un lamento como Escalona, en El Mejoral, otro de sus vallenatos: "¡Hombre! Yo hice un bien / pero me fue muy mal / ¡Hombre! Yo hice un mal pero me fue peor / y ahora no hago bien, ni mal / pa' ver si me va mejor".


Correo electrónico: tolvanera06@yahoo.com.mx
kikka-roja.blogspot.com/

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Comentarios. HOLA! deja tu mensaje ...

Buscar este blog

Gracias por tu Visita ¡

Nuevo

TAMALES UGALDEÑOS DEL TATA JORGE ARVIZU

Para los que pidieron el archivo del 2007, los tamales oaxaqueños ugaldeños grabado por Jorge Arvizu El Tata. Buen Provecho ARDAN PRIANISTAS...

Todos los Archivos

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...