Por Alvaro Cepeda Neri
Conjeturas
En el hundimiento político del desgobernador Robinson-Bours, de su familia (encabezada por su hermano Ricardo) de sus cómplices empresariales (con Ricardo Mazón al frente) y sus empleados en la administración pública, salen a flote las redes de corrupción de todo ese engranaje que han hecho de Sonora un botín durante los casi seis años de abuso del poder que impuso Bours y que busca prolongar a través de que su heredero sea Elías Serrano, con todo y que al cuarto para las doce de las elecciones parece imposible. La guardería ABC, con su incendio, hundió a los Bours, todos metidos en los fideicomisos de los supuestos planes de desarrollo económico, en los contratos del IMSS para el manejo de guarderías por toda la entidad y la compra bestial de inmuebles para beneficiarse más con el corredor turístico de Guaymas a Puerto Peñasco, con remate en Nogales, donde Bours compró, a su nombre, mil hectáreas.
En el libro documental: El expediente Bours: la corrupción de la transparencia, la transparencia de la corrupción, mostré cómo los familiares del desgobernador, incluido éste, socios empresariales y funcionarios, están metidos en los negocios, monopolizando las fuentes de riqueza estatal; manipulando las inversiones federales y las del gobierno de Bours quien endeudó a Sonora con más de 20 mil millones de pesos. Jinetea las partidas federales para los municipios (72), no entrega las que corresponden al PAN (17) y desvía recursos de “Sonora Proyecta”, por lo que tiene más de cuatro controversias en la Suprema Corte que no se resuelven porque los gestores de Bours son muy corruptamente eficaces.
Nada más en el negocio de las guarderías (publicado por El Universal: 15/VI/09), aparece su hermano Ricardo, uno de los principales beneficiados de todas las inversiones en Sonora. Y de ahí pa’l real: sobrinas, primos, amigos, todos cobijados por el tráfico de influencias. Por más que varios periodistas insistíamos en poner a la luz del día la corrupción de los Bours, nada se podía hacer hasta que se conjuntaron dos actos.
La presentación del libro con el que se debe enjuiciar electoral, política y penalmente a Bours, por la mañana de ese viernes. Y, después, el incendio que ha provocado 46 homicidios intencionales, y 26 hospitalizados al borde de la muerte, por negligencias y complicidades de los Bours.
Si en este país no existiera la impunidad por la vía del encubrimiento, el botín económico de los Bours en Sonora, a partir de las guarderías y el incendio de una de ellas, sería más que suficiente para, en principio, deslindar responsabilidades a los Robinson-Bours, los Hoeffer, Scheleske, Velasco Ramos, Robinson, Téllez Nieves, Escalante, Félix Bours, etc.
Si en otras entidades los Ulises Ruiz, Mario Marín, Herrera Beltrán, Peña Nieto, Granier... han cometido actos de corrupción y nepotismo para enriquecerse y atropellar derechos humanos abusando del poder, en Sonora el desgobernador Robinson-Bours los supera en todo. Ha sido un troglodita que monopoliza, como botín, a la entidad.
En el libro documental: El expediente Bours: la corrupción de la transparencia, la transparencia de la corrupción, mostré cómo los familiares del desgobernador, incluido éste, socios empresariales y funcionarios, están metidos en los negocios, monopolizando las fuentes de riqueza estatal; manipulando las inversiones federales y las del gobierno de Bours quien endeudó a Sonora con más de 20 mil millones de pesos. Jinetea las partidas federales para los municipios (72), no entrega las que corresponden al PAN (17) y desvía recursos de “Sonora Proyecta”, por lo que tiene más de cuatro controversias en la Suprema Corte que no se resuelven porque los gestores de Bours son muy corruptamente eficaces.
Nada más en el negocio de las guarderías (publicado por El Universal: 15/VI/09), aparece su hermano Ricardo, uno de los principales beneficiados de todas las inversiones en Sonora. Y de ahí pa’l real: sobrinas, primos, amigos, todos cobijados por el tráfico de influencias. Por más que varios periodistas insistíamos en poner a la luz del día la corrupción de los Bours, nada se podía hacer hasta que se conjuntaron dos actos.
La presentación del libro con el que se debe enjuiciar electoral, política y penalmente a Bours, por la mañana de ese viernes. Y, después, el incendio que ha provocado 46 homicidios intencionales, y 26 hospitalizados al borde de la muerte, por negligencias y complicidades de los Bours.
Si en este país no existiera la impunidad por la vía del encubrimiento, el botín económico de los Bours en Sonora, a partir de las guarderías y el incendio de una de ellas, sería más que suficiente para, en principio, deslindar responsabilidades a los Robinson-Bours, los Hoeffer, Scheleske, Velasco Ramos, Robinson, Téllez Nieves, Escalante, Félix Bours, etc.
Si en otras entidades los Ulises Ruiz, Mario Marín, Herrera Beltrán, Peña Nieto, Granier... han cometido actos de corrupción y nepotismo para enriquecerse y atropellar derechos humanos abusando del poder, en Sonora el desgobernador Robinson-Bours los supera en todo. Ha sido un troglodita que monopoliza, como botín, a la entidad.
cepedaneri@prodigy.net.mx
kikka-roja.blogspot.com/
Entradas
Increible pero cierto. Todo esto sucede en Sonora.
ResponderBorrarEsperemos no gane su candidato Elias Serrano, para que estas cosas no sigan sucediendo.
Es descarado el metodo que han seguido estos 5 anios, a la vista de todos los sonorenses.