El escritor señala en su blog, El cuaderno de Saramago, que se lea un poema del uruguayo y crear así "una cadena de poesía" por Mario Benedetti.
Notimex Publicado: 05/05/2009 14:55
Madrid. Los admiradores del escritor uruguayo Mario Benedetti deben leer sus poemas para mandarle un mensaje de cariño y que se recupere en su natal Montevideo, en uno de cuyos hospitales se encuentra internado desde el 24 del mes pasado, señaló en su blog el portugués José Saramago, Nobel de literatura.
En el blog de la Fundación del escritor lusitano, El cuaderno de Saramago, dice: "El susto fue terrible" para comentar cómo se sintió al enterarse de la gravedad de Benedetti.
"Ángel González (poeta, catedrático y ensayista español, 1922-2008) se nos fue sin aviso en una fría madrugada de enero. Que ahora Benedetti estuviera en peligro allá en su distante Montevideo" era algo que el autor no se resignaba a aceptar; "mucho más cuando no sabía qué hacer desde aquí", agrega.
Su esposa, Pilar del Río, propuso que, en virtud de que se trata de un gran poeta, "nada mejor que arranquemos sus poemas de la inmovilidad de la página y hagamos con ellos una nube de palabras, de sonidos, de música, que atraviesen el Atlántico (las palabras, los sonidos, la música de Benedetti)".
"Y se detenga como una orquesta protectora -aduce-, delante de la ventana que está prohibido abrir, acunándole el sueño y haciéndolo sonreír al despertar".
Saramago quiere que los ciudadanos del mundo hagan su contribución personal "juntando poemas de Benedetti a los poemas de Benedetti" para así, aunque "a los médicos algo se les debe", los ciudadanos "también hemos tenido parte en el trabajo. Benedetti está mejor. Leamos entonces un poema suyo", finaliza el Nobel, quien ha creado así en su blog "una cadena de poesía por Benedetti".
Noticias procedentes de Montevideo, Uruguay, indican que la salud de Benedetti está evolucionando favorablemente, pero aún no existen condiciones para que se le permita salir del hospital.
En el parte médico oficial distribuido, los doctores de Benedetti explicaron que su paciente se encuentra en mejores condiciones de las que presentó el pasado 24 de abril, cuando fue ingresado con una patología digestiva crónica.
Agregaron que el autor de La tregua se encuentra lúcido y estable y ya no requiere de asistencia para alimentarse, como ocurrió en los primeros días de ser internado.
También reiteraron que gracias a la evolución positiva que registró el escritor, se le pudo transferir de la Unidad de Cuidados Críticos a una sala común, además de que ya puede levantarse ocasionalmente de la cama.
El estado de salud de Benedetti, de 88 años, causa preocupación a nivel mundial porque es uno de los autores latinoamericanos más queridos y admirados, y uno de los pocos que ha podido trascender generaciones.
Nacido el 14 de septiembre de 1920, el escritor comenzó su acercamiento formal a las letras a los 25 años, cuando se sumó al equipo del semanario Marcha, en donde permaneció casi tres décadas y ocupó el cargo de director literario.
En 1946, la publicación del libro de poemas La víspera indeleble marcó el inicio de una carrera prolífica para un escritor latinoamericano que lo mismo se aventuró en cuentos cortos y crónicas, que en novelas, ensayos y obras de teatro.
Benedetti comenzó a ser reconocido en 1956 con la edición de Poemas de oficina, pero alcanzó la consolidación definitiva cuatro años más tarde con La tregua, la historia de amor de Martín Santomé y Laura Avellaneda, que cautivó a Latinoamérica primero, y luego al mundo.
En el blog de la Fundación del escritor lusitano, El cuaderno de Saramago, dice: "El susto fue terrible" para comentar cómo se sintió al enterarse de la gravedad de Benedetti.
"Ángel González (poeta, catedrático y ensayista español, 1922-2008) se nos fue sin aviso en una fría madrugada de enero. Que ahora Benedetti estuviera en peligro allá en su distante Montevideo" era algo que el autor no se resignaba a aceptar; "mucho más cuando no sabía qué hacer desde aquí", agrega.
Su esposa, Pilar del Río, propuso que, en virtud de que se trata de un gran poeta, "nada mejor que arranquemos sus poemas de la inmovilidad de la página y hagamos con ellos una nube de palabras, de sonidos, de música, que atraviesen el Atlántico (las palabras, los sonidos, la música de Benedetti)".
"Y se detenga como una orquesta protectora -aduce-, delante de la ventana que está prohibido abrir, acunándole el sueño y haciéndolo sonreír al despertar".
Saramago quiere que los ciudadanos del mundo hagan su contribución personal "juntando poemas de Benedetti a los poemas de Benedetti" para así, aunque "a los médicos algo se les debe", los ciudadanos "también hemos tenido parte en el trabajo. Benedetti está mejor. Leamos entonces un poema suyo", finaliza el Nobel, quien ha creado así en su blog "una cadena de poesía por Benedetti".
Noticias procedentes de Montevideo, Uruguay, indican que la salud de Benedetti está evolucionando favorablemente, pero aún no existen condiciones para que se le permita salir del hospital.
En el parte médico oficial distribuido, los doctores de Benedetti explicaron que su paciente se encuentra en mejores condiciones de las que presentó el pasado 24 de abril, cuando fue ingresado con una patología digestiva crónica.
Agregaron que el autor de La tregua se encuentra lúcido y estable y ya no requiere de asistencia para alimentarse, como ocurrió en los primeros días de ser internado.
También reiteraron que gracias a la evolución positiva que registró el escritor, se le pudo transferir de la Unidad de Cuidados Críticos a una sala común, además de que ya puede levantarse ocasionalmente de la cama.
El estado de salud de Benedetti, de 88 años, causa preocupación a nivel mundial porque es uno de los autores latinoamericanos más queridos y admirados, y uno de los pocos que ha podido trascender generaciones.
Nacido el 14 de septiembre de 1920, el escritor comenzó su acercamiento formal a las letras a los 25 años, cuando se sumó al equipo del semanario Marcha, en donde permaneció casi tres décadas y ocupó el cargo de director literario.
En 1946, la publicación del libro de poemas La víspera indeleble marcó el inicio de una carrera prolífica para un escritor latinoamericano que lo mismo se aventuró en cuentos cortos y crónicas, que en novelas, ensayos y obras de teatro.
Benedetti comenzó a ser reconocido en 1956 con la edición de Poemas de oficina, pero alcanzó la consolidación definitiva cuatro años más tarde con La tregua, la historia de amor de Martín Santomé y Laura Avellaneda, que cautivó a Latinoamérica primero, y luego al mundo.
kikka-roja.blogspot.com/