Jaime Avilés
■ Llega la vicepresidenta de España a comprar Pemex
■ Beltrones descansa en Europa
Todo cambió en el escenario político nacional tras la consulta del domingo pasado que, en su primera etapa, recibió un millón 793 mil 876 votos. Esta fue blanco de un intenso ninguneo porque contó con la participación de “sólo 2 por ciento del electorado”. Los medios que la satanizan blandiendo ese dígito en forma de cisne, olvidan que ellos representan los intereses de otro 2 por ciento: el de los dueños de cuentas de ahorros que atesoran 75 por ciento del dinero que hay en los bancos del país.
Además, nuestros propietarios y sus levantacejas desestiman que la consulta fue también un censo, y que éste arrojó la nada despreciable cifra de más de un millón y medio de personas dispuestas a pasar a la siguiente fase del plan de defensa del petróleo, si los gobiernos de Felipe Calderón y José Luis Rodríguez Zapatero, con la complicidad operativa de los sectores derechistas del PAN, el PRI y el PRD, y el aplauso unánime de los medios de México y España, insisten en robarse el patrimonio energético de la nación.
Tras la consulta, Guadalupe Acosta Naranjo, presidente golpista del PRD, afirmó que ya no era necesario esperar a que ésta concluyera en el resto del país. Con un prisa idéntica a la de Georgina Kessel, exhortó a dictaminar las iniciativas de Calderón y Manlio Fabio Beltrones, luego de anunciar que su grupo también formularía un proyecto de reforma (escrito sobre las rodillas para salvar las apariencias). En el mismo tono, Ruth Zavaleta, a coro con Héctor Larios, del PAN, llamó a los perredistas a no volver a tomar las tribunas, “porque las amenazas ya no asustan a nadie”.
Hasta allí, todo confirmaba la vigencia del pacto Zavaleta-Don Beltrone, al que esta columna se refirió el sábado pasado, lo que produjo sendas “precisiones” de René Arce, uno de los líderes de Nueva Izquierda (27/07/08), y Jesús Anaya (30/07/08), director de Enlace con Medios de la Coordinación de Comunicación Social del Senado. En sus cartas, ambos “desmintieron” que se hubiera dado una “reunión en lo oscurito”, como divulgó Desfiladero, entre Arce, Manlio Fabio y la presidenta de la Cámara de Diputados, así como “las especulaciones que de esa supuesta reunión derivan” (Anaya dixit).
El martes 22 de julio, después de la sesión del debate sobre Pemex, Arce y Zavaleta llegaron al Senado juntos y entraron por la puerta principal de Xicoténcatl. Hay múltiples testigos. Faltaba un día para que Beltrones lanzara su iniciativa de reforma. Como no sesionaba la Comisión Permanente, Zavaleta no tenía nada que hacer en la casona. Allí comenzaron los rumores y las suspicacias. ¿Por qué ambas partes desmintieron que se hubieran reunido si tal no constituye delito? ¿Acaso porque no hay fotos ni videos que los muestren juntos, negociando cosas inconfesables? ¿O porque Arce y Zavaleta por un lado y Don Beltrone por el otro tienen motivos para sentirse muy nerviosos?
En cualquier caso, los hechos políticos hablan solos. En los periódicos de ese martes 22 de julio, Nueva Izquierda pidió, para Ruth, el cargo de Javier González Garza, coordinador de los diputados perredistas en San Lázaro. Después, Zavaleta insinuó que la consulta estaba manipulada porque las preguntas inducían las respuestas y urgió a celebrar un periodo extraordinario, para dictaminar ya las propuestas de Calderón y Beltrones.
En el mismo carril, Acosta Naranjo citó a los líderes del PRIAN para acordar los términos del periodo extraordinario y Graco Ramírez declamó su histórico: “¡Yo sí le creo al PRI”. Luego, en su “desmentido” a La Jornada, Arce convocó a votar en la consulta contra la iniciativa de Calderón, pero no contra la de Beltrones. ¿Qué buscaba él personalmente con su apoyo al líder de la bancada priísta? Lo que el Instituto Electoral del Distrito Federal anticipó anoche: el posible registro de un partido local llamado Agrupación Cívica Democrática, que dirige Raymundo Pérez López, un ex líder de vendedores ambulantes de las calles de Argentina y Colombia, que trabajó como jefe de Planeación, Capacitación y Desarrollo de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, bajo la batuta de Víctor Hugo Círigo, otro capo de Nueva Izquierda, y en combinación con el propio Arce. ¿Quién aportó lo necesario para que Agrupación Cívica Democrática obtenga semejante premio? Beltrones.
Este, mientras tanto, no ha dejado de sufrir descalabros. Si la propuesta de Calderón quedó hecha trizas en los debates senatoriales, la suya resultó un fiasco, pues copió textualmente 28 artículos de la iniciativa panista y es tanto o más entreguista y privatizadora que aquella. La reacción de la gente fue instantánea. El blog www.beltrones.org.mx se llenó de insultos, a tal grado que su administrador descolgó de la red la sección de opiniones del público, como podrá corroborarlo quien se comunique con ese portal electrónico. Sin embargo, si alguien quiere conocer los virulentos comentarios que fueron censurados, ingrese a la dirección electrónica www.eloronegro.blogspot.com y podrá leerlos completos, junto con los elogiosos y los francamente lambiscones.
Si hace dos semanas los medios cibernéticos de la derecha jugaban con la idea de que después de diciembre Beltrones podría quedar como presidente sustituto en lugar de Calderón, hoy el prestigio del senador salinista está en bancarrota. Su propuesta petrolera se fue de tal modo a pique, que funcionarios del gobierno español ni siquiera la mencionaron anteayer cuando externaron su simpatía por la de Los Pinos. Don Beltrone, deprimido, en estos momentos descansa en Europa, a bordo de un crucero de lujo y, de acuerdo con las mismas fuentes que filtraron información sobre su pacto con Arce y Zavaleta, regresará a México el próximo 12 de agosto.
Ahora bien, lo que cambió definitivamente el escenario político nacional y dejó en off-side el multicitado pacto PRI-PRD, es el anuncio de que los intelectuales y los científicos de mayor seriedad y reconocimiento de México lanzarán en breve la propuesta que habrán de defender, en el Senado, el Frente Amplio Progresista, y en las calles, el Movimiento Nacional en Defensa del Petróleo y el gobierno legítimo de Andrés Manuel López Obrador, que el pasado martes reunió a un amplio abanico de sabios y luchadores sociales con ese propósito.
Por lo tanto, ahora hay que impulsar la consulta del próximo domingo 10 en los estados del sur y pedirle enorme prudencia a la vicepresidenta española, María Teresa Fernández de la Vega, que llega mañana con casi todo su gabinete y se va a quedar hasta el miércoles, lo que significa mucha gente y mucho tiempo como para venir a cortar el listón inaugural de la reunión mundial de la ONU sobre el sida. Tal vez sea bueno poner letreros delante del hotel donde se hospede que digan: “Doña Mari Tere: Pemex no está en venta. Calderón no tiene facultades para regalárselo. Y Beltrones menos. Pregúntele al pueblo de México”. Y si quiere comunicarse con esta columna, escriba a jamastu@gmail.com.
Además, nuestros propietarios y sus levantacejas desestiman que la consulta fue también un censo, y que éste arrojó la nada despreciable cifra de más de un millón y medio de personas dispuestas a pasar a la siguiente fase del plan de defensa del petróleo, si los gobiernos de Felipe Calderón y José Luis Rodríguez Zapatero, con la complicidad operativa de los sectores derechistas del PAN, el PRI y el PRD, y el aplauso unánime de los medios de México y España, insisten en robarse el patrimonio energético de la nación.
Tras la consulta, Guadalupe Acosta Naranjo, presidente golpista del PRD, afirmó que ya no era necesario esperar a que ésta concluyera en el resto del país. Con un prisa idéntica a la de Georgina Kessel, exhortó a dictaminar las iniciativas de Calderón y Manlio Fabio Beltrones, luego de anunciar que su grupo también formularía un proyecto de reforma (escrito sobre las rodillas para salvar las apariencias). En el mismo tono, Ruth Zavaleta, a coro con Héctor Larios, del PAN, llamó a los perredistas a no volver a tomar las tribunas, “porque las amenazas ya no asustan a nadie”.
Hasta allí, todo confirmaba la vigencia del pacto Zavaleta-Don Beltrone, al que esta columna se refirió el sábado pasado, lo que produjo sendas “precisiones” de René Arce, uno de los líderes de Nueva Izquierda (27/07/08), y Jesús Anaya (30/07/08), director de Enlace con Medios de la Coordinación de Comunicación Social del Senado. En sus cartas, ambos “desmintieron” que se hubiera dado una “reunión en lo oscurito”, como divulgó Desfiladero, entre Arce, Manlio Fabio y la presidenta de la Cámara de Diputados, así como “las especulaciones que de esa supuesta reunión derivan” (Anaya dixit).
El martes 22 de julio, después de la sesión del debate sobre Pemex, Arce y Zavaleta llegaron al Senado juntos y entraron por la puerta principal de Xicoténcatl. Hay múltiples testigos. Faltaba un día para que Beltrones lanzara su iniciativa de reforma. Como no sesionaba la Comisión Permanente, Zavaleta no tenía nada que hacer en la casona. Allí comenzaron los rumores y las suspicacias. ¿Por qué ambas partes desmintieron que se hubieran reunido si tal no constituye delito? ¿Acaso porque no hay fotos ni videos que los muestren juntos, negociando cosas inconfesables? ¿O porque Arce y Zavaleta por un lado y Don Beltrone por el otro tienen motivos para sentirse muy nerviosos?
En cualquier caso, los hechos políticos hablan solos. En los periódicos de ese martes 22 de julio, Nueva Izquierda pidió, para Ruth, el cargo de Javier González Garza, coordinador de los diputados perredistas en San Lázaro. Después, Zavaleta insinuó que la consulta estaba manipulada porque las preguntas inducían las respuestas y urgió a celebrar un periodo extraordinario, para dictaminar ya las propuestas de Calderón y Beltrones.
En el mismo carril, Acosta Naranjo citó a los líderes del PRIAN para acordar los términos del periodo extraordinario y Graco Ramírez declamó su histórico: “¡Yo sí le creo al PRI”. Luego, en su “desmentido” a La Jornada, Arce convocó a votar en la consulta contra la iniciativa de Calderón, pero no contra la de Beltrones. ¿Qué buscaba él personalmente con su apoyo al líder de la bancada priísta? Lo que el Instituto Electoral del Distrito Federal anticipó anoche: el posible registro de un partido local llamado Agrupación Cívica Democrática, que dirige Raymundo Pérez López, un ex líder de vendedores ambulantes de las calles de Argentina y Colombia, que trabajó como jefe de Planeación, Capacitación y Desarrollo de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, bajo la batuta de Víctor Hugo Círigo, otro capo de Nueva Izquierda, y en combinación con el propio Arce. ¿Quién aportó lo necesario para que Agrupación Cívica Democrática obtenga semejante premio? Beltrones.
Este, mientras tanto, no ha dejado de sufrir descalabros. Si la propuesta de Calderón quedó hecha trizas en los debates senatoriales, la suya resultó un fiasco, pues copió textualmente 28 artículos de la iniciativa panista y es tanto o más entreguista y privatizadora que aquella. La reacción de la gente fue instantánea. El blog www.beltrones.org.mx se llenó de insultos, a tal grado que su administrador descolgó de la red la sección de opiniones del público, como podrá corroborarlo quien se comunique con ese portal electrónico. Sin embargo, si alguien quiere conocer los virulentos comentarios que fueron censurados, ingrese a la dirección electrónica www.eloronegro.blogspot.com y podrá leerlos completos, junto con los elogiosos y los francamente lambiscones.
Si hace dos semanas los medios cibernéticos de la derecha jugaban con la idea de que después de diciembre Beltrones podría quedar como presidente sustituto en lugar de Calderón, hoy el prestigio del senador salinista está en bancarrota. Su propuesta petrolera se fue de tal modo a pique, que funcionarios del gobierno español ni siquiera la mencionaron anteayer cuando externaron su simpatía por la de Los Pinos. Don Beltrone, deprimido, en estos momentos descansa en Europa, a bordo de un crucero de lujo y, de acuerdo con las mismas fuentes que filtraron información sobre su pacto con Arce y Zavaleta, regresará a México el próximo 12 de agosto.
Ahora bien, lo que cambió definitivamente el escenario político nacional y dejó en off-side el multicitado pacto PRI-PRD, es el anuncio de que los intelectuales y los científicos de mayor seriedad y reconocimiento de México lanzarán en breve la propuesta que habrán de defender, en el Senado, el Frente Amplio Progresista, y en las calles, el Movimiento Nacional en Defensa del Petróleo y el gobierno legítimo de Andrés Manuel López Obrador, que el pasado martes reunió a un amplio abanico de sabios y luchadores sociales con ese propósito.
Por lo tanto, ahora hay que impulsar la consulta del próximo domingo 10 en los estados del sur y pedirle enorme prudencia a la vicepresidenta española, María Teresa Fernández de la Vega, que llega mañana con casi todo su gabinete y se va a quedar hasta el miércoles, lo que significa mucha gente y mucho tiempo como para venir a cortar el listón inaugural de la reunión mundial de la ONU sobre el sida. Tal vez sea bueno poner letreros delante del hotel donde se hospede que digan: “Doña Mari Tere: Pemex no está en venta. Calderón no tiene facultades para regalárselo. Y Beltrones menos. Pregúntele al pueblo de México”. Y si quiere comunicarse con esta columna, escriba a jamastu@gmail.com.
- Llegará el domingo a México la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega
- “Enorme interés” de España por la apertura de Pemex al capital extranjero
- Una fuente de La Moncloa la califica de “positiva, esperada y deseada”
- “Por cuestiones de agenda”, la funcionaria declina entrevistarse con el jefe de Gobierno del DF, Marcelo Ebrard
Madrid, 31 de julio. La reforma energética propuesta al Congreso por el presidente Felipe Calderón ha recibido elogios y parabienes del círculo más íntimo del gobierno español, que ve “con muy buenos ojos” el contenido de la propuesta para que se abra al capital extranjero un sector “estratégico” que suscita un “enorme interés” en el empresariado ibérico. En la víspera de que la vicepresidenta primera del gobierno, la socialista María Teresa Fernández de la Vega, inicie una gira “al más alto nivel” en nuestro país, una fuente acreditada de La Moncloa explicó que el objetivo de la visita es de carácter político, económico y social. Fernández de la Vega, de 59 años y juez de profesión, es uno de los pilares del presidente José Luis Rodríguez Zapatero, al ser la persona en la que el mandatario confía la tarea de coordinación de los distintos ministerios y las negociaciones más complejas de carácter político.
Esta política experimentada, que está incluso mejor valorada que el propio Rodríguez Zapatero por su capacidad de gestión y comunicación, viajará a México el próximo sábado, con tres objetivos concretos: firmar una serie de acuerdos en materia de seguridad y medio ambiente; “dinamizar y dar continuidad” a las relaciones entre México y España, con especial interés en dos reformas que afectan directamente al gobierno y a los empresarios españoles: la energética y, también muy importante, el proyecto para modificar la ley de inversiones extranjeras, sobre todo en materia de telecomunicaciones; un tercer tema, aunque con menor importancia en su agenda, son las cuestiones relativas a la cooperación y a la ayuda al desarrollo.La fuente del gobierno español explicó que durante la visita Fernández de la Vega se entrevistará con el presidente Felipe Calderón Hinojosa, con quien abordará, una vez más, el tema de la reforma energética. Pues –señaló– “España ve con muy buenos ojos la reforma energética del mandatario mexicano. Y siempre nos gustará ver aprobada una reforma que aumente la capacidad de producción de petróleo de México, pues es un bien escaso. Así que si la reforma emprendida va finalmente adelante, estamos seguros de que las empresas españolas tendrán un gran interés en participar de un sector estratégico como éste”. Al ser interrogado sobre las consecuencias de la consulta ciudadana al proyecto inicial de Calderón, la fuente de La Moncloa –residencia oficial del presidente español– matizó que “desde España siempre respetaremos cualquier decisión que adopte el pueblo mexicano.
Así que ante todo, respeto, pero nos alegraríamos mucho de que México apruebe una reforma que aumente su producción de petróleo”. La visita de la vicepresidenta española también servirá para abordar con el mandatario mexicano otra cuestión vital para los intereses españoles, sobre todo de las grandes multinacionales de la energía, la edición y las automovilísticas: la aprobación de la reforma de la ley de inversión extranjera, con la que el gobierno mexicano pretende liberalizar aún más los sectores de las telecomunicaciones y la industria automotriz, entre otros. “ Al igual que la energética, ésta es una reforma muy positiva, muy esperada y deseada por España”, añadió la fuente.La gira de “alto nivel” del gobierno español también servirá para firmar una serie de acuerdos, entre ellos uno de vital importancia para la administración mexicana, relativo a la capacitación y formación por parte de policías españoles a sus homólogos mexicanos en tareas de vigilancia, lucha contra el crimen organizado, técnicas antiterroristas y métodos vanguardistas de “ciberprotección y cibervigilancia”.
Fernández de la Vega también firmará y pondrá en marcha un acuerdo sobre medio ambiente referido a las labores de saneamiento de la bahía de Acapulco, cuyo “proyecto de viabilidad” será cofinanciado con España.La delegación española llega el domingo y permanecerá en México hasta el próximo miércoles; desarrollará gran parte de su agenda en la capital del país, sin embargo, esta fuente indicó que decidieron “rechazar” la invitación cursada por el Gobierno del Distrito Federal por “cuestiones de agenda”. La vicepresidenta se reunirá con el mandatario mexicano, con empresarios españoles y mexicanos, con el alcalde de Acapulco, Félix Salgado, y con el gobernador de Nuevo León, José Natividad González Parás. La exclusión del gobierno de la ciudad de México, reiteró la fuente, “no es por una cuestión política, le aseguro que es por un problema de agenda”. También, al interrogársele sobre por qué en esta gira de trabajo no se habían interesado más por el México pobre, el que vive en condiciones infrahumanas, sobre todo para acceder a los programas de cooperación que financia España en todo el mundo, la citada fuente explicó: “ La agenda, en esta ocasión, no nos da tiempo para visitar las zonas donde sabemos que la gente lo pasa mal. Pero somos conscientes que uno de los retos de Iberoamérica es eliminar la enorme brecha de desigualdad social. Además de que México, hoy por hoy, no es un país prioritario para España en materia de cooperación, ya que la inversión viene sobre todo de las empresas españolas”.
Fernández de la Vega iniciará su gira oficial el próximo domingo, en el contexto de la apertura de la Conferencia Internacional sobre el Sida. Después de México, la funcionaria española viajará a Haití, República Dominicana y El Salvador.
Esta política experimentada, que está incluso mejor valorada que el propio Rodríguez Zapatero por su capacidad de gestión y comunicación, viajará a México el próximo sábado, con tres objetivos concretos: firmar una serie de acuerdos en materia de seguridad y medio ambiente; “dinamizar y dar continuidad” a las relaciones entre México y España, con especial interés en dos reformas que afectan directamente al gobierno y a los empresarios españoles: la energética y, también muy importante, el proyecto para modificar la ley de inversiones extranjeras, sobre todo en materia de telecomunicaciones; un tercer tema, aunque con menor importancia en su agenda, son las cuestiones relativas a la cooperación y a la ayuda al desarrollo.La fuente del gobierno español explicó que durante la visita Fernández de la Vega se entrevistará con el presidente Felipe Calderón Hinojosa, con quien abordará, una vez más, el tema de la reforma energética. Pues –señaló– “España ve con muy buenos ojos la reforma energética del mandatario mexicano. Y siempre nos gustará ver aprobada una reforma que aumente la capacidad de producción de petróleo de México, pues es un bien escaso. Así que si la reforma emprendida va finalmente adelante, estamos seguros de que las empresas españolas tendrán un gran interés en participar de un sector estratégico como éste”. Al ser interrogado sobre las consecuencias de la consulta ciudadana al proyecto inicial de Calderón, la fuente de La Moncloa –residencia oficial del presidente español– matizó que “desde España siempre respetaremos cualquier decisión que adopte el pueblo mexicano.
Así que ante todo, respeto, pero nos alegraríamos mucho de que México apruebe una reforma que aumente su producción de petróleo”. La visita de la vicepresidenta española también servirá para abordar con el mandatario mexicano otra cuestión vital para los intereses españoles, sobre todo de las grandes multinacionales de la energía, la edición y las automovilísticas: la aprobación de la reforma de la ley de inversión extranjera, con la que el gobierno mexicano pretende liberalizar aún más los sectores de las telecomunicaciones y la industria automotriz, entre otros. “ Al igual que la energética, ésta es una reforma muy positiva, muy esperada y deseada por España”, añadió la fuente.La gira de “alto nivel” del gobierno español también servirá para firmar una serie de acuerdos, entre ellos uno de vital importancia para la administración mexicana, relativo a la capacitación y formación por parte de policías españoles a sus homólogos mexicanos en tareas de vigilancia, lucha contra el crimen organizado, técnicas antiterroristas y métodos vanguardistas de “ciberprotección y cibervigilancia”.
Fernández de la Vega también firmará y pondrá en marcha un acuerdo sobre medio ambiente referido a las labores de saneamiento de la bahía de Acapulco, cuyo “proyecto de viabilidad” será cofinanciado con España.La delegación española llega el domingo y permanecerá en México hasta el próximo miércoles; desarrollará gran parte de su agenda en la capital del país, sin embargo, esta fuente indicó que decidieron “rechazar” la invitación cursada por el Gobierno del Distrito Federal por “cuestiones de agenda”. La vicepresidenta se reunirá con el mandatario mexicano, con empresarios españoles y mexicanos, con el alcalde de Acapulco, Félix Salgado, y con el gobernador de Nuevo León, José Natividad González Parás. La exclusión del gobierno de la ciudad de México, reiteró la fuente, “no es por una cuestión política, le aseguro que es por un problema de agenda”. También, al interrogársele sobre por qué en esta gira de trabajo no se habían interesado más por el México pobre, el que vive en condiciones infrahumanas, sobre todo para acceder a los programas de cooperación que financia España en todo el mundo, la citada fuente explicó: “ La agenda, en esta ocasión, no nos da tiempo para visitar las zonas donde sabemos que la gente lo pasa mal. Pero somos conscientes que uno de los retos de Iberoamérica es eliminar la enorme brecha de desigualdad social. Además de que México, hoy por hoy, no es un país prioritario para España en materia de cooperación, ya que la inversión viene sobre todo de las empresas españolas”.
Fernández de la Vega iniciará su gira oficial el próximo domingo, en el contexto de la apertura de la Conferencia Internacional sobre el Sida. Después de México, la funcionaria española viajará a Haití, República Dominicana y El Salvador.
Kikka Roja