Televisa y MVS: un competidor, un enemigo
JENARO VILLAMIL
10 DE MARZO DE 2012 ·
PROCESO.COM.MX
Emilio Azcárraga, presidente de Televisa.
Foto: Octavio Gómez
Televisa ha presionado a las autoridades de telecomunicaciones para que no refrenden los títulos de concesión a MVS en la banda de 2.5 Ghz, idónea para ofrecer Internet de banda ancha, televisión restringida y telefonía. El problema es que MVS osó desafiar a Sky, la filial de televisión restringida de Televisa, al crear el Grupo Dish. Y quién lo dijera: Televisa reclama ahora que la SCT asuma plenamente sus atribuciones de regulador del uso del espectro radioeléctrico y “reordene” la banda de modo que sólo le sea rentable al duopolio televisivo.
“Emilio se va a molestar”, comentó demudado Felipe Calderón. La referencia al presidente de Grupo Televisa, Emilio Azcárraga Jean, era clara. Calderón se acababa de enterar de que el entonces titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), Luis Téllez, había estampado su firma en un documento para comprometerse a autorizar un modelo de servicio conocido como must carry de manera no condicionada.
JENARO VILLAMIL
10 DE MARZO DE 2012 ·
PROCESO.COM.MX
Emilio Azcárraga, presidente de Televisa.
Foto: Octavio Gómez
Televisa ha presionado a las autoridades de telecomunicaciones para que no refrenden los títulos de concesión a MVS en la banda de 2.5 Ghz, idónea para ofrecer Internet de banda ancha, televisión restringida y telefonía. El problema es que MVS osó desafiar a Sky, la filial de televisión restringida de Televisa, al crear el Grupo Dish. Y quién lo dijera: Televisa reclama ahora que la SCT asuma plenamente sus atribuciones de regulador del uso del espectro radioeléctrico y “reordene” la banda de modo que sólo le sea rentable al duopolio televisivo.
“Emilio se va a molestar”, comentó demudado Felipe Calderón. La referencia al presidente de Grupo Televisa, Emilio Azcárraga Jean, era clara. Calderón se acababa de enterar de que el entonces titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), Luis Téllez, había estampado su firma en un documento para comprometerse a autorizar un modelo de servicio conocido como must carry de manera no condicionada.