POBRE MEXICO TAN LEJOS DEL DIOS DEL PULQUE Y TAN CERCA DE LOS ESTADOS UNIDOS.
Esta semana, Egipto condenó a tres periodistas de Al-Jazeera a severos períodos de encarcelamiento tras un proceso judicial que los observadores calificaron de "absurdo". Peter Greste, Mohamed Fahmy y Baher Mohamed fueron acusados de difundir material informativo falso, y colaborar así con la Hermandad Musulmana, que fue derrocada por un golpe militar el año pasado y posteriormente calificada como organización terrorista. Greste, de origen australiano, y Fahmy, de nacionalidad egipcia y canadiense, fueron sentenciados a siete años de prisión. Baher Mohamed, de nacionalidad egipcia, fue condenado a diez años, aparentemente porque estaba en posesión de un casquillo de bala vacío, artículo que muchos periodistas que cubren conflictos juntan de la calle a modo de evidencia. Los fiscales calificaron ese hecho como “posesión de municiones”. Los duros seis meses de prisión previos al juicio, el absurdo juicio en sí mismo y ahora estas condenas han provocado indignación alrededor del mundo, por lo que crece día a día un movimiento en demanda de indulto y liberación para los tres periodistas. Sin embargo, mientras que las palabras del gobierno de Obama apoyan su libertad, las acciones del gobierno de Estados Unidos, principalmente la promesa de reanudar la asistencia militar a Egipto, trasmiten el mensaje opuesto.