Algunos de los más cercanos colaboradores de Felipe Calderón, miembros destacados del PAN, se cansaron de ser clasemedieros y decidieron aprovechar el sexenio para acrecentar sus patrimonios personales, en particular el inmobiliario. Sigilosamente empezaron a mudarse a casas más amplias, más confortables y con muchos más metros cuadrados de construcción, en zonas habitacionales de lujo de la Ciudad de México, como San Angel Inn, Bosques de las Lomas, Polanco, El Pedregal de San Ángel… Tienen un modelo a seguir: Germán Martínez, exsecretario de Estado, exdiputado, expresidente nacional de su partido y actual litigante de un bufete jurídico, vive en una residencia de más de 700 metros cuyo costo sobrepasa los 16 millones de pesos.
Fabricante de pobres en su sexenio, Felipe Calderón es también productor de nuevos ricos del Partido Acción Nacional (PAN).
La fortuna de los miembros de esta camada es un enigma, negados a la transparencia, pero un rasgo es su prosperidad inmobiliaria: De inquilinos en barrios clasemedieros, se mudaron a zonas de lujo, como Bosques de Las Lomas, Polanco, San Ángel y El Pedregal.
Cambiaron, literalmente, de Código Postal.
El prototipo de estos nuevos ricos al amparo del poder es Germán Martínez Cázares, expresidente del PAN. Al inicio del sexenio no tenía casa propia y ahora vive en una residencia que compró en 16 millones 200 mil pesos, en la mejor zona de San Ángel Inn.
La casita de Martínez Cázares, quien renunció a la presidencia del PAN en 2009 tras la peor derrota electoral en la historia del partido, mide 743 metros cuadrados y se la vendió, en mayo de 2010, Carla María Compeán Woodworth, hija del presidente de la Federación Mexicana de Futbol (FMF), Justino Compeán.
Consejero de la candidata Josefina Vázquez Mota y director de la Escuela de Derecho de la Universidad La Salle, su alma máter, Martínez Cázares litiga a través de un bufete jurídico, con lujosas oficinas en Coyoacán, entre cuyos socios fundadores se encuentra Roberto Gil Zuarth.
Gil Zuarth, coordinador de la campaña de Vázquez Mota, es otro de los prominentes panistas que ascendieron vertiginosamente en el sexenio de Calderón, de quien fue secretario particular. De residir en un modesto departamento en Tlalpan y no poseer ni auto, compró en julio de 2007 una casa en San Ángel Inn por 4 millones de pesos.
Otros subordinados de Calderón –cuya bonanza inmobiliaria y la de su mujer ha documentado Proceso– se han mudado de domicilio a partir de formar parte de la alta burocracia federal y de cargos legislativos por su militancia en el PAN.
Maximiliano Cortázar Lara, amigo de Calderón y de Margarita Zavala desde hace dos décadas, vivió en casa ajena toda su vida en Las Águilas, pero en mayo de 2009 se mudó a una residencia de mil 312 metros cuadrados en Jardines del Pedregal. El costo: 7 millones 430 mil pesos.
El futuro diputado federal es propietario también de la empresa MXC Consultores, dedicada al análisis de medios, redes sociales, campañas políticas, producción y marketing.
La sustituta de Cortázar en la Coordinación de Comunicación Social de la Presidencia de la República, Alejandra Sota Mirafuentes, también ascendió: vivía en un departamento de la Del Valle y, en 2008, compró una mansión de 660 metros cuadrados en Bosques de las Lomas, una de las áreas residenciales más lujosas de la Ciudad de México. El precio: 6 millones 700 mil pesos.
César Nava Vázquez, sustituto de Martínez Cázares en el PAN, es otro integrante del grupo de Calderón que, de no poseer domicilio particular, alterna ahora su residencia entre un departamento de Polanco, que le costó 7 millones 250 mil pesos, y una casa en San Antonio, Texas.
Tras las elecciones de 2006, Nava había comprado una casa en la colonia Florida, contigua a la del priista Manlio Fabio Beltrones. Le costó 6 millones 730 mil pesos, con una hipoteca por 3 millones 100 mil pesos.
Justamente uno de los amigos de Nava desde la Universidad Panamericana, a quien hizo director jurídico del PAN y representante ante el Instituto Federal Electoral (IFE), Guillermo Bustamante Ruisánchez, forma parte de los nuevos ricos.
De vivir en la casa paterna, en Santa María la Ribera, Bustamante adquirió, en febrero de 2007, una casa de 850 metros cuadrados en Bosques de Las Lomas, igual que Alejandra Sota, y a un precio casi idéntico a la de ésta: 6 millones de pesos.
Otros nuevos ricos al amparo del poder panista son Mariana Gómez del Campo, coordinadora de la campaña de Vázquez Mota en el Distrito Federal, y Rogelio Carbajal Tejada, representante del PAN ante el IFE.
Todos estos nuevos ricos, además de panistas y amigos de Calderón, tienen algo en común: al inicio del sexenio hicieron público su patrimonio, pero luego le echaron cerrojo a toda información sobre su fortuna.
Nadie sabe, salvo ellos y la Secretaría de la Función Pública, si su patrimonio se corresponde con los emolumentos que devengan.
Los socios Martínez y Gil Zuarth
Cuando el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) decidió que Calderón había ganado las elecciones, en septiembre de 2006, el equipo de éste comenzó a gozar del presupuesto destinado al equipo de transición: 150 millones de pesos.
Para esa fecha, la condición económica del grupo de Calderón era raquítica, conforme a sus declaraciones patrimoniales, que en poco tiempo dieron un vuelco.
Germán Martínez, que había sido diputado federal los tres años anteriores, declaró no tener casa ni vehículos propios. Era dueño sólo de un óleo con valor de 250 mil pesos, tres plumas y un reloj que costaban en conjunto 3 mil pesos, y menaje de casa que calculaba en 1 millón.
Según su declaración, al 6 de noviembre de 2006 tenía en el banco una inversión por 750 mil pesos, pero debía en tarjetas de crédito mil 500 dólares y 40 mil pesos mexicanos. Nada más.
Casi un mes después, en su declaración inicial como secretario de la Función Pública –el 19 de diciembre–, la fortuna comenzó a estar de su lado: se compró una casa con valor de 2 millones 665 mil pesos con un crédito que obtuvo a dos semanas de tomar posesión del cargo.
Pese al crédito hipotecario, que ascendió a 2 millones 132 mil pesos, Martínez declaró que seguía teniendo 750 mil pesos en el banco y agregó otros 50 mil.
Para cuando concluyó su breve gestión como servidor público para buscar la presidencia del PAN, en octubre de 2007, Martínez ya se había comprado un automóvil Honda del año, tenía cuentas bancarias por 250 mil pesos y contaba con un seguro de retiro de 424 mil pesos.
Martínez presidió el PAN apenas un año y nueve meses, de diciembre de 2007 a agosto de 2009, lapso en el que cobró un sueldo mensual de 128 mil pesos netos, según información oficial.
Pero nueve meses después de dejar el cargo –tras la peor debacle electoral del partido, que contrajo una deuda de más de 300 millones de pesos–, Martínez estrenó casa: la que le compró a Compeán Woodworth en San Ángel Inn, un barrio de alta plusvalía.
Consta en el Registro Público de la Propiedad (RPP) que la operación se realizó el 26 de mayo de 2010. Se trata de una propiedad de 743 metros cuadrados de terreno, sobre el que se edificaron dos plantas y cuenta con sótano y cuarto para el chofer. El costo: 16 millones 200 mil pesos.
A diferencia de otras operaciones de compraventa, el documento no consigna si se realizó mediante un crédito hipotecario o de contado.
Después de su salida del PAN, en medio de acusaciones de inepto pese a disponer de 600 millones de pesos para la operación electoral, Martínez Cázares comenzó a litigar en un despacho llamado FGZ Consultores, ubicado en la calle de Londres 345, en Coyoacán.
Formalmente, Germán Martínez no pertenece a la sociedad denominada Snash, S.C., constituida el 14 de abril de 2009, justo cuando estaba en curso la campaña federal, sino sólo los cuatro socios fundadores: Roberto Gil Zuarth, Miguel Novoa Gómez, Carlos Alberto Lezama Fernández del Campo y Emilio Suárez Licona.
El capital social fue de 4 mil pesos, a razón de mil pesos cada uno, hasta que, el 15 de marzo de 2010, Gil Zuarth hizo “la donación gratuita de la parte social de la que es titular” a los otros tres socios.
Aunque Germán Martínez no aparece en el acta constitutiva de la sociedad, él es el que maneja el despacho y ahí tiene su oficina. Su secretaria se llama Verónica Cortés.
–¿También es ahí Snash, S.C.? –le preguntó el reportero.
–Sí, también.
Los socios de Germán Martínez lo han acompañado en su más reciente trayectoria: Novoa Gómez fue su secretario particular en la SFP y luego en el PAN, mientras que Suárez Licona fue director de Servicios Parlamentarios de la Cámara de Diputados.
El caso de Lezama es peculiar. Apoderado del PAN cuando Martínez lo presidía, en mayo de 2007 se casó con Maricarmen Valls Esponda, hija de Sergio Valls, ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
A la boda, en Cuernavaca, celebrada por el obispo Onésimo Cepeda, asistieron, entre otros, el exmandatario Carlos Salinas de Gortari, el litigante Diego Fernández de Cevallos y el entonces gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto.
Otros invitados a la boda fueron el ministro Mariano Azuela, el abogado Juan Collado, el entonces procurador Eduardo Medina Mora y el dueño de la cadena de “soles”, Mario Vázquez Raña.
La esposa de Lezama es diputada federal del PAN en funciones por ser suplente de Gil Zuarth; y el hermano de ella, Jaime, fue priista y alcalde del PRD, pero actualmente es rector de la Universidad Autónoma de Chiapas.
Otros agraciados
“Muchos panistas se han convertido en gestores de dinero y programas públicos”, escribió Germán Martínez en Reforma, el 11 de julio del año pasado, al hacer un diagnóstico que concluyó que “El PAN está enfermo”, como encabezó su artículo.
Él mismo, sin embargo, es objeto de señalamientos en este sentido al interior del PAN, aunque no ha habido aún acusaciones directas de quien es motejado como “Adela Micha: pide la micha (mitad) por adela (adelantado)”.
En noviembre de 2010, cuando aspiraba a presidir el PAN y fue vencido por Gustavo Madero, Gil Zuarth exaltó su amistad con Martínez y repudió el tráfico de influencias. “Es una actividad irregular”, dijo.
–¿A eso se dedica Martínez?
–Yo sé que Germán Martínez es un abogado que ejerce su actividad. Estoy cierto de que Germán tiene un despacho de abogados y se dedica al ejercicio libre de su profesión.
–¿Está asociado con él?
–No tengo ningún vínculo de negocios con Germán Martínez.
A sus 35 años de edad, Gil Zuarth ha tenido un vertiginoso ascenso político y económico en el sexenio: coordinador de asesores de Germán Martínez en la SFP, abogado general del PAN y representante ante el IFE, diputado federal plurinominal, subsecretario de Gobernación, candidato a presidente de su partido, secretario particular de Calderón y coordinador de la campaña de Josefina Vázquez Mota.
Hace cuatro años, Gil Zuarth no tenía coche, poseía un modesto departamento de 100 metros cuadrados y era deudor de dos tarjetas de crédito, pero poco después de 2006 compró una camioneta Volvo de 650 mil pesos y una casa de 4 millones en el barrio de lujo de San Ángel Inn, aunque ha vivido también en el Club de Golf México y en el Pedregal de San Ángel.
“Yo vivo bien, he tenido un sueldo muy honorable en estos últimos años, con el presidente Calderón, en efecto –dijo Gil al reportero–. ¡No tengo ninguno de los tres pecados capitales de la política: no soy corrupto, no soy tonto y no soy flojo! ¡Le pese a quien le pese! Y precisamente porque son mis fortalezas las voy a hacer públicas y evidentes.”
En la camada de nuevos ricos que representa Gil Zuarth –cuya esposa es Carla Astrid Humphrey Jordán, consejera del Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF)– se inscriben también otros personajes del grupo de Calderón que se han avecindado igualmente en el rumbo de San Ángel.
De hecho, en Reyna, la calle donde vive Germán Martínez, compró una casa en 2008 Rogelio Carbajal Tejada, exsubsecretario de la Función Pública y representante del PAN ante el IFE.
Es una propiedad de 339 metros cuadrados y le costó 3 millones 900 mil pesos, según el notario Manuel Gómez del Campo López, padre de la diputada local y candidata a senadora Mariana Gómez del Campo.
Justamente ésta vive, también, por el rumbo: En Lomas de San Ángel Inn, en la avenida al Desierto de los Leones, la legisladora compró en 2009 un departamento de 143 metros cuadrados. Le costó 2 millones de pesos, además de los 100 mil pesos de un cajón de estacionamiento.
Mariana, coordinadora de la campaña de Vázquez Mota en el Distrito Federal, es hermana de José Manuel Gómez del Campo Gurza, a quien Peña Nieto le regaló una notaría dos días antes de dejar el cargo de gobernador.
Más aún: Mariana y José Manuel son primos de Virginia Gómez del Campo, esposa de Luis Videgaray Caso, coordinador de la campaña presidencial de Peña Nieto…
Amigo íntimo de Mariana, César Nava prefirió vivir en Polanco, luego de que compró un departamento que generó escándalo junto con su nueva esposa, Patricia Sirvent Barton, cuyo nombre en la farándula es Patilú.
Como consta en los documentos del RPP, Fundición Residencial, S.A. de C.V., representado por José Bromberg Alterowicz, les vendió la propiedad a Nava y Sirvent por 7 millones 250 mil pesos en agosto de 2010.
El departamento de 335 metros cuadrados está en la calle Rubén Darío y tiene una vista espectacular al Bosque de Chapultepec. (Con información de Ángel Sánchez.)
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kikka-roja.blogspot.com
Fabricante de pobres en su sexenio, Felipe Calderón es también productor de nuevos ricos del Partido Acción Nacional (PAN).
La fortuna de los miembros de esta camada es un enigma, negados a la transparencia, pero un rasgo es su prosperidad inmobiliaria: De inquilinos en barrios clasemedieros, se mudaron a zonas de lujo, como Bosques de Las Lomas, Polanco, San Ángel y El Pedregal.
Cambiaron, literalmente, de Código Postal.
El prototipo de estos nuevos ricos al amparo del poder es Germán Martínez Cázares, expresidente del PAN. Al inicio del sexenio no tenía casa propia y ahora vive en una residencia que compró en 16 millones 200 mil pesos, en la mejor zona de San Ángel Inn.
La casita de Martínez Cázares, quien renunció a la presidencia del PAN en 2009 tras la peor derrota electoral en la historia del partido, mide 743 metros cuadrados y se la vendió, en mayo de 2010, Carla María Compeán Woodworth, hija del presidente de la Federación Mexicana de Futbol (FMF), Justino Compeán.
Consejero de la candidata Josefina Vázquez Mota y director de la Escuela de Derecho de la Universidad La Salle, su alma máter, Martínez Cázares litiga a través de un bufete jurídico, con lujosas oficinas en Coyoacán, entre cuyos socios fundadores se encuentra Roberto Gil Zuarth.
Gil Zuarth, coordinador de la campaña de Vázquez Mota, es otro de los prominentes panistas que ascendieron vertiginosamente en el sexenio de Calderón, de quien fue secretario particular. De residir en un modesto departamento en Tlalpan y no poseer ni auto, compró en julio de 2007 una casa en San Ángel Inn por 4 millones de pesos.
Otros subordinados de Calderón –cuya bonanza inmobiliaria y la de su mujer ha documentado Proceso– se han mudado de domicilio a partir de formar parte de la alta burocracia federal y de cargos legislativos por su militancia en el PAN.
Maximiliano Cortázar Lara, amigo de Calderón y de Margarita Zavala desde hace dos décadas, vivió en casa ajena toda su vida en Las Águilas, pero en mayo de 2009 se mudó a una residencia de mil 312 metros cuadrados en Jardines del Pedregal. El costo: 7 millones 430 mil pesos.
El futuro diputado federal es propietario también de la empresa MXC Consultores, dedicada al análisis de medios, redes sociales, campañas políticas, producción y marketing.
La sustituta de Cortázar en la Coordinación de Comunicación Social de la Presidencia de la República, Alejandra Sota Mirafuentes, también ascendió: vivía en un departamento de la Del Valle y, en 2008, compró una mansión de 660 metros cuadrados en Bosques de las Lomas, una de las áreas residenciales más lujosas de la Ciudad de México. El precio: 6 millones 700 mil pesos.
César Nava Vázquez, sustituto de Martínez Cázares en el PAN, es otro integrante del grupo de Calderón que, de no poseer domicilio particular, alterna ahora su residencia entre un departamento de Polanco, que le costó 7 millones 250 mil pesos, y una casa en San Antonio, Texas.
Tras las elecciones de 2006, Nava había comprado una casa en la colonia Florida, contigua a la del priista Manlio Fabio Beltrones. Le costó 6 millones 730 mil pesos, con una hipoteca por 3 millones 100 mil pesos.
Justamente uno de los amigos de Nava desde la Universidad Panamericana, a quien hizo director jurídico del PAN y representante ante el Instituto Federal Electoral (IFE), Guillermo Bustamante Ruisánchez, forma parte de los nuevos ricos.
De vivir en la casa paterna, en Santa María la Ribera, Bustamante adquirió, en febrero de 2007, una casa de 850 metros cuadrados en Bosques de Las Lomas, igual que Alejandra Sota, y a un precio casi idéntico a la de ésta: 6 millones de pesos.
Otros nuevos ricos al amparo del poder panista son Mariana Gómez del Campo, coordinadora de la campaña de Vázquez Mota en el Distrito Federal, y Rogelio Carbajal Tejada, representante del PAN ante el IFE.
Todos estos nuevos ricos, además de panistas y amigos de Calderón, tienen algo en común: al inicio del sexenio hicieron público su patrimonio, pero luego le echaron cerrojo a toda información sobre su fortuna.
Nadie sabe, salvo ellos y la Secretaría de la Función Pública, si su patrimonio se corresponde con los emolumentos que devengan.
Los socios Martínez y Gil Zuarth
Cuando el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) decidió que Calderón había ganado las elecciones, en septiembre de 2006, el equipo de éste comenzó a gozar del presupuesto destinado al equipo de transición: 150 millones de pesos.
Para esa fecha, la condición económica del grupo de Calderón era raquítica, conforme a sus declaraciones patrimoniales, que en poco tiempo dieron un vuelco.
Germán Martínez, que había sido diputado federal los tres años anteriores, declaró no tener casa ni vehículos propios. Era dueño sólo de un óleo con valor de 250 mil pesos, tres plumas y un reloj que costaban en conjunto 3 mil pesos, y menaje de casa que calculaba en 1 millón.
Según su declaración, al 6 de noviembre de 2006 tenía en el banco una inversión por 750 mil pesos, pero debía en tarjetas de crédito mil 500 dólares y 40 mil pesos mexicanos. Nada más.
Casi un mes después, en su declaración inicial como secretario de la Función Pública –el 19 de diciembre–, la fortuna comenzó a estar de su lado: se compró una casa con valor de 2 millones 665 mil pesos con un crédito que obtuvo a dos semanas de tomar posesión del cargo.
Pese al crédito hipotecario, que ascendió a 2 millones 132 mil pesos, Martínez declaró que seguía teniendo 750 mil pesos en el banco y agregó otros 50 mil.
Para cuando concluyó su breve gestión como servidor público para buscar la presidencia del PAN, en octubre de 2007, Martínez ya se había comprado un automóvil Honda del año, tenía cuentas bancarias por 250 mil pesos y contaba con un seguro de retiro de 424 mil pesos.
Martínez presidió el PAN apenas un año y nueve meses, de diciembre de 2007 a agosto de 2009, lapso en el que cobró un sueldo mensual de 128 mil pesos netos, según información oficial.
Pero nueve meses después de dejar el cargo –tras la peor debacle electoral del partido, que contrajo una deuda de más de 300 millones de pesos–, Martínez estrenó casa: la que le compró a Compeán Woodworth en San Ángel Inn, un barrio de alta plusvalía.
Consta en el Registro Público de la Propiedad (RPP) que la operación se realizó el 26 de mayo de 2010. Se trata de una propiedad de 743 metros cuadrados de terreno, sobre el que se edificaron dos plantas y cuenta con sótano y cuarto para el chofer. El costo: 16 millones 200 mil pesos.
A diferencia de otras operaciones de compraventa, el documento no consigna si se realizó mediante un crédito hipotecario o de contado.
Después de su salida del PAN, en medio de acusaciones de inepto pese a disponer de 600 millones de pesos para la operación electoral, Martínez Cázares comenzó a litigar en un despacho llamado FGZ Consultores, ubicado en la calle de Londres 345, en Coyoacán.
Formalmente, Germán Martínez no pertenece a la sociedad denominada Snash, S.C., constituida el 14 de abril de 2009, justo cuando estaba en curso la campaña federal, sino sólo los cuatro socios fundadores: Roberto Gil Zuarth, Miguel Novoa Gómez, Carlos Alberto Lezama Fernández del Campo y Emilio Suárez Licona.
El capital social fue de 4 mil pesos, a razón de mil pesos cada uno, hasta que, el 15 de marzo de 2010, Gil Zuarth hizo “la donación gratuita de la parte social de la que es titular” a los otros tres socios.
Aunque Germán Martínez no aparece en el acta constitutiva de la sociedad, él es el que maneja el despacho y ahí tiene su oficina. Su secretaria se llama Verónica Cortés.
–¿También es ahí Snash, S.C.? –le preguntó el reportero.
–Sí, también.
Los socios de Germán Martínez lo han acompañado en su más reciente trayectoria: Novoa Gómez fue su secretario particular en la SFP y luego en el PAN, mientras que Suárez Licona fue director de Servicios Parlamentarios de la Cámara de Diputados.
El caso de Lezama es peculiar. Apoderado del PAN cuando Martínez lo presidía, en mayo de 2007 se casó con Maricarmen Valls Esponda, hija de Sergio Valls, ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
A la boda, en Cuernavaca, celebrada por el obispo Onésimo Cepeda, asistieron, entre otros, el exmandatario Carlos Salinas de Gortari, el litigante Diego Fernández de Cevallos y el entonces gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto.
Otros invitados a la boda fueron el ministro Mariano Azuela, el abogado Juan Collado, el entonces procurador Eduardo Medina Mora y el dueño de la cadena de “soles”, Mario Vázquez Raña.
La esposa de Lezama es diputada federal del PAN en funciones por ser suplente de Gil Zuarth; y el hermano de ella, Jaime, fue priista y alcalde del PRD, pero actualmente es rector de la Universidad Autónoma de Chiapas.
Otros agraciados
“Muchos panistas se han convertido en gestores de dinero y programas públicos”, escribió Germán Martínez en Reforma, el 11 de julio del año pasado, al hacer un diagnóstico que concluyó que “El PAN está enfermo”, como encabezó su artículo.
Él mismo, sin embargo, es objeto de señalamientos en este sentido al interior del PAN, aunque no ha habido aún acusaciones directas de quien es motejado como “Adela Micha: pide la micha (mitad) por adela (adelantado)”.
En noviembre de 2010, cuando aspiraba a presidir el PAN y fue vencido por Gustavo Madero, Gil Zuarth exaltó su amistad con Martínez y repudió el tráfico de influencias. “Es una actividad irregular”, dijo.
–¿A eso se dedica Martínez?
–Yo sé que Germán Martínez es un abogado que ejerce su actividad. Estoy cierto de que Germán tiene un despacho de abogados y se dedica al ejercicio libre de su profesión.
–¿Está asociado con él?
–No tengo ningún vínculo de negocios con Germán Martínez.
A sus 35 años de edad, Gil Zuarth ha tenido un vertiginoso ascenso político y económico en el sexenio: coordinador de asesores de Germán Martínez en la SFP, abogado general del PAN y representante ante el IFE, diputado federal plurinominal, subsecretario de Gobernación, candidato a presidente de su partido, secretario particular de Calderón y coordinador de la campaña de Josefina Vázquez Mota.
Hace cuatro años, Gil Zuarth no tenía coche, poseía un modesto departamento de 100 metros cuadrados y era deudor de dos tarjetas de crédito, pero poco después de 2006 compró una camioneta Volvo de 650 mil pesos y una casa de 4 millones en el barrio de lujo de San Ángel Inn, aunque ha vivido también en el Club de Golf México y en el Pedregal de San Ángel.
“Yo vivo bien, he tenido un sueldo muy honorable en estos últimos años, con el presidente Calderón, en efecto –dijo Gil al reportero–. ¡No tengo ninguno de los tres pecados capitales de la política: no soy corrupto, no soy tonto y no soy flojo! ¡Le pese a quien le pese! Y precisamente porque son mis fortalezas las voy a hacer públicas y evidentes.”
En la camada de nuevos ricos que representa Gil Zuarth –cuya esposa es Carla Astrid Humphrey Jordán, consejera del Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF)– se inscriben también otros personajes del grupo de Calderón que se han avecindado igualmente en el rumbo de San Ángel.
De hecho, en Reyna, la calle donde vive Germán Martínez, compró una casa en 2008 Rogelio Carbajal Tejada, exsubsecretario de la Función Pública y representante del PAN ante el IFE.
Es una propiedad de 339 metros cuadrados y le costó 3 millones 900 mil pesos, según el notario Manuel Gómez del Campo López, padre de la diputada local y candidata a senadora Mariana Gómez del Campo.
Justamente ésta vive, también, por el rumbo: En Lomas de San Ángel Inn, en la avenida al Desierto de los Leones, la legisladora compró en 2009 un departamento de 143 metros cuadrados. Le costó 2 millones de pesos, además de los 100 mil pesos de un cajón de estacionamiento.
Mariana, coordinadora de la campaña de Vázquez Mota en el Distrito Federal, es hermana de José Manuel Gómez del Campo Gurza, a quien Peña Nieto le regaló una notaría dos días antes de dejar el cargo de gobernador.
Más aún: Mariana y José Manuel son primos de Virginia Gómez del Campo, esposa de Luis Videgaray Caso, coordinador de la campaña presidencial de Peña Nieto…
Amigo íntimo de Mariana, César Nava prefirió vivir en Polanco, luego de que compró un departamento que generó escándalo junto con su nueva esposa, Patricia Sirvent Barton, cuyo nombre en la farándula es Patilú.
Como consta en los documentos del RPP, Fundición Residencial, S.A. de C.V., representado por José Bromberg Alterowicz, les vendió la propiedad a Nava y Sirvent por 7 millones 250 mil pesos en agosto de 2010.
El departamento de 335 metros cuadrados está en la calle Rubén Darío y tiene una vista espectacular al Bosque de Chapultepec. (Con información de Ángel Sánchez.)
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