A Puerta Cerrada
Marcela Gómez Zalce
2009-10-20•Política
• La luz y el PRIAN
• El IVA y sus arreglones
Cuando escasea el juicio, mi estimado, se glorifica el discurso. Indudable el despliegue de ese singular cinismo político que acompaña al PRI cuando se trata de importantes sucesos que impliquen fijar una postura clara y definida. Pareciera que las lacritas tricolores no entienden que no entienden que la ambigüedad, la simulación y la tibieza jugaron un rol fundamental en las pasadas elecciones en donde la ciudadanía le dio flit al partido en el poder (del no poder) y una buena parte le dio su voto a los priistas, pero no por tener las mejores propuestas, no, no... sino por ser el menos peor. Es decir, la niña menos fea de la escalofriante fiesta llena de soberbios beodos, ecologistas pasados y una runfla amarilla digna de Animal Planet.
La experiencia de su derrota del 2000, porque en la del 2006, haiga sido como haiga sido, my friend, les propinaron un madrazo, no la han comprendido en su totalidad. Eso sin mencionar que antes y durante el pasado proceso del 5 de julio al PRI desde Los Pinos se le orquestó una descarada campaña mediática ligándolo con intereses del narcotráfico, con una descomunal y acreditada corrupción y con el tráfico de influencias, conductas que, of course, el PAN ha enaltecido estos últimos nueve años.
Pero como el PRI, cual dinosaurio, no tiene la piel delgada —al contrario, en menos de 15 días de las elecciones ya estaba sonriendo empinado, perdón, dispuesto a cerrar el capítulo electoral con Felipe & his dumb squad y actuar con esa cacareada responsabilidad incrustada en un discurso de lugares comunes y monumental cinismo— rápidamente envió la señal de que no importaron las descalificaciones y la guerra sucia, y qué tanto es tantito.
Al nabo si como collateral damage quedó la imagen de sus ex presidentes mancillada y ultrajada.
Y fiel a ese estilo que ya los distingue, mi estimado, este PRI y su líder, Beatriz Paredes, hacen gala de ese insolente sello de comprometerse con las causas… de sus intereses. De flotar y/o nadar de muertito en momentos donde, parajodas de la vida… hay que fajarse los pantalones, yes?
Beatriz es ícono de esa ambigüedad. De soltar mucho rollo, enredarse sin gracia en la bandera nacional y danzar con la demagogia evitando salir raspada por su indefinición, cualidad, amable lector, que la vuelve alter ego de Felipe Calderón, con quien se entiende... y bastante bien. La postura del PRI alrededor del aborto en la presidencia de Paredes no sólo es lamentable sino incongruente. La postura del PRI sobre el arbitrario atropello al SME (cuyos miembros juegan irresponsablemente con fuego al andar saboteando la luz en zonas residenciales y comerciales) no ha sido tibia sino imprecisa, indistinta, vaga e imprudente…
La misma que apareció ahora con el sugestivo paquetón fiscal y el divino 2% que terminaron por enterrarlo anunciándolo vía un extraño vocero como Francisco… pero no Rojas sino… Ramírez Acuña. Y como adorable listón el grupo parlamentario tricolor ayer le aventó la bolita de la autoría de incrementar el IVA de 15 a 16% a ¡Carstens y sus muchachos!, con todo y que 24 horas antes, las traviesas lacritas amarillas les levantaban la falda balconenado el arreglón PRI-PAN para terminar de joder al contribuyente cautivo en plena crisis económica y dejar tranquilos a los empresarios para gozar de sus privilegios fiscales.
Fenomenal.
Y así, emocionados y de la mano, esta cautivadora dupla PRI-PAN aprobará hoy más impuestos en medio de la electrizante adversidad. En medio de la debacle económica, su desempleo, del descomunal fracaso de la mal llamada guerra contra el narcotráfico y de cara a las elecciones del 2010... exhibiendo para el respetable y el electorado que les dio la victoria, su sonsonete de la responsabilidad y un violín acompañado de la celebre roqueseñal.
El delicado nudo del tema es que mientras hoy el gymboree (con minúsculas) y su (dividido) PRI aducen compromiso con la patria y millones de mexicanos divirtiéndose tras bambalinas parchando los hoyos (negros) en el barco de gran calado, no sopesan que con la pena, lo aprobado… no será suficiente.
Peor aún, incrementar impuestos y lanzar a 40 mil familias a la jungla del desempleo son medidas, digamos, antipopulares, y la calle no está para más toques eléctricos, sobre todo cuando no sabemos qué sucederá con el apagón.
Pero no se agobie, my friend, a partir de hoy el PRIAN podrá ver la luz al final del túnel…
La experiencia de su derrota del 2000, porque en la del 2006, haiga sido como haiga sido, my friend, les propinaron un madrazo, no la han comprendido en su totalidad. Eso sin mencionar que antes y durante el pasado proceso del 5 de julio al PRI desde Los Pinos se le orquestó una descarada campaña mediática ligándolo con intereses del narcotráfico, con una descomunal y acreditada corrupción y con el tráfico de influencias, conductas que, of course, el PAN ha enaltecido estos últimos nueve años.
Pero como el PRI, cual dinosaurio, no tiene la piel delgada —al contrario, en menos de 15 días de las elecciones ya estaba sonriendo empinado, perdón, dispuesto a cerrar el capítulo electoral con Felipe & his dumb squad y actuar con esa cacareada responsabilidad incrustada en un discurso de lugares comunes y monumental cinismo— rápidamente envió la señal de que no importaron las descalificaciones y la guerra sucia, y qué tanto es tantito.
Al nabo si como collateral damage quedó la imagen de sus ex presidentes mancillada y ultrajada.
Y fiel a ese estilo que ya los distingue, mi estimado, este PRI y su líder, Beatriz Paredes, hacen gala de ese insolente sello de comprometerse con las causas… de sus intereses. De flotar y/o nadar de muertito en momentos donde, parajodas de la vida… hay que fajarse los pantalones, yes?
Beatriz es ícono de esa ambigüedad. De soltar mucho rollo, enredarse sin gracia en la bandera nacional y danzar con la demagogia evitando salir raspada por su indefinición, cualidad, amable lector, que la vuelve alter ego de Felipe Calderón, con quien se entiende... y bastante bien. La postura del PRI alrededor del aborto en la presidencia de Paredes no sólo es lamentable sino incongruente. La postura del PRI sobre el arbitrario atropello al SME (cuyos miembros juegan irresponsablemente con fuego al andar saboteando la luz en zonas residenciales y comerciales) no ha sido tibia sino imprecisa, indistinta, vaga e imprudente…
La misma que apareció ahora con el sugestivo paquetón fiscal y el divino 2% que terminaron por enterrarlo anunciándolo vía un extraño vocero como Francisco… pero no Rojas sino… Ramírez Acuña. Y como adorable listón el grupo parlamentario tricolor ayer le aventó la bolita de la autoría de incrementar el IVA de 15 a 16% a ¡Carstens y sus muchachos!, con todo y que 24 horas antes, las traviesas lacritas amarillas les levantaban la falda balconenado el arreglón PRI-PAN para terminar de joder al contribuyente cautivo en plena crisis económica y dejar tranquilos a los empresarios para gozar de sus privilegios fiscales.
Fenomenal.
Y así, emocionados y de la mano, esta cautivadora dupla PRI-PAN aprobará hoy más impuestos en medio de la electrizante adversidad. En medio de la debacle económica, su desempleo, del descomunal fracaso de la mal llamada guerra contra el narcotráfico y de cara a las elecciones del 2010... exhibiendo para el respetable y el electorado que les dio la victoria, su sonsonete de la responsabilidad y un violín acompañado de la celebre roqueseñal.
El delicado nudo del tema es que mientras hoy el gymboree (con minúsculas) y su (dividido) PRI aducen compromiso con la patria y millones de mexicanos divirtiéndose tras bambalinas parchando los hoyos (negros) en el barco de gran calado, no sopesan que con la pena, lo aprobado… no será suficiente.
Peor aún, incrementar impuestos y lanzar a 40 mil familias a la jungla del desempleo son medidas, digamos, antipopulares, y la calle no está para más toques eléctricos, sobre todo cuando no sabemos qué sucederá con el apagón.
Pero no se agobie, my friend, a partir de hoy el PRIAN podrá ver la luz al final del túnel…
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