La vicepresidencia de facto • Policías en conflicto • Michoacán y lo que falta… La guerra, mi estimado, es un acto de intimidación cuyo objeto es obligar al enemigo a realizar nuestra voluntad. Muy ingeniosa la semana que comienza con tantas perlas (tiradas) en el collar del (des)gobierno de Felipe Calderón. Mientras el régimen de George W. Bush estiró la nerviosa cuerdita para finalmente lograr un divertido acuerdo del rescate financiero de más de 700 mil millones de dólares a escasas semanas de su original proceso de sucesión, el inquilino de Los Pinos escupía palabrería barata en Nueva York sobre su (etílico) mundo creado alrededor del blindaje de nuestra economía, que para los disfuncionales mexicanos no tiene pinta de grave sino tan sólo de síntomas de un pequeño catarrito… que está obligando a las grandes empresas, Cemex por ejemplo, a reestructurar su millonaria deuda y muy posiblemente mandar al nabo a varios miles de empleados. gomezalce@aol.comY con un discurso en sentido opuesto, my friend, el Banco de México continúa advirtiendo que las indicaciones sí son de gravedad (u retards) mientras continúa la imparable escalada de precios que se junta con un agravio en completo descontrol al abarcar todos los sectores oscilando entre el establishment y/o la elite y los más excluidos en la pirámide social, aunque el Gymboree presidencial y su muy extraviado jefecito se empecinen en construir con su grotesca campaña espotera inexplicables contextos. Y como si faltaran explosivos ingredientes en el embriagante calderón sexenal, que se queda sin oxígeno en la frontera de su segundo año —que debería ser la cúspide del éxito, de la fuerza y de la solidez como gobierno–, no tuvo madre la desparpajada noticia de la guerra doméstica entre corporaciones policiacas y sus extraordinarios titulares, que parecen no medir el pánico que desatan entre la ciudadanía que aterrada observa cómo las dos policías más importantes del país se hacen pedazos… ante la clarísima falta del cumplimiento de las leyes y del constante atropello al cacareado Estado de Derecho. Lejos quedaron la gloria, el reconocimiento y el encanto logrado por los mAFIosos que tanto presumió el pasado de Genaro García Luna y su organización MUCD y la no menos polémica PFP, donde la cadena de mando civil militar y el auténtico desmadre creado ex profeso por la ausencia de una cabeza, son sin duda las perlitas de Felipe y su tesorito presidencial de Bucareli, Juan Camilo, a quien algunos empresarios le han espetado su contrariedad ante el peligroso escenario nacional de inseguridad pública. Y muy a tono con el sello de la banda de Los Pinos, amable lector, la entrega, perdón, captura de los tres presuntos terroristas ¿zetas? gracias a las labores de inteligencia… de los cárteles de traviesos –-que son ley en la plaza dieron santo y seña, rechazaron la ocurrente recompensa poniendo atractivas condiciones que, no se me haga bolas, pasan por el (des)gobierno del otro inservible perredista de Leonel Godoy-–, Michoacán aún promete (full steam ahead). Así como el asunto del chisguete energético en el cual no hay música sin la otra banda… la tricolor. Y es aquí, mi estimadísimo, donde la tenebra no podría estar más seductoramente peligrosa para Calderón y su deteriorado Gymboree que retozan emborrachándose en las alturas del poder (del no poder) sin red de protección, así que corra por su drink porque la neta ahí le va. Turns out que las señales de alerta detonaron ya la vicepresidencia en funciones. La que opera y recibe importantes llamadas de un sinfín de poderosos personajes que están hasta la madre de las constantes torpezas, desaciertos y arrogancia de quien entronizaron. Las simpáticas quejas, junto a la cascada de molestia contra Felipe, bailan alrededor de su falta de entendimiento de las razones por las que llegó allí. Y no faltan las listas para, digamos, sugerir maravillosos enroques ante la terquedad presidencial que con su debilidad emocional por ese círculo íntimo ha desencadenado y, peor aún, fomentado, el reverendo desmadre en las áreas más sensibles y estratégicas del mentado barco de gran calado… El epicentro, my friend, es el poderoso legislador que gira trascendentales instrucciones, prepara the FIRE exit arrangement, desarrolla escenarios jurídicos, construye simpáticos puentes políticos y advierte, a tiempo, a cabilderos de firmas internacionales sobre la vulnerabilidad del vertiginoso deterioro de este ya calificado como desgobierno de Felipe Calderón. |
Kikka Roja