Los dirigentes nacionales del PRD, Guadalupe Acosta Naranjo, y del PAN, Germán Martínez Cázares, se reunieron con el propósito de alcanzar un acuerdo que permita sacar adelante una reforma energética de consenso, junto con el PRI. El propio Acosta Naranjo, quien el viernes exhortó a sus pares del PAN y PRI para avanzar en ese sentido, reveló que hace tres semanas se encontró con el presidente de AN. “No hay que tener miedo a lograr acuerdos en beneficio del país. El PRD es una izquierda constructiva, que puede llegar a acuerdos por el bien del país”. Por ello, destacó que en el sol azteca existe disposición al diálogo con otras fuerzas políticas, para buscar acuerdos.
“Si el PAN se niega a dialogar con nosotros en una reunión concertada con el PRI, pues que lo diga. Si ya no quieren platicar, pues ni modo, ya qué hace uno. Disposición del PRD sí hay”. El viernes pasado Acosta planteó públicamente a Martínez Cázares y a la presidenta del PRI, Beatriz Paredes, sentarse y negociar una reforma energética bajo principios nacionalistas y sin la intervención de la iniciativa privada. “Si nosotros aceptamos una reforma que privatice sería un pragmático echado a perder, pero no vamos por cualquier acuerdo. Un acuerdo que sí reforme a Pemex, pero que mantenga la soberanía nacional del petróleo. Beatriz Paredes Rangel, presidenta nacional del PRI, reafirmó su disposición a sentarse a dialogar en torno a la reforma energética, como propuso públicamente el líder del PRD, Guadalupe Acosta Naranjo.
En un comunicado, el PRI señaló que “siempre ha estado dispuesto a dialogar con todas las fuerza políticas y (Paredes) confesó que incluso ha habido acercamientos previos”. La priísta aclaró que el diálogo debe ser “sin condicionantes ni descalificaciones” y que “modernización sin privatización es la tesis” del PRI. Por ello, “la dirigente del PRI manifestó su disposición para analizar propuestas y subrayó que serán los legisladores priístas los que finalmente concreticen acuerdos en torno a temas y asuntos en los que haya coincidencias”.
- “Beltrones entró hasta la cocina del PRD”
Advierte que no será su culpa si fracasan las negociaciones de la reforma energética y se pone a las órdenes del PAN para lograrla. Alerta que el Presidente está dando tantas concesiones que podría entregar la estafeta de 2012
El Universal Manuel Espino advierte que no será su culpa si fracasan las negociaciones en torno a la reforma energética y se pone a las órdenes del PAN, del presidente Felipe Calderón, para negociarla… ataja: “Sería de dar pena que la incapacidad política la justifiquen en el libro de un militante”. A propósito de la publicación de su libro Señal de Alerta, bajo el sello Planeta, cuestiona al Ejecutivo por las concesiones que, afirma, ha dado a Manlio Fabio Beltrones, Elba Esther Gordillo y Carlos Romero Deschamps, en contrasentido, sostiene, a lo que expresaba el michoacano siendo líder nacional del PAN. Advierte que si les da de más les entregará 2012. En entrevista con
EL UNIVERSAL, este norteño de acento campirano y manoteos marcados, niega que esté resentido con Calderón, pero ratifica que fue espiado y que espera que el mandatario no haya estado presente cuando se decidió seguirlo; “sería lamentable”, indica. “Ya esperaba de los calderonistas el trato que me dieron, no fue una sorpresa”, dice sin rubor, incluso sonríe socarrón. Sobre Gordillo asienta: “Si el presidente de la República tiene algún compromiso personal hay que pagarlo”… “creo que se le está pagando de más”. ¿Por qué escribir un libro con contenido político? Es necesario advertir a los mexicanos que están pasando cosas que hacen suponer que nuestra política mexicana pudiera retroceder. Debemos evitar una regresión al autoritarismo… Que gane el PRI con un personaje represor como Manlio Fabio Beltrones, es de temerse. Es un hombre peligroso. Hace la advertencia a unos meses del inicio del proceso electoral de 2009. Manlio ha aprovechado la necesidad de reformas para vender caro su servicio a la República… lo vamos a ver operando para hacerse del control de la Cámara de Diputados, como ya lo tiene, en los últimos tres años del sexenio, poniendo candidatos, no sólo en su partido, si no que le pregunten al PRD cuántas veces se les ha metido por la cocina. El senador Gustavo Madero dijo que su libro no ayuda a la unidad panista y que afecta las relaciones del PAN con otros partidos en el Congreso. Le llamé y él ya ofreció una disculpa… entendió que se equivocó. Y luego dejó entrever, como diciendo que esto dificulta las negociaciones... En la medida en que pasa el tiempo la iniciativa del Presidente se hace chiquita, si se tardan más van a sacar una cosa pequeñísima... Se lo digo a los senadores: si no sacan su trabajo no volteen a ver Señal de Alerta para decir que fue el culpable, si quieren les ayudo a negociar. ¿Es su intención dinamitar la relación del PAN en el Congreso o censurar al Felipe Calderón? Sería una expresión de mucha pobreza política y una gran inmadurez que alguien en mi partido pusiera como pretexto de las malas relaciones que pudiera haber con otros partidos al libro. ¿Es un error del presidente brindar tantas concesiones, cono dice usted, a Beltrones? No es lo mejor porque confunde, recuerdo argumentos del presidente Calderón, siendo presidente del PAN, que en situaciones semejantes su opinión y actitud eran diferentes, lo menos que puedo decir es que no lo comprendo… sólo advierto que si les da de más a la mejor les termina entregando la estafeta de 2012, porque no sólo es Beltrones.
- Con Beltrones en los Pinos volvería el PRI opresor: Espino
Lamentó que el gobierno le conceda la calidad de “gestor poderoso y eficaz”.
Georgina Saldierna Publicado: 13/07/2008 10:47
México, DF. Manuel Espino Barrientos, ex dirigente del PAN, considera que si el Partido Revolucionario Institucional (PRI) regresa a Los Pinos con el senador Manlio Fabio Beltrones –a quien califica de se “un peligro para México”–, volvería al gobierno el priísmo autoritario y represor, luego de cuestionar que la administración federal haya concedido a ese legislador la calidad de “gestor poderoso y eficaz” que beneficia hasta a los que no son de su partido. “A la mejor se hizo porque prometió que resolvería algunas de las iniciativas que interesan al Ejecutivo. Pero conforme transcurre el tiempo la expectativa de sacar la reforma energética va desapareciendo y si sale algo será muy disminuido. Por eso, creo que Beltrones está cobrando por adelantado servicios que no está dando al país”, afirma, y de paso, critica a sus correligionarios: “No es de panistas recurrir a los ‘arreglijos’, al ‘ayúdame y a cambio te doy y te concedo’. ¡Ése no es un método del PAN!, ¡no hay justificación para que se hagan esas cosas!”, exclama.
Actitud autónoma
Por otra parte, advierte que frente al poder público, Acción Nacional debe mantener una actitud de autonomía, pero al mismo tiempo de respaldo al Presidente, con responsabilidad. Eso implica dialogar y discutir con el poder para llegar a acuerdos y no que el partido acuda a Los Pinos para que le dicten la tarea o que a todo le diga que sí al Presidente, sólo porque es emanado del PAN. Alerta sobre el riesgo de que en los gobiernos panistas se institucionalicen prácticas comunes del PRI, como la compra y coacción de votos para colocar a determinadas personas como candidatos o el uso de recursos públicos en beneficio personal o de grupo. Cita, por ejemplo, el caso del ex gobernador de Jalisco, Francisco Ramírez Acuña, quien otorgó un bono adicional a sus funcionarios por atender la tragedia que causó un huracán en Puerto Vallarta, cuando no deberían recibir nada a cambio, pues su trabajo es precisamente atender a la población, puntualiza.
En ocasión de la próxima presentación de su libro, Señal de alerta, Espino habla con La Jornada desde una posición que considera ajena a la política nacional y que califica de “los años sabáticos” que tendrá hasta 2012. Si bien reconoce que no es escritor, sino político, se ve satisfecho con un texto en el que aclara su actuación en el proceso interno para elegir al candidato presidencial en 2006 y da a conocer acciones cometidas por los calderonistas que contradicen las formas panistas desde el gobierno.
–¿Cuál es el objetivo de Señal de alerta?
–El libro pretende ser lo que está implicado en el título, es decir, una señal de alerta a tiempo, para advertir el riesgo de una posible regresión política. Con ello no me refiero a que pudiera regresar el PRI a Los Pinos, sino a que regrese con alguien como Manlio Fabio Beltrones, porque representa el PRI autoritario, represor, que no respeta la libertad de expresión, atenta contra los derechos humanos y controla las instituciones que no están bajo la autoridad del Ejecutivo, como el Congreso y el Poder Judicial. Yo comparto la tesis de que Beltrones es un hombre políticamente peligroso, no sólo por lo que me han dicho de él, sino por lo que yo mismo sé y he padecido.
–¿Como qué?
–Por ejemplo, las prácticas de espionaje de las que ahora se queja. Él es maestro. Tiene doctorado honoris causa en el arte de espiar. Creo que Manlio está jugando con ese tema.
–Esto del espionaje ¿no es un pretexto para que el senador deje de cumplir algo que pudiera haber prometido respecto de la reforma energética?
–Si Beltrones se comprometió a algo, que el gobierno se lo exija. Yo lo que le exijo es que sea un senador honesto, que no cobre favores a cambio de hacerse poderoso. Si hubo acuerdos o no, es asunto de ellos. Pero si los hubo se le han pagado muy alto.
–¿Cuáles son los privilegios que le ha dado el gobierno?
–Le han concedido el privilegio de ser un gestor eficaz, poderoso. Bueno, hay alcaldes y hasta gobernadores que para lograr el apoyo del gobierno federal a alguno de sus proyectos han tenido que tocar las puertas de Beltrones Rivera.
Espino Barrientos critica también que a otros personajes no gratos en la política y en el PAN se les concedan subsecretarías y dependencias importantes. Es el caso de la presidenta vitalicia del sindicato magisterial, Elba Esther Gordillo, y el dirigente de los petroleros, Carlos Romero Deschamps. Sobre la primera refiere que ningún acuerdo justifica que casi tenga el control de la Secretaría de Educación Pública, y por lo que hace al segundo, asienta que, si algo se le debe, tampoco justifica que se le dé tratamiento de aliado.
Representante de la derecha más conservadora, cuida cada una de sus respuestas; evade los temas comprometedores y de plano afirma que no va a hablar de determinados puntos. Eso sí, justifica acciones que tomó siendo presidente del blanquiazul, como el cabildeo con gobernadores del PRI para que promovieran el voto por Felipe Calderón en 2006. Asegura que no cometió ningún ilícito en ello. “No es delito pedirle a un priísta que vote por un panista, además yo fui a dialogar y convencer, no fui a chantajear, presionar o a ofrecer nada a cambio. No fui a hacer una negociación o un pacto”, destaca.
Se niega a dar a conocer los nombres de los gobernadores que apoyaron su iniciativa, con el argumento de que su objetivo “no era hacerlos famosos, sino que facilitaran el voto útil”, y considera que su partido nada debe al PRI, porque no dialogó con el partido, sino con personas en lo individual a las que manifiesta su agradecimiento.