México prepara ya su estrategia de recuperación
En medio de la crisis sanitaria, que produjo a su vez una seria crisis económica en todo el país, principalmente en la industria turística, los responsables del sector trabajan en diseñar la estrategia para recuperar la confianza de los viajeros, tanto nacionales como extranjeros, una vez que la contingencia sea superada.
2009-05-10•TornavueltaHotel Crowne Plaza Acapulco. En los hoteles también todos los empleados recibieron la orden de usar protección
Foto: Gustavo Armenta
El lunes 27 de abril, en pleno Tianguis Turístico, el secretario de Turismo, Rodolfo Elizondo, se apareció unos minutos para pronunciar un discurso en la abarrotada comida que ofrecía la Secretaría de Turismo del Distrito Federal. Eran los primeros días de la crisis sanitaria por la todavía Influenza Porcina y, aunque el ambiente en el mundo de la industria turística ya era de incertidumbre y temor, el funcionario no se anduvo con rodeos: “Sé que vienen momentos difíciles, muy difíciles tal vez, pero estaremos de la mano con Alejandro para sacar adelante al Distrito Federal”, prometió.
Elizondo se refería a Alejandro Rojas Díaz Durán, secretario de Turismo del DF, quien, al tomar la palabra, señaló que la Ciudad de México siempre ha pasado por problemas y crisis, y siempre ha salido adelante. “Ha tenido inundaciones, terremotos y siempre se ha levantado de sus cenizas o de sus escombros”, dijo.
Y, en respuesta a la oferta de Elizondo, respondió que una vez más saldremos de esta crisis que golpea duramente a la industria turística. “Y lo haremos juntos, con inteligencia, paciencia y estrategia”.
Por tanto, aprovechó la presencia de Elizondo para, a través de él, solicitarle al presidente Felipe Calderón ayuda económica emergente para realizar una campaña promocional.
“Hoy todos los medios y el mundo tienen los ojos puestos en México; debe haber dinero adicional del gobierno federal para decirle al mundo que estamos de pie, desde el primer día que hayamos superado esta crisis”, señaló Rojas.
Por lo tanto, le propuso a Elizondo comenzar a trabajar desde ese momento en desarrollar una estrategia de recuperación de imagen, que esté lista para echarla a andar, insistió, desde el primer día.
Elizondo se fue y la comida siguió. Al final, Rojas volvió a tomar la palabra y dimensionó aún más la importancia de prestar ayuda a la capital del país: “No nos equivoquemos, lo que le afecta a la Ciudad de México, le pasa a todo el país”, sostuvo.
Y regresó a su idea principal: The day after. “Pensemos en el primer día después. Hagamos, pues, la campaña “Un día después”; hay que armar desde ahora los paquetes que ofreceremos y formar un comité con el Consejo de Promoción Turística de México”, explicó ante la presencia de directivos de la iniciativa privada como Rafael García, presidente de la Asociación de Hoteles del DF; Roberto Zapata, vicepresidente de la Cámara Nacional de Comercio; Miguel Torruco Marqués, presidente de la Confederación Nacional Turística; y el presidente del Consejo Nacional Empresarial Turístico del DF.
PRIMER REPORTE DE DAÑOS
En los siguientes días estalló la crisis sanitaria por lo que finalmente se identificó como un virus de Influenza Humana. El país comenzó a vaciarse de turistas extranjeros, las cancelaciones se vinieron en cascada y a la emergencia de salud pública se concatenó la crisis económica, principalmente en la industria turística.
Cuatro días después, el 1 de mayo, el Comité de Evaluación y Monitoreo de los principales destinos turísticos del país, conformado por la Secretaría de Turismo del Gobierno Federal, el Consejo de Promoción Turística de México y el Fondo Nacional de Fomento al Turismo, dieron a conocer un reporte preliminar de afectación a la industria turística.
Rodolfo Elizondo explicó que están trabajando estrechamente con los estados de la república a fin de estar en posibilidad de obtener un diagnóstico preciso, para que, llegado el momento, se le haga frente a la situación y se establezca un plan de acción en favor del sector.
Con la escasa información disponible hasta ese momento, el reporte de daños informaba que en destinos como Cancún, las cancelaciones de reservaciones hoteleras se estimaban en 70%, por lo que el nivel de ocupación para la semana del 1 al 10 de mayo sería de 44.8%. Asimismo, en este destino del Caribe, el Congreso Mundial de Pediatría, que contempla la asistencia de cuatro mil personas, se posponía para noviembre.
Por su parte, la Riviera Maya registró una ocupación de 77.8% del 24 al 29 de abril, pero se habían registrado cancelaciones, principalmente de grupos de bodas. En Huatulco se registraba una pérdida en ocupación del 46%, lo que significaba la disminución de 5,402 turistas y pérdidas por 34.5 millones de pesos.
El Distrito Federal presentó una ocupación por debajo de su promedio, que es de 55%, y al cierre de abril su ocupación alcanzó sólo 14.79%. Los tres recintos feriales más importantes de la Ciudad de México: Centro Banamex, World Trade Center y Centro Bancomer, estaban trabajando a puerta cerrada.
La Oficina de Convenciones y Visitantes de la capital del país reportó que fueron pospuestos o cancelados cuatro grandes eventos con más de 47 mil asistentes: Expo Danza, Expo Meetings México, Congreso de Odontología Pediátrica y Liga Internacional de Tae Kwan Do.
En los Cabos, la ocupación hotelera se redujo en 28%, mientras que Puerto Vallarta registró la cancelación de mil 257 cuartos noche, lo que significaba una pérdida diaria de 1.6 millones de pesos.
Asimismo, Elizondo confirmó la cancelación de vuelos procedentes de Cuba, Canadá y Argentina y la reducción de frecuencias de Estados Unidos, a través de Continental Airlines; mientras que Ecuador, Perú y Chile habían determinado la misma medida.
En cuanto a la industria de cruceros, se cancelaron 64 arribos, que implicaban el potencial desembarque de 134 mil pasajeros; esto significaba una pérdida promedio de diez millones de dólares.
Y era sólo el comienzo.
ANUNCIAN APOYOS
Con el país semiparalizado, sin clases escolares, gran parte del comercio cerrado y la burocracia en su casa, la afectación económica llegó prácticamente a todos los sectores, además del turismo. Por esta razón, el 5 de mayo el Gobierno Federal anunció un paquete de subsidios y apoyos a todos los rubros de la economía.
El secretario de Hacienda, Agustín Cartens, informó que, con base en los observado en otros países, estimaba que el impacto sobre el crecimiento la economía mexicana sería de entre 0.3% y 0.5%, con un efecto pronunciado durante el segundo trimestre de 2009, pero seguido por una rápida recuperación.
“Sin embargo, esto no obsta para que algunos sectores resulten particularmente afectados, principalmente aquellos cuyos usuarios, por las aglomeraciones intrínsecas a sus actividades, sean propicios al contagio (espectáculos, entretenimiento, restaurantes) o bien que se vean afectados por la pérdida de confianza de los consumidores o usuarios (turismo internacional)”, explicó.
Algunas de las medidas fueron las siguientes: descuento de 20% en las cuotas patronales del IMSS durante mayo y junio; y reducción del pago mensual de las empresas del ISR, del pago en exceso que se hubiese realizado en el IETU.
En cuanto a la industria turística, solicitó a los gobiernos estatales que exenten del impuesto de nómina a hoteles, restaurantes y negocios de esparcimiento; así como el impuesto al hospedaje a los turistas. El Gobierno Federal les compensará a los estados el 25% de la pérdida por estas exenciones fiscales.
A las líneas aéreas se les otorgará un descuento de 50% a los derechos por los Servicios a la Navegación en el Espacio Aéreo Mexicano, de abril a junio, siempre y cuando se encuentren al corriente en sus pagos de este derecho.
A los cruceros se les eximirá del 50% del pago de derecho por los servicios que presta la capitanía de puerto y del derecho por el servicio migratorio extraordinario, de mayo a julio.
Además, se establecerá un fondo inicial de 200 millones de pesos para promoción al turismo, que podría aumentarse en caso de que se requiera.
Para el sector de servicios turísticos, Bancomext recalendarizará los pagos sobre su cartera existente y apoyará el capital de trabajo del sector. Asimismo, otorgará garantías por hasta el 75% en créditos para capital de trabajo a las empresas del sector hotelero en las regiones más afectadas. Igualmente, este banco apoyará a las líneas aéreas a través de créditos y garantías hasta por tres mil millones de pesos.
Aunque la crisis sanitaria comienza a disminuir, ésta aún continúa. Pero, mientras tanto, las autoridades turísticas del gobierno y la iniciativa privada trabajan ya en las campañas promocionales que lanzarán una vez que el gobierno declare que la crisis terminó, lo cual aún no se sabe cuándo sucederá. Pero, para entonces, ya estará lista la estrategia de lo que Alejandro Rojas definió como la campaña de “Un día después”, que marcará el inicio de la recuperación de la industria turística nacional.
Gustavo Armenta / México
kikka-roja.blogspot.com/