Algunos multimillonarios, como Warren Buffett, han declarado que algo está mal entre lo que debería ocurrir y lo que ocurre en la vida económica en Estados Unidos, donde poco queda del sueño americano
El sueño americano –tanto su mito como su realidad– ha sido anulado aquí y sólo los ricos pueden dormir. Esto no es simbólico; de hecho, está al centro de todo el debate político y social de Estados Unidos. La promesa de este país fue que todos, sin importar dónde y cómo nacieron, en la pobreza o en una mansión, si en este u otro país, de una raza u otra, tenían a su alcance la oportunidad de mejorar sus condiciones de vida para que fueran superiores a las de la generación anterior.