De tristezas compartidas y rabia colectiva
Jorge Moch
tumbaburros@yahoo.com
Para Minerva Noguera
Es inevitable, son plaga, surgen por todos lados. Abro el periódico y allí están a pie de página en forma de cintillo diciendo lo bien que los tartufos hacen su trabajo. Prendo la computadora y aparecen en forma de banner a pie de pantalla, cintilando las bondades del régimen. Enciendo la radio y brota el sonsonete, el monólogo (toda propaganda gubernamental es un monólogo) con estratégicos ornatos y voz amable que asegura que vivimos en democrática paz. Me despatarro frente a la televisión y allí están una vez y otra y otra y otra los mismos anuncios mentirosos del gobierno con actores que asemejan gente común: el niño alegre, la muchacha sonriente, el médico comprensivo y amable, el uniformado de rostro fiero pero maneras amistosas, el campesino satisfecho. Las voces melifluas de locutores y conductores de noticias, los discursos y las declaraciones de los políticos que hacen como si no fueran culpables de nada. Los falsos héroes de corbata. El fastidio.
Jorge Moch
tumbaburros@yahoo.com
Para Minerva Noguera
Es inevitable, son plaga, surgen por todos lados. Abro el periódico y allí están a pie de página en forma de cintillo diciendo lo bien que los tartufos hacen su trabajo. Prendo la computadora y aparecen en forma de banner a pie de pantalla, cintilando las bondades del régimen. Enciendo la radio y brota el sonsonete, el monólogo (toda propaganda gubernamental es un monólogo) con estratégicos ornatos y voz amable que asegura que vivimos en democrática paz. Me despatarro frente a la televisión y allí están una vez y otra y otra y otra los mismos anuncios mentirosos del gobierno con actores que asemejan gente común: el niño alegre, la muchacha sonriente, el médico comprensivo y amable, el uniformado de rostro fiero pero maneras amistosas, el campesino satisfecho. Las voces melifluas de locutores y conductores de noticias, los discursos y las declaraciones de los políticos que hacen como si no fueran culpables de nada. Los falsos héroes de corbata. El fastidio.