J. CARRASCO Y F. CASTELLANOS
El Partido Acción Nacional sólo gobierna en 11 de los 113 municipios del estado natal de Felipe Calderón. Aunque en ellos el narcotráfico también actúa a sus anchas, la mano dura presidencial no se dejó sentir ahí. A la hora de renovar alcaldías y diputados locales, todo indica que el llamado “michoacanazo” va a resultar un bumerang...
Con el narcotráfico activo prácticamente en todo Michoacán, el operativo policiaco militar desplegado por el presidente Felipe Calderón ante la proximidad de las elecciones del domingo 5 de julio se concentró en municipios donde su partido, el PAN, tiene escasa presencia.
Con la detención de 10 alcaldes y 20 funcionarios estatales y municipales por sus presuntas ligas con La Familia, Calderón no sólo provocó el desgobierno en parte de su entidad natal, sino que exacerbó el ambiente electoral.
Fuera de Uruapan, que desde 1996 está en manos del PAN, el despliegue del Ejército, la Policía Federal y la PGR se concentró en municipios controlados históricamente por el PRI y el PRD.
A pesar de que en la renovación del Congreso estatal en 2007 el PAN se colocó en segundo lugar, el partido de Felipe Calderón sólo gobierna en 11 de los 113 municipios. Como en el resto del estado, en las alcaldías panistas hay una fuerte presencia del narcotráfico.
De acuerdo con informes policiales, Uruapan es una de las bases de La Familia, pero además uno de los principales generadores de violencia en el estado; incluso su presidente municipal, Antonio González Rodríguez, fue uno de los 10 detenidos el 26 de mayo último.
El otro munícipe del PAN que está bajo acusación penal es José Luis Ávila Franco, de Ciudad Hidalgo. Esos mismos reportes indican que en otros municipios gobernados por el PAN, como La Piedad, Sahuayo y Zamora, hay una fuerte presencia de La Familia y del cártel del Milenio, que dirigen los hermanos Valencia.
La arremetida de Calderón no llegó hasta esos dominios panistas y se concentró en seis municipios gobernados por el PRI y dos por el PRD. Cinco de ellos pertenecen al distrito electoral federal XII, donde el PAN nunca ha tenido presencia. Se trata de las alcaldías de Apatzingán, Aquila, Coahuayana y Tepalcatepec, controladas por el PRI; y Buenavista, dominada por el PRD.
De acuerdo con una encuesta del Grupo Consulta Mitofsky, aplicada en viviendas entre el 5 y el 9 de junio, la acción ordenada por Calderón resultó contraproducente para su partido, que hasta ahora no ha obtenido un triunfo significativo en la entidad, bastión del PRD. Según la medición, el PRD tuvo un repunte, pues cuenta con 27% de las preferencias electorales para la renovación de la Cámara de Diputados federal.
Según el sondeo, el PRI ocupa el segundo lugar, con 23%, seguido por el PAN, con 22% de las estimaciones de voto. Sin embargo, una quinta parte de la población aún no tomaba una decisión o no quiso decir por quién sufragaría.
El presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso del estado, el diputado perredista Raúl Morón Orozco, sostiene que la apuesta de su partido es ganar nueve de los 12 distritos electorales. Actualmente, tiene ocho.
Y esboza un escenario optimista: el PRD, dice, tiene la ventaja en seis distritos, en tres más se encuentra en empate técnico y en los otros aún tiene posibilidad de ganar; por lo que atañe al PAN, puede retener los distritos de Zamora y Maravatío, mientras que el PRI quizá se mantenga en Zitácuaro.
Incertidumbre, rebatiñas
A partir del operativo calderonista del 26 de mayo, una treintena de municipios, casi una tercera parte de los que conforman el estado, quedaron trastocados. Los planes y programas de las administraciones, que apenas se iniciaron el año pasado y terminan en 2011, están en la incertidumbre debido a la falta de autoridad, sobre todo Aquila, el municipio más pobre del estado.
En 10 de ellos: Apatzingán, Aquila, Arteaga, Buena Vista, Ciudad Hidalgo, Coahuayana, Tepalcatepec, Tumbiscatío, Uruapan y Zitácuaro, las fuerzas federales detuvieron a sus presidentes. En otros 21, todos del PRI, los alcaldes se ampararon contra las detenciones. Sin embargo, algunos casi no acuden a sus oficinas, mientras que otros andan a salto de mata, según los reportes de la prensa local.
No obstante, en varios municipios prevalece la incertidumbre. La Ley Orgánica Municipal señala que en el caso de ausencia de un presidente municipal, en los primeros 15 días el encargado del despacho debe ser el secretario del Ayuntamiento; después la encomienda recaerá, también durante dos semanas, en el síndico.
Ante esta situación, el Congreso optó por que los encargados de despacho permanezcan por dos meses, aunque en algunos casos se registra vacío de gobierno debido a las disputas al interior de los partidos.
En la mayoría de los casos, los encargados son los síndicos. Pero en Aquila, contrario a la ley municipal, el cabildo decidió que permaneciera el secretario del Ayuntamiento, Diego Ramírez Tolentino. Desde entonces afuera del municipio hay un plantón permanente.
En Coahuayana, el PRI se fracturó por el control de la presidencia. Los regidores se dividieron entre María Vitalicia González, la esposa del alcalde detenido, Audel Méndez Chávez; y Noemí Benítez, quien finalmente quedó a cargo del despacho.
En el caso del PAN, la discordia fue por la presidencia de Uruapan. Como encargado de despacho quedó José Moreno Salas, quien logró imponerse a las pretensiones de la expresidenta municipal y actual candidata a diputada federal María de Jesús Doddoli Murguía.
En Buenavista, Tepalcatepec y Apatzingán los habitantes amenazan con boicotear las elecciones si no son liberados los presidentes de esos municipios; incluso viajaron a la Ciudad de México para hacer la petición formal ante las autoridades de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO).
Y es precisamente en la SIEDO donde tiene lugar una de las disputas entre Calderón y Godoy. El enfrentamiento no es nuevo. Desde los primeros días del sexenio, el entonces senador de Michoacán por el PRD cuestionó los nombramientos de Calderón en el área de seguridad pública, en particular el del procurador Eduardo Medina Mora.
La averiguación contra Godoy
En diciembre de 2006, a las pocas horas de la designación de Medina Mora, Godoy aseguró que ese nombramiento hecho por Calderón “no es buena señal porque (el) gobierno federal saliente fracasó en la lucha contra el crimen organizado y dejó esa facultad a los estados y municipios; hay que cambiar de raíz la política de seguridad pública”.
Godoy aludió a los altos cargos que ocupó Medina Mora en el sexenio de Vicente Fox en el área del combate a la delincuencia organizada, primero como director del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen) y luego como secretario de Seguridad Pública federal.
Medina Mora tiene ahora a Godoy en los expedientes de la PGR. Según publicó el periódico Reforma el sábado 20, desde el año pasado el mandatario michoacano está mencionado en la averiguación previa PGR/SIEDO/UEIDCS/398/20008. Se le acusa de haber recibido financiamiento de La Familia en su campaña electoral para gobernador.
De acuerdo con esa versión, “el enlace” de Godoy con ese cártel era “Citlali Hernández González”. Citlali Fernández –no Hernández– fue una de las funcionarias detenidas durante el operativo del 26 de mayo. Hasta febrero pasado, ella fue secretaria de Seguridad Pública del estado; al momento de su detención era asesora de Godoy.
En esa indagatoria se incluyen los nombres de los jefes de La Familia: Nazario Moreno González, El Chayo; Jesús Méndez Vargas, El Chango; Dionisio Loya Plancarte, El Tío; y Servando Gómez, La Tuta, a quienes la PGR no ha detenido a pesar de que sus nombres aparecen varias veces en los informes del propio gobierno de Calderón.
Otro enfrentamiento de Godoy con Calderón ocurrió en octubre de 2007, durante una gira que el mandatario hizo a Morelia. Godoy declaró en esa ocasión que el presidente estaba interviniendo en la campaña electoral, pues días antes había dicho que con sus programas de gobierno “a Michoacán le va a ir muy bien”. Ese era el lema de Salvador López Orduña, su contrincante panista.
A su vez, la presidenta del PRD en Michoacán, Fabiola Alanís, asegura que en el primer trimestre de este año, el gobierno de Calderón dejó de transferir al gobierno del estado mil 200 millones de pesos en partidas federales, lo que equivale al presupuesto de varias secretarías del gobierno juntas.
Sin embargo, uno de los principales terrenos de la confrontación es el judicial. Después de la detención de los alcaldes y de varios de sus colaboradores, entre ellos el procurador Miguel García Hurtado, en el Distrito Federal se filtró a la prensa que había “un paquete” de por lo menos 30 funcionarios que podrían ser detenidos.
El martes 23, Godoy acusó a funcionarios de la PGR de ser los responsables de las filtraciones a la prensa sobre sus supuestos vínculos con La Familia. El mandatario aseguró que hay una campaña mediática en su contra y una “guerra sucia en contra de nosotros y el PRD en Michoacán, en virtud de que quieren sacarle raja política a una investigación que debería ser objetiva, imparcial y apegada a derecho”.
Y ese mismo día Calderón respondió. En un improvisado discurso en Xochitepec, Morelos, declaró que la única manera de no caer en las manos de la justicia en México es no violar la ley. “Más vale que lo vayan sabiendo todos los que tienen algo de qué preocuparse”, declaró, en clara alusión a Godoy.
Y añadió que su gobierno no le informó del operativo en Michoacán porque, dijo, “nuestro trabajo (es) perseguir a la delincuencia, y debe quedar claro que no hay consideración política, económica o de nacionalidad que valga para hacer valer la ley en México”.
El jueves 25, el juzgado segundo de distrito en material penal, con cede en Tepic, Nayarit, dictó auto de formal prisión en contra de 20 exservidores públicos y los alcaldes de Apatzingán, Tepecaltepec, Arteaga, Uruapan, Ciudad Hidago, Tumbiscatío y Zitácuaro (cuatro del PRI, dos del PAN y uno del PRD). Todos ellos serán juzgados por los delitos de delincuencia organizada y contra la salud.
Según el diputado perredista Raúl Morón Orozco, la confrontación entre Calderón y Godoy no terminará con las elecciones. El presidente, arguye, “está tratando a Michoacán como un estado de excepción; no se va a detener. Por eso nos estamos preparando para derrotar al PAN y a su presidente”.
kikka-roja.blogspot.com/
Con el narcotráfico activo prácticamente en todo Michoacán, el operativo policiaco militar desplegado por el presidente Felipe Calderón ante la proximidad de las elecciones del domingo 5 de julio se concentró en municipios donde su partido, el PAN, tiene escasa presencia.
Con la detención de 10 alcaldes y 20 funcionarios estatales y municipales por sus presuntas ligas con La Familia, Calderón no sólo provocó el desgobierno en parte de su entidad natal, sino que exacerbó el ambiente electoral.
Fuera de Uruapan, que desde 1996 está en manos del PAN, el despliegue del Ejército, la Policía Federal y la PGR se concentró en municipios controlados históricamente por el PRI y el PRD.
A pesar de que en la renovación del Congreso estatal en 2007 el PAN se colocó en segundo lugar, el partido de Felipe Calderón sólo gobierna en 11 de los 113 municipios. Como en el resto del estado, en las alcaldías panistas hay una fuerte presencia del narcotráfico.
De acuerdo con informes policiales, Uruapan es una de las bases de La Familia, pero además uno de los principales generadores de violencia en el estado; incluso su presidente municipal, Antonio González Rodríguez, fue uno de los 10 detenidos el 26 de mayo último.
El otro munícipe del PAN que está bajo acusación penal es José Luis Ávila Franco, de Ciudad Hidalgo. Esos mismos reportes indican que en otros municipios gobernados por el PAN, como La Piedad, Sahuayo y Zamora, hay una fuerte presencia de La Familia y del cártel del Milenio, que dirigen los hermanos Valencia.
La arremetida de Calderón no llegó hasta esos dominios panistas y se concentró en seis municipios gobernados por el PRI y dos por el PRD. Cinco de ellos pertenecen al distrito electoral federal XII, donde el PAN nunca ha tenido presencia. Se trata de las alcaldías de Apatzingán, Aquila, Coahuayana y Tepalcatepec, controladas por el PRI; y Buenavista, dominada por el PRD.
De acuerdo con una encuesta del Grupo Consulta Mitofsky, aplicada en viviendas entre el 5 y el 9 de junio, la acción ordenada por Calderón resultó contraproducente para su partido, que hasta ahora no ha obtenido un triunfo significativo en la entidad, bastión del PRD. Según la medición, el PRD tuvo un repunte, pues cuenta con 27% de las preferencias electorales para la renovación de la Cámara de Diputados federal.
Según el sondeo, el PRI ocupa el segundo lugar, con 23%, seguido por el PAN, con 22% de las estimaciones de voto. Sin embargo, una quinta parte de la población aún no tomaba una decisión o no quiso decir por quién sufragaría.
El presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso del estado, el diputado perredista Raúl Morón Orozco, sostiene que la apuesta de su partido es ganar nueve de los 12 distritos electorales. Actualmente, tiene ocho.
Y esboza un escenario optimista: el PRD, dice, tiene la ventaja en seis distritos, en tres más se encuentra en empate técnico y en los otros aún tiene posibilidad de ganar; por lo que atañe al PAN, puede retener los distritos de Zamora y Maravatío, mientras que el PRI quizá se mantenga en Zitácuaro.
Incertidumbre, rebatiñas
A partir del operativo calderonista del 26 de mayo, una treintena de municipios, casi una tercera parte de los que conforman el estado, quedaron trastocados. Los planes y programas de las administraciones, que apenas se iniciaron el año pasado y terminan en 2011, están en la incertidumbre debido a la falta de autoridad, sobre todo Aquila, el municipio más pobre del estado.
En 10 de ellos: Apatzingán, Aquila, Arteaga, Buena Vista, Ciudad Hidalgo, Coahuayana, Tepalcatepec, Tumbiscatío, Uruapan y Zitácuaro, las fuerzas federales detuvieron a sus presidentes. En otros 21, todos del PRI, los alcaldes se ampararon contra las detenciones. Sin embargo, algunos casi no acuden a sus oficinas, mientras que otros andan a salto de mata, según los reportes de la prensa local.
No obstante, en varios municipios prevalece la incertidumbre. La Ley Orgánica Municipal señala que en el caso de ausencia de un presidente municipal, en los primeros 15 días el encargado del despacho debe ser el secretario del Ayuntamiento; después la encomienda recaerá, también durante dos semanas, en el síndico.
Ante esta situación, el Congreso optó por que los encargados de despacho permanezcan por dos meses, aunque en algunos casos se registra vacío de gobierno debido a las disputas al interior de los partidos.
En la mayoría de los casos, los encargados son los síndicos. Pero en Aquila, contrario a la ley municipal, el cabildo decidió que permaneciera el secretario del Ayuntamiento, Diego Ramírez Tolentino. Desde entonces afuera del municipio hay un plantón permanente.
En Coahuayana, el PRI se fracturó por el control de la presidencia. Los regidores se dividieron entre María Vitalicia González, la esposa del alcalde detenido, Audel Méndez Chávez; y Noemí Benítez, quien finalmente quedó a cargo del despacho.
En el caso del PAN, la discordia fue por la presidencia de Uruapan. Como encargado de despacho quedó José Moreno Salas, quien logró imponerse a las pretensiones de la expresidenta municipal y actual candidata a diputada federal María de Jesús Doddoli Murguía.
En Buenavista, Tepalcatepec y Apatzingán los habitantes amenazan con boicotear las elecciones si no son liberados los presidentes de esos municipios; incluso viajaron a la Ciudad de México para hacer la petición formal ante las autoridades de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO).
Y es precisamente en la SIEDO donde tiene lugar una de las disputas entre Calderón y Godoy. El enfrentamiento no es nuevo. Desde los primeros días del sexenio, el entonces senador de Michoacán por el PRD cuestionó los nombramientos de Calderón en el área de seguridad pública, en particular el del procurador Eduardo Medina Mora.
La averiguación contra Godoy
En diciembre de 2006, a las pocas horas de la designación de Medina Mora, Godoy aseguró que ese nombramiento hecho por Calderón “no es buena señal porque (el) gobierno federal saliente fracasó en la lucha contra el crimen organizado y dejó esa facultad a los estados y municipios; hay que cambiar de raíz la política de seguridad pública”.
Godoy aludió a los altos cargos que ocupó Medina Mora en el sexenio de Vicente Fox en el área del combate a la delincuencia organizada, primero como director del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen) y luego como secretario de Seguridad Pública federal.
Medina Mora tiene ahora a Godoy en los expedientes de la PGR. Según publicó el periódico Reforma el sábado 20, desde el año pasado el mandatario michoacano está mencionado en la averiguación previa PGR/SIEDO/UEIDCS/398/20008. Se le acusa de haber recibido financiamiento de La Familia en su campaña electoral para gobernador.
De acuerdo con esa versión, “el enlace” de Godoy con ese cártel era “Citlali Hernández González”. Citlali Fernández –no Hernández– fue una de las funcionarias detenidas durante el operativo del 26 de mayo. Hasta febrero pasado, ella fue secretaria de Seguridad Pública del estado; al momento de su detención era asesora de Godoy.
En esa indagatoria se incluyen los nombres de los jefes de La Familia: Nazario Moreno González, El Chayo; Jesús Méndez Vargas, El Chango; Dionisio Loya Plancarte, El Tío; y Servando Gómez, La Tuta, a quienes la PGR no ha detenido a pesar de que sus nombres aparecen varias veces en los informes del propio gobierno de Calderón.
Otro enfrentamiento de Godoy con Calderón ocurrió en octubre de 2007, durante una gira que el mandatario hizo a Morelia. Godoy declaró en esa ocasión que el presidente estaba interviniendo en la campaña electoral, pues días antes había dicho que con sus programas de gobierno “a Michoacán le va a ir muy bien”. Ese era el lema de Salvador López Orduña, su contrincante panista.
A su vez, la presidenta del PRD en Michoacán, Fabiola Alanís, asegura que en el primer trimestre de este año, el gobierno de Calderón dejó de transferir al gobierno del estado mil 200 millones de pesos en partidas federales, lo que equivale al presupuesto de varias secretarías del gobierno juntas.
Sin embargo, uno de los principales terrenos de la confrontación es el judicial. Después de la detención de los alcaldes y de varios de sus colaboradores, entre ellos el procurador Miguel García Hurtado, en el Distrito Federal se filtró a la prensa que había “un paquete” de por lo menos 30 funcionarios que podrían ser detenidos.
El martes 23, Godoy acusó a funcionarios de la PGR de ser los responsables de las filtraciones a la prensa sobre sus supuestos vínculos con La Familia. El mandatario aseguró que hay una campaña mediática en su contra y una “guerra sucia en contra de nosotros y el PRD en Michoacán, en virtud de que quieren sacarle raja política a una investigación que debería ser objetiva, imparcial y apegada a derecho”.
Y ese mismo día Calderón respondió. En un improvisado discurso en Xochitepec, Morelos, declaró que la única manera de no caer en las manos de la justicia en México es no violar la ley. “Más vale que lo vayan sabiendo todos los que tienen algo de qué preocuparse”, declaró, en clara alusión a Godoy.
Y añadió que su gobierno no le informó del operativo en Michoacán porque, dijo, “nuestro trabajo (es) perseguir a la delincuencia, y debe quedar claro que no hay consideración política, económica o de nacionalidad que valga para hacer valer la ley en México”.
El jueves 25, el juzgado segundo de distrito en material penal, con cede en Tepic, Nayarit, dictó auto de formal prisión en contra de 20 exservidores públicos y los alcaldes de Apatzingán, Tepecaltepec, Arteaga, Uruapan, Ciudad Hidago, Tumbiscatío y Zitácuaro (cuatro del PRI, dos del PAN y uno del PRD). Todos ellos serán juzgados por los delitos de delincuencia organizada y contra la salud.
Según el diputado perredista Raúl Morón Orozco, la confrontación entre Calderón y Godoy no terminará con las elecciones. El presidente, arguye, “está tratando a Michoacán como un estado de excepción; no se va a detener. Por eso nos estamos preparando para derrotar al PAN y a su presidente”.