- El camino, promover una reforma por iniciativa popular
- Chávez todavía puede buscar relección: alcalde de Caracas
- Descarta que el caso Cemex dañe las relaciones Venezuela-México
Georgina Saldierna
Las opciones legales para que Hugo Chávez continúe en la presidencia de Venezuela luego de 2012 no se han cerrado y todavía existe la posibilidad de promover una enmienda que permita ir a la relección continua, señaló ayer Freddy Bernal, alcalde de Caracas, quien al referirse por otra parte a las relaciones diplomáticas entre México y su país descartó que la normalización pudiera verse afectada por la nacionalización de Cementos Mexicanos (Cemex).
Se manifestó satisfecho de que los directivos de Cemex hayan vuelto a la mesa de negociación para definir el precio de la compañía, y estimó que en ese tema se puede llegar a un acuerdo.
De visita en México para participar en un foro de alcaldes de América Latina, el munícipe de Caracas consideró que es indispensable que Hugo Chávez siga en la presidencia muchos años para avanzar en el proyecto del socialismo del siglo XXI. Con el fin de lograr ese objetivo, manifestó que aún queda la opción de introducir una reforma constitucional por iniciativa popular.
En torno al referendo en que la población rechazó la relección del presidente, puntualizó que la iniciativa se perdió por menos de un punto de diferencia. Quizá ello se debió, dijo, a que en dicho proceso se propuso la reforma de 66 artículos constitucionales relacionados con la estructura del gobierno, la administración de los recursos y la permanencia del mandatario. La propuesta era muy compleja y tal vez por eso no se aprobó, subrayó. Luego señaló que faltó poco para ganar, “pero no nos hubiera gustado ganar con poco. Queríamos triunfar con la fuerza suficiente para que la reforma tuviera legalidad y legitimidad. Con pocos puntos hubiera sido difícil implementarla”. Miembro de la dirección del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), heredero del Movimiento Quinta República (MVR) y personaje prominente del chavismo, Freddy Bernal explicó que su instituto político no ha decidido si va a promover la enmienda constitucional por iniciativa popular, pero de hacerlo se someterían a consulta modificaciones a dos o tres artículos constitucionales, nada más, “para ser muy puntuales”.
Descartó que la eventual salida de Hugo Chávez del gobierno pudiera hacer retroceder los programas sociales y los logros de su administración. Advirtió que una pretensión de esa naturaleza por cualquier otro gobierno provocaría violencia en ese país. Sobre el PSUV enfatizó que “está concebido como instancia garante de la revolución y la democracia”, y no sólo como maquinaria electoral capaz de ganar elecciones. A un año de su creación tiene 5 millones 700 mil inscritos, posee una dirección colectiva y se ha constituido en vigilante de la acción de gobierno. Miembro de la resistencia contra el presidente de facto Pedro Carmona, impuesto durante el golpe de Estado contra Chávez de 2002, el alcalde aseveró que Venezuela se encuentra en transición al socialismo, en la que conviven formas capitalistas de producción con figuras como la desconcentración del poder, la participación popular y la autogestión.
Es un modelo único, que no se parece al de Cuba ni al de China, puntualizó.
Se manifestó satisfecho de que los directivos de Cemex hayan vuelto a la mesa de negociación para definir el precio de la compañía, y estimó que en ese tema se puede llegar a un acuerdo.
De visita en México para participar en un foro de alcaldes de América Latina, el munícipe de Caracas consideró que es indispensable que Hugo Chávez siga en la presidencia muchos años para avanzar en el proyecto del socialismo del siglo XXI. Con el fin de lograr ese objetivo, manifestó que aún queda la opción de introducir una reforma constitucional por iniciativa popular.
En torno al referendo en que la población rechazó la relección del presidente, puntualizó que la iniciativa se perdió por menos de un punto de diferencia. Quizá ello se debió, dijo, a que en dicho proceso se propuso la reforma de 66 artículos constitucionales relacionados con la estructura del gobierno, la administración de los recursos y la permanencia del mandatario. La propuesta era muy compleja y tal vez por eso no se aprobó, subrayó. Luego señaló que faltó poco para ganar, “pero no nos hubiera gustado ganar con poco. Queríamos triunfar con la fuerza suficiente para que la reforma tuviera legalidad y legitimidad. Con pocos puntos hubiera sido difícil implementarla”. Miembro de la dirección del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), heredero del Movimiento Quinta República (MVR) y personaje prominente del chavismo, Freddy Bernal explicó que su instituto político no ha decidido si va a promover la enmienda constitucional por iniciativa popular, pero de hacerlo se someterían a consulta modificaciones a dos o tres artículos constitucionales, nada más, “para ser muy puntuales”.
Descartó que la eventual salida de Hugo Chávez del gobierno pudiera hacer retroceder los programas sociales y los logros de su administración. Advirtió que una pretensión de esa naturaleza por cualquier otro gobierno provocaría violencia en ese país. Sobre el PSUV enfatizó que “está concebido como instancia garante de la revolución y la democracia”, y no sólo como maquinaria electoral capaz de ganar elecciones. A un año de su creación tiene 5 millones 700 mil inscritos, posee una dirección colectiva y se ha constituido en vigilante de la acción de gobierno. Miembro de la resistencia contra el presidente de facto Pedro Carmona, impuesto durante el golpe de Estado contra Chávez de 2002, el alcalde aseveró que Venezuela se encuentra en transición al socialismo, en la que conviven formas capitalistas de producción con figuras como la desconcentración del poder, la participación popular y la autogestión.
Es un modelo único, que no se parece al de Cuba ni al de China, puntualizó.
Kikka Roja
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