- Regresó impuestos por casi $680 mil millones y dio créditos fiscales por 500 mil millones
- Gil Díaz benefició a empresas con más de un billón de pesos: ASF
- La devolución de IVA e ISR entre 2001-2005 superó en 216% la inversión privada de esos años
Roberto Garduño y Enrique Méndez
La Auditoría Superior de la Federación (ASF) descubrió que en el sexenio de Vicente Fox el Sistema de Administración Tributaria (SAT) pagó al sector empresarial 679 mil 691 millones de pesos por concepto de devolución de impuestos, y la Secretaría de Hacienda benefició con créditos fiscales al sector productivo con 495 mil 807 millones de pesos. Es decir, en cinco años analizados por el órgano fiscalizador, la administración foxista, a través del secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, favoreció a la iniciativa privada con más de un billón 175 mil 498 millones de pesos.
Sólo la devolución de IVA e ISR, acumulada entre 2001 y 2005, cuya cifra fue de 604 mil 366 millones de pesos, superó en 216 por ciento a la inversión privada que se registró entre esos años y cuyo monto ascendió a 279 mil 832 millones de pesos. En un documento elaborado por la ASF, que fue entregado a los diputados federales, ahora el órgano encargado de revisar el manejo de los recursos públicos se da por satisfecho con una propuesta del gobierno de Felipe Calderón para reducir, a partir del año próximo, el porcentaje del monto de impuestos que serán devueltos y acotar los créditos fiscales, sin emitir recomendación a la administración federal para que subsane el citado deterioro al erario. El texto, del cual se tiene copia, refiere las auditorías que el titular de la ASF, Arturo González de Aragón, considera “delicadas” por el grado de afectación que implican muchas de ellas a las finanzas públicas. En el caso de los impuestos, el órgano revisor manifiesta lo siguiente: “En el periodo del año 2000 a 2005, el SAT pagó a los contribuyentes 679 mil 691 millones de pesos por concepto de devoluciones de impuestos, 79.4 por ciento correspondió a IVA y 14.5 por ciento al ISR. En ese periodo las devoluciones representaron 16.3 por ciento de la recaudación tributaria efectiva. Las devoluciones acumuladas de 2001 a 2005 por 604 mil 366 millones de pesos superaron en 216 por ciento al incremento en la inversión privada, que fue de 279 mil 832 millones de pesos, lo que aparentemente contradice la hipótesis de que una menor tributación libera recursos para incrementar la formación bruta de capital”.
A decir de la Auditoría, la existencia de regímenes especiales en IVA e ISR “propicia situaciones de privilegio a ciertos grupos de contribuyentes y ramas de actividad económica”. En el caso de los créditos fiscales, de 2001 a 2005 el saldo de los mismos pasó de representar 27 por ciento de los ingresos ordinarios del gobierno federal a 35.1 por ciento, destacando que, entre 2003 y 2004, la variación de ese saldo superó al incremento de la recaudación. “Los créditos controvertidos ascendieron a 40.3 por ciento de la cartera y la recaudación que se obtuvo durante 2005, del orden de 8 mil 522 millones de pesos, únicamente representó 1.7 por ciento de la cartera total, cuya cifra se ubicó entonces en 495 mil 807 millones de pesos. La existencia de tratamientos preferenciales, regímenes especiales, omisiones e imprecisiones en la legislación tributaria propicia la generación de elevados créditos fiscales, afecta la eficiencia recaudatoria y, en parte, explica el bajo coeficiente de recuperación de dichos créditos”.
En ambos casos, la respuesta que dio el Auditor Superior de la Federación, que es empleado de la Cámara de Diputados, incluyó los siguientes argumentos: Para el caso de la devolución de impuestos se admitieron tres recomendaciones. Una para mejorar la integración de expedientes de devolución. Otra para realizar estudios y presentar iniciativas tendientes a acotar los regímenes especiales de tributación, así como los tratamientos preferenciales otorgados por las leyes del IVA e ISR. Y una tercera para definir indicadores de medición del cumplimiento de metas en materia recaudatoria y los beneficios asociados a las devoluciones. La SHCP atendió las tres recomendaciones, ya que elaboró estudios y propuestas que fueron sometidas al Congreso de la Unión como parte de la iniciativa de reforma hacendaria. La misma dependencia giró instrucciones para elaborar indicadores estratégicos, de gestión y de servicios que permitan evaluar el proceso de trámite de las devoluciones y su impacto en la actividad económica. Asimismo, instruyó al SAT para que “se realicen actos de supervisión que garanticen la debida integración de los expedientes de devoluciones de impuesto”.
En el terreno de los créditos fiscales, manifiesta la ASF, se emitieron dos recomendaciones que fueron bienvenidas por el órgano fiscalizador, para formular estudios que permitieran valorar y proponer modificaciones a la legislación tributaria (Código Fiscal de la Federación y las leyes del ISR, IVA e IEPS), a efecto de eliminar regímenes especiales, omisiones e imprecisiones, evitar lagunas o vacíos normativos, con el fin de abatir los créditos fiscales, reducir el número de juicios e incrementar la recaudación. “El SAT atendió las recomendaciones, ya que elaboró estudios para ser incorporados a la iniciativa de reforma hacendaria. En esos estudios se precisan de mejor manera las fechas en que se ha de dar trámite a la solicitud de información por parte de los causantes, así como modificaciones a las disposiciones legales y normativas para solucionar la problemática”.
Sólo la devolución de IVA e ISR, acumulada entre 2001 y 2005, cuya cifra fue de 604 mil 366 millones de pesos, superó en 216 por ciento a la inversión privada que se registró entre esos años y cuyo monto ascendió a 279 mil 832 millones de pesos. En un documento elaborado por la ASF, que fue entregado a los diputados federales, ahora el órgano encargado de revisar el manejo de los recursos públicos se da por satisfecho con una propuesta del gobierno de Felipe Calderón para reducir, a partir del año próximo, el porcentaje del monto de impuestos que serán devueltos y acotar los créditos fiscales, sin emitir recomendación a la administración federal para que subsane el citado deterioro al erario. El texto, del cual se tiene copia, refiere las auditorías que el titular de la ASF, Arturo González de Aragón, considera “delicadas” por el grado de afectación que implican muchas de ellas a las finanzas públicas. En el caso de los impuestos, el órgano revisor manifiesta lo siguiente: “En el periodo del año 2000 a 2005, el SAT pagó a los contribuyentes 679 mil 691 millones de pesos por concepto de devoluciones de impuestos, 79.4 por ciento correspondió a IVA y 14.5 por ciento al ISR. En ese periodo las devoluciones representaron 16.3 por ciento de la recaudación tributaria efectiva. Las devoluciones acumuladas de 2001 a 2005 por 604 mil 366 millones de pesos superaron en 216 por ciento al incremento en la inversión privada, que fue de 279 mil 832 millones de pesos, lo que aparentemente contradice la hipótesis de que una menor tributación libera recursos para incrementar la formación bruta de capital”.
A decir de la Auditoría, la existencia de regímenes especiales en IVA e ISR “propicia situaciones de privilegio a ciertos grupos de contribuyentes y ramas de actividad económica”. En el caso de los créditos fiscales, de 2001 a 2005 el saldo de los mismos pasó de representar 27 por ciento de los ingresos ordinarios del gobierno federal a 35.1 por ciento, destacando que, entre 2003 y 2004, la variación de ese saldo superó al incremento de la recaudación. “Los créditos controvertidos ascendieron a 40.3 por ciento de la cartera y la recaudación que se obtuvo durante 2005, del orden de 8 mil 522 millones de pesos, únicamente representó 1.7 por ciento de la cartera total, cuya cifra se ubicó entonces en 495 mil 807 millones de pesos. La existencia de tratamientos preferenciales, regímenes especiales, omisiones e imprecisiones en la legislación tributaria propicia la generación de elevados créditos fiscales, afecta la eficiencia recaudatoria y, en parte, explica el bajo coeficiente de recuperación de dichos créditos”.
En ambos casos, la respuesta que dio el Auditor Superior de la Federación, que es empleado de la Cámara de Diputados, incluyó los siguientes argumentos: Para el caso de la devolución de impuestos se admitieron tres recomendaciones. Una para mejorar la integración de expedientes de devolución. Otra para realizar estudios y presentar iniciativas tendientes a acotar los regímenes especiales de tributación, así como los tratamientos preferenciales otorgados por las leyes del IVA e ISR. Y una tercera para definir indicadores de medición del cumplimiento de metas en materia recaudatoria y los beneficios asociados a las devoluciones. La SHCP atendió las tres recomendaciones, ya que elaboró estudios y propuestas que fueron sometidas al Congreso de la Unión como parte de la iniciativa de reforma hacendaria. La misma dependencia giró instrucciones para elaborar indicadores estratégicos, de gestión y de servicios que permitan evaluar el proceso de trámite de las devoluciones y su impacto en la actividad económica. Asimismo, instruyó al SAT para que “se realicen actos de supervisión que garanticen la debida integración de los expedientes de devoluciones de impuesto”.
En el terreno de los créditos fiscales, manifiesta la ASF, se emitieron dos recomendaciones que fueron bienvenidas por el órgano fiscalizador, para formular estudios que permitieran valorar y proponer modificaciones a la legislación tributaria (Código Fiscal de la Federación y las leyes del ISR, IVA e IEPS), a efecto de eliminar regímenes especiales, omisiones e imprecisiones, evitar lagunas o vacíos normativos, con el fin de abatir los créditos fiscales, reducir el número de juicios e incrementar la recaudación. “El SAT atendió las recomendaciones, ya que elaboró estudios para ser incorporados a la iniciativa de reforma hacendaria. En esos estudios se precisan de mejor manera las fechas en que se ha de dar trámite a la solicitud de información por parte de los causantes, así como modificaciones a las disposiciones legales y normativas para solucionar la problemática”.
Kikka Roja